La primera canción que Sara Valentina Mora Mangones aprendió en el acordeón fue ‘La piña madura’, de la autoría de Eulalio Meléndez y popularizada en la voz de Guillermo Buitrago. Apenas tenía 6 años e inició las clases motivada por el profesor de su papá, quien aprendía a tocar y era corregido por ella, demostrando su agudo oído musical. 

“Desde que yo era muy pequeñita, mi papá tocaba el acordeón y yo me sentaba al lado de él para poder escuchar el instrumento, yo lo corregía cuando se equivocaba.”, relata Sara, oriunda de Montelíbano, Córdoba. 

Ahora tiene 10 años y es más que una aprendiz, en la edición del 58° Festival de la Leyenda Vallenata ocupó el tercer puesto en la gran final del concurso Acordeonera Menor, superando a colegas con mayor edad y experiencias.

Destacó en el Festival Vallenato

Sara ha participado en el Festival en dos ocasiones. El año pasado, logró llegar a la semifinal y quedó en cuarto lugar, pero en este 2025 volvió con más confianza y superó su propio récord ubicándose en el podio, al lado de la reina María José Arias y la virreina Laura Moreno Ortega.  

Entre las piezas que interpretó este año destacan ‘No me guardes el luto’ y ‘El gallo jabao’, de Luis Enrique Martínez; ‘El tigre de la uña Roma’, de Francisco ‘Pacho’ Rada, y la puya ‘La que canta y toca’, de su autoría. 

“Mucho gusto, me presento, 
yo me llamo Sara Mora
Yo soy la que canta y toca
y a todo el mundo emociona
Desde muy temprana edad 
me enamoró este instrumento 
Un sueño de mi papá, hoy se lo convierto en cierto
Y ante el público presente yo demuestro mi talento
Estos versos que yo canto a mi madre que está ahí
y con la ovación de ustedes hoy yo me corono aquí”, dice la canción. 

Asegura que ser reina ratificaría su talento, no por la fama, sino por el prestigio que le daría al cumplir otra meta: convertirse en maestra de acordeón y enseñar a otras niñas a amar este instrumento. “Lo que yo quiero estudiar es el acordeón, enseñar a los niños a aprender sobre el acordeón”, afirma con convicción. 
Mora seguirá presentándose hasta lograr la corona porque cree que los sacrificios traen recompensas y  es el mensaje que envía a quienes tienen el mismo objetivo. “Si son mujeres y tienen un sueño, nunca se rindan porque el sacrificio trae recompensa y aunque la gente, los hombres, se burlen de nosotras, tenemos que dar lo mejor de nosotros”. Afortunadamente, Sara cuenta con el respaldo de su familia, su profesor y la comunidad de Montelíbano, quienes la acompañan en cada paso de su carrera. 
Entre sus referentes figuran la Reina Menor Isabel Sofía Picón, de quien destaca “su manera de tocar, sus gestos en la cara y  como desde niña fue escalando”.

Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN
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