El vox populi considera a 3 candidatos a la cámara casi como ganadores seguros, siendo una curul motivo de especulación y cábalas, que la alcaldía apoya al uno, que al otro sale por ser segundo renglón, que el otro tiene el umbral. Mucho ruido y poca sustancia.
Bastante se ha dicho sobre el famoso umbral, pero poco se ha tenido en cuenta la cifra repartidora, primero se debe entender que a partir de la reforma al sistema electoral, se busca fomentar los partidos, por lo que el primer voto es para el partido, después por el candidato, si así se le permite (El único que no es el Centro Democrático a la cámara), resultando dos elecciones en una. Primero se elige los que entran a la fiesta (el umbral) después se eligen cuantos se paran a bailar (cifra repartidora) y finalmente los nombres de los que bailan.
Para ilustrar la explicación el mejor ejemplo es la última elección al concejo de Valledupar, donde el umbral fue de 3.303 votos y la cifra repartidora de: 4.679 votos lo que genero casos vistosos como el del Polo, AFROVIDES y Autoridades Indígenas, que alcanzaron el umbral, pero no la cifra repartidora, es decir, entro a la fiesta, pero no bailó. Otro caso vistoso el del partido liberal, donde alcanzaron el umbral, la cifra repartidora, y 2 salieron a bailar “arrastrados”.
¿Qué es lo que se busca con estos escenarios? Trabajo de partido. No más personalismos. Varios candidatos fuertes que se ayuden entre ellos, el líder “arrastra” a los siguientes, razón por la cual las primeras cabezas de los partidos al senado son líderes de opinión claros y contundentes, porque ya no trabajan por su curul, sino por la de sus compañeros.
Caso opuesto, es el vivido en nuestro departamento, donde un candidato se retiró, afectando de manera importante el equipo. Cuando los demás tienen 4 jugadores, ellos tienen 3. Difícil que entre a la fiesta, pero aún más difícil que se pare a bailar.
Caso también cuando hay partidos que tienen el umbral seguro por la fortaleza de los candidatos que lo componen. Pero pararse a bailar dentro de esa fiesta es sumamente difícil, ya que al haber tantos candidatos con altas votaciones, puede terminar trabajando para ellos los votos del que no es tan fuerte.
Entrando a la fiesta, pero quedándose sentado sin bailar. Escenario del partido de la U al senado.
O lo opuesto, donde hay candidatos no con tan altas fortalezas electorales, pero con una cabeza de lista fuerte como Antonio Navarro liderando al senado de los verdes, escenario donde él tiene parece que tiene asegurada la entrada a la fiesta, como pararse a bailar, pero con la cifra repartidora, arrastre a algún cesarense. Idéntico es el caso de Centro Democrático que lidera Álvaro Uribe.
Finalmente, lo más importante es pensar el voto, preguntarse: ¿Qué significa que el Cesar no tenga senador? ¿Será que esos senadores foráneos representaran los intereses del Cesar en debates? ¿Volverán aunque sea a hacer rendiciones de cuentas?¿Lideraran leyes que nos protejan?
PD. El peor escenario para el departamento del Cesar es no tener senado. #piensatuvoto
