Julio César Casadiegos Navarro dejará de ser diputado del Cesar en los próximos días, siempre y cuando la Asamblea en pleno acepte la renuncia que envió desde Canadá, y que solamente llegó ayer de manera oficial.

El integrante de Cambio Radical y quien fue elegido con 7.666 votos en las pasadas elecciones del 25 de octubre de 2015, advirtió que la decisión “ha sido consecuencia de una serie de hechos ajenos a nuestra voluntad de poder continuar ejerciendo la representación política activa”.

“He sido víctima de distintas manifestaciones de matoneo, agresiones verbales y físicas por compañeros diputados, inclusive he sufrido la vulneración a mis derechos en pleno ejercicio”, narró Casadiegos Navarro en el escrito, que le confirmó a EL PILÓN remitió vía correo electrónico desde el país norteamericano.

Denunció: “Ha sido constante la persecución que ha existido en mi contra, hasta el punto de recibir una serie de amenazas de muerte, que atentan contra mi derecho a la vida e integridad y de toda mi familia; amenazas que se encuentran debidamente denuncias ante la Fiscalía de Colombia”. Claramente Julio Casadiegos dijo que está pidiendo un asilo en Canadá, por múltiples amenazas que hoy son de conocimiento de las autoridades, incluso de la Asamblea del Cesar.

Manifestó que la Unidad Nacional de Protección simplemente le otorgó un chaleco antibalas y un botón de alarma: “Como si fuesen las medidas necesarias que pueden proteger mi vida e integridad y la de toda mi familia; cuando hemos denunciado con nombres propios quienes son los responsables de los actos de corrupción”.

Y finalmente recalcó una frustración porque “la realidad sea abiertamente conocida, de la manera cómo opera la corrupción y ante la mirada de los entes de control, pero nada lleva a la búsqueda de los responsables penalmente, condenando nuestra gente a ser víctimas de quienes apoderan del erario, quedando en bolsillos particulares y de familias que siempre han visto la política como negocio”.

“Las relaciones aquí no son de amigos”

El presidente de la Asamblea, Omar Benjumea, declaró ante los medios de comunicación que sobre las 8:43 de la mañana, de este martes, se recibió por los canales oficiales una carta de renuncia irrevocable de Julio Casadiegos.

“Según el reglamento, en el Artículo 253, lo que sigue es que los diputados miramos el tema y tenemos 10 días para decidir sobre el asunto, que seguramente será aceptar. Algunos diputados han manifestado su intención de abstenerse en la votación”, confirmó Benjumea.

El documento llegó desde el correo electrónico que Casadiegos tiene registrado y fue remitida al email oficial de la Asamblea.

“Él (Julio) a mí o a la mesa directiva nunca manifestó amenazas ciertas, lo que se manifiesta es que en las redes pasaba, creo que a todos nos pasa, no pensé que fuera tan complicado y aquí se le llamó la Policía, le evaluaron; de esa evaluación no conozco el resultado. Oficialmente sobre el tema de las amenazas no tengo ningún conocimiento”, aseveró el presidente de la Asamblea.

Sobre las denuncias hechas por matoneo y agresiones al interior de la corporación, Benjumea respondió que “si fuera por las discusiones que tenemos entre diputados, más de uno ya hubiese renunciado. Aquí se presentan discusiones fuertes; las relaciones aquí no son de amigos, son de políticos, pero uno le tiene que dar manejo a eso”.

Aclaró que puntualmente Julio Casadiegos tiene un proceso judicial contra algunos diputados por el delito de peculado con acción, luego del proceso que recayera en su contra por la Procuraduría General de la Nación.

“En la plenaria nunca se le negó la palabra. Las garantías políticas para ejercer la diputación aquí en la plenaria, de parte de la presidencia, siempre la tuvo y ya el tema con los compañeros nunca me dijo formalmente me golpearon, me hicieron una encerrona, nunca tuvimos esa denuncia”, apuntó Omar Benjumea.

En la quinta sesión ordinaria, del tercer periodo, los diputados no hicieron mención sobre la renuncia, básicamente porque dijeron no conocer el tema jurídico, porque no saben si es cierta la petición de asilo solicitada por Julio Casadiegos al Gobierno canadiense.

Procesos jurídicos

Durante su estancia en la Asamblea, Julio César Casadiegos Navarro ha sido polémico no solo por las constantes denuncias hechas contra proyectos y grupos políticos con asentamiento en el departamento, sino por actuaciones personales que le provocaron varios procesos disciplinarios llegando a ser suspendido de la Duma. La decisión fue de la Procuraduría que lo destituyó por manejar bajo los efectos del alcohol, sin embargo, logró finalmente revocar la decisión y regresó a su silla. También tiene un proceso en la Fiscalía General de la Nación.