La crisis actual del Río Guatapurí nos lleva a pensar e acciones rápidas y efectivas para cuidar la cuenca alta y baja del Rey del valle.

Remontándonos en la historia es importante recordar que ya en el gobierno de Belisario Betancur en los años 80, en una visita que hizo a Valledupar en su discurso ordenó a el director de la corporación ambiental regional de la época para entonces el doctor José Félix Lafourie que construyera la represa de los Besotes, lo cual quedó en una simple orden, porque nunca se abordó el tema de fondo.

La misión TAJAL una misión francesa que contrato Colombia, que hizo estudios hídricos para la zona que hoy conforma el departamento del Cesar, y concluyó un proyecto de represa en el río Ariguaní a la altura del copey, un proyecto de represa sobre el río César a la altura de La Paz, la represa del río Buturama y el embalse de los Besotes sobre el río Guatapurí.

Después se han hecho varios estudios de actualizaciones, siendo el último el que realizó el Incoder en los años 2010-11′ para este momento ya desde el año 2003 el municipio de Valledupar a través de Emdupar, había recibido los estudios y diseños de la construcción del embalse, incluyendo hasta los términos de referencia para una posible licitación estos realizados por la universidad Nacional de Colombia en su condición de contratista.

En el informe final del estudio se incluye la actualización de distrito de riegos y la construcción de el embalse multipropósito de los Besotes (acueducto, riego, energía y turismo), en este se define que el contó del proyecto ascendía a la suma de unos 380.000 millones de pesos, de los cuales 130.000 corresponden a la construcción del embalse los Besotes, cifra que trasladada al valor presente podría estar en unos 150.000 o 160.000 atendiendo los índices de inflación presentados los años 2011 2012 2013.
La matriz de cofinanciación propuesta en el estudio era de un 60% nación 30% y 10% municipio de Valledupar.