Con una cobertura superior al 90 % de la revacunación que se hizo necesaria por brote de la fiebre aftosa en el ganado del Cesar, los ganaderos del departamento se reunieron en el Hotel Sicarare la tarde de este viernes para discutir el presente y futuro del gremio, de su producción y de la problemática que los golpea.

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“Un paso más para lograr el estatus sanitario que teníamos anteriormente”, dijo el cesarense Oscar Daza Laverde, presidente de la Junta Directiva de Fedegan, al referirse a los resultados de las jornadas de revacunación que se iniciaron para frenar el brote de la enfermedad.
En mayo iniciará el ciclo normal de vacunación y es luego de esas jornadas que se conocerá si el país obtiene nuevamente el estatus sanitario libre de aftosa, certificación entregada por la Organización Mundial de la Sanidad Animal.

Por fortuna las puertas de los mercados internacionales de la carne volvieron a abrirse. “Nuestro presidente ejecutivo ha llegado de la feria mundial de los productos ganaderos y lo que nos trae son buenas noticias en el sentido de que tenemos que producir más carne que leche porque los precios y la demanda son muy altos”, concluyó Daza Laverde.

Hernán Araujo Castro, gerente del Fondo Ganadero del Cesar, además de exponer inquietudes con respecto a la recuperación del estatus sanitario, manifestó sus preocupaciones con respecto a otros temas como el de la seguridad para los productores, e hizo hincapié en el considerable número de ganaderos en el Cesar y la valiosa cifra de recursos económicos que genera esta actividad. “Fincas ganaderas en el Cesar son más o menos 13.200, en esas hay un inventario de un millón 420 o 430 mil cabezas de ganado, se produce aproximadamente un millón de litros de leche diarios y genera en el año más de 20 mil empleos entre directos e indirectos, y mueve más de 500 mil millones de pesos en la economía del Cesar”, afirmó.

José Félix Lafaurie, presidente de Fedegan, hizo lo propio al recordar que la ganadería en el Cesar está muy golpeada por la baja infraestructura. “Usted recorre hoy el departamento de aquí a Curumaní y lo que encuentra hoy es un desastre ambiental; aquí los veranos son demasiado intensos, no ha habido un buen programa de suplementación alimentaria, ve uno pasando trabajo al ganadero en términos generales y el tema de seguridad se ha descompuesto un poco”, expresó Lafaurie.

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A este evento asistieron los mandos del Ejército y Policía Nacional en el departamento, así como delegados de los gobiernos departamental y municipal.