La Universidad Antonio Nariño, UAN por sus siglas, expuso cómo está Colombia en materia de salud mental. Uno de los trastornos que más se ha desarrollado a causa de la pandemia es la agorafobia, que se define como “un miedo patológico o temor obsesivo a espacios abiertos o situaciones que ponen a las personas fuera de un contexto seguro. Esta se ha relacionado estrechamente con el trastorno de pánico”.

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Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, las características de la agorafobia son “la ansiedad, y quienes sufren de ella, suelen experimentar niveles elevados de angustia al verse expuestos en situaciones a las que les es difícil escapar o pedir ayuda”.

Juliana Urrego Nieto, coordinadora del Centro de Atención Psicológica de la UAN, comentó sobre el hecho de que los casos de agorafobia aumenten a causa del confinamiento generado por el covid-19. “Hay factores como la pérdida de empleo, disminución de la capacidad económica de los hogares a nivel mundial, dificultades de salud, incertidumbre que genera pensar en el contagio de forma inesperada y el no tener certeza de que pueda suceder en el mundo, entre otras situaciones, que están multiplicando la ansiedad y angustia, eso lleva a un posible diagnóstico temprano”.

Según una encuesta realizada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE, las enfermedades mentales, a causa del covid-19, han aumentado significativamente en el país. “Durante el 2020 encontraron que de 20.452 personas encuestadas, el 35,6 % manifiesta sentir preocupación y nerviosismo, el 8,4 % irritabilidad, 15 % tristeza y 15,5 % dificultades para dormir”.

Por otro lado, ONU Colombia a través de su informe señaló que “el 40 % de las personas con algún trastorno mental ya diagnosticado no fue tratado en el 2020 por la demanda en la atención de los pacientes por coronavirus, lo que conlleva al deterioro en su calidad de vida”.

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Según Urrego, la agorafobia puede presentarse de formas distintas en cada persona, ya sean que presenten varios síntomas o apenas uno o dos; el tratamiento para este trastorno mental debe ser interdisciplinar, por lo que, se recomienda que la persona sea tratada tanto por un psicólogo como por un psiquiatra. “El psicólogo será el encargado de hacer el tratamiento terapéutico, valoración física y mental, la cual dará pautas para poder establecer el tratamiento, de acuerdo con las características de la persona que está siendo diagnosticada con el trastorno. Por su parte, el psiquiatra atenderá no sólo la dificultad afectiva y emocional, sino de procesos adaptativos de cada persona”, agregó Urrego.

Por otro lado, la Universidad Antonio Nariño resaltó que “es importante tener en cuenta que la agorafobia no sólo se presenta en adultos, también está presente en niños y jóvenes. Por ejemplo, en la niñez puede manifestarse por el miedo a tener contacto con las personas, lo que lleva al aislamiento y poca interacción con otros niños de su misma edad”.