¿Cómo puede lograrse el desplome del Euro, una de las monedas más fuertes y estables, y sembrar el caos en los mercados? Muy fácil: publicando un tuit. Exactamente eso es lo que ha sucedido hoy, cuando el editor de la revista satírica Titanic, la versión alemana de El Mundo Today, anunció por medio de Twitter […]
¿Cómo puede lograrse el desplome del Euro, una de las monedas más fuertes y estables, y sembrar el caos en los mercados? Muy fácil: publicando un tuit. Exactamente eso es lo que ha sucedido hoy, cuando el editor de la revista satírica Titanic, la versión alemana de El Mundo Today, anunció por medio de Twitter que el gobierno de coalición de Angela Merkel había colapsado por la crisis migratoria de Europa.
“Estalla la bomba política en Hesse”, tuiteó Moritz Hürtgen, anunciando el fin de la alianza entre la Unión Demócrata Cristiana de Alemania, el partido de Angela Merkel, y la Unión Social Cristiana de Baviera, el partido más conservador con el que forma una facción común.
¿Pero cómo lo hizo? El problema fue que Hürtgen, que tiene una cuenta de Twitter verificada, había cambiado su nombre e imagen por los de HR, la radiotelevisión pública de Hesse, para hacerse pasar por un medio serio. Incluso publicó algunas noticias locales antes del tuit-bomba para que la historia fuera más creíble.
Gacias a esta jugada, la bolsa alemana y el euro cayeron momentáneamente tras el tuit, pero ya se han recuperado después de que la prensa descubriera la farsa. El tuit ha creado momentáneamente un dolor de cabeza para Ángela Merkel, pero debería serlo también para Twitter: ¿de qué sirve un sistema de cuentas verificadas si puedes cambiarte el nombre y jugar con la moneda común de 19 países?
¿Cómo puede lograrse el desplome del Euro, una de las monedas más fuertes y estables, y sembrar el caos en los mercados? Muy fácil: publicando un tuit. Exactamente eso es lo que ha sucedido hoy, cuando el editor de la revista satírica Titanic, la versión alemana de El Mundo Today, anunció por medio de Twitter […]
¿Cómo puede lograrse el desplome del Euro, una de las monedas más fuertes y estables, y sembrar el caos en los mercados? Muy fácil: publicando un tuit. Exactamente eso es lo que ha sucedido hoy, cuando el editor de la revista satírica Titanic, la versión alemana de El Mundo Today, anunció por medio de Twitter que el gobierno de coalición de Angela Merkel había colapsado por la crisis migratoria de Europa.
“Estalla la bomba política en Hesse”, tuiteó Moritz Hürtgen, anunciando el fin de la alianza entre la Unión Demócrata Cristiana de Alemania, el partido de Angela Merkel, y la Unión Social Cristiana de Baviera, el partido más conservador con el que forma una facción común.
¿Pero cómo lo hizo? El problema fue que Hürtgen, que tiene una cuenta de Twitter verificada, había cambiado su nombre e imagen por los de HR, la radiotelevisión pública de Hesse, para hacerse pasar por un medio serio. Incluso publicó algunas noticias locales antes del tuit-bomba para que la historia fuera más creíble.
Gacias a esta jugada, la bolsa alemana y el euro cayeron momentáneamente tras el tuit, pero ya se han recuperado después de que la prensa descubriera la farsa. El tuit ha creado momentáneamente un dolor de cabeza para Ángela Merkel, pero debería serlo también para Twitter: ¿de qué sirve un sistema de cuentas verificadas si puedes cambiarte el nombre y jugar con la moneda común de 19 países?