La Empresa Prestadora de Salud Dusakawi es la encargada de brindar la atención médica principalmente a comunidades indígenas de los departamentos de La Guajira, con 167.960; Cesar con 85.403 y Magdalena con 19.644.  Sin embargo, desde hace 11 años la prestación de estos servicios viene siendo deficiente lo cual llevó a una intervención por la Superintendencia Nacional de Salud. 

Esta entidad indicó que luego de una prórroga por 11 meses de esta medida, la cual inició en abril de 2022, no han podido identificar avances; para ello en análisis técnico evidenciaron que no se está garantizando los servicios de consulta médica especializada, la entrega oportuna de medicamentos y también se están presentando  demoras en exámenes de laboratorio e imágenes diagnósticas. 

Igualmente hallaron deficiencias en el control y seguimiento de la población materno-infantil, presentando ingresos tardíos al control prenatal, mujeres y menores con diagnóstico de sífilis, niños con patologías como desnutrición, enfermedad diarreica y enfermedad respiratoria. 

“Desde 2021 a la fecha, esta EPS indígena registra un total de 1.227 peticiones, quejas, reclamos y denuncias  de sus afiliados. Los principales motivos se relacionan con las dificultades en la asignación de medicina especializada, demora en entrega de medicamentos y libre escogencia de EPS”, destacó la Supersalud.  

Igualmente aseveraron que entre 2021 y 2023 han iniciado 15 investigaciones contra la EPS indígena y dos contra Julián Daza Malo, en su calidad de representante legal, por posibles infracciones al sistema de salud. 

Esta EPS acumula multas por $1.314 millones en cobro coactivo, convirtiéndola en una de las más morosas dentro de las entidades administradoras de recursos desde 2015.