Cada año crece el interés de los colombianos por participar en iniciativas de comercio electrónico pensadas para que los consumidores puedan acceder a las mejores ofertas del mercado, durante unas cuantas horas.
Cada año crece el interés de los colombianos por participar en iniciativas de comercio electrónico pensadas para que los consumidores puedan acceder a las mejores ofertas del mercado, durante unas cuantas horas. Esto se debe a una multiplicidad de factores, entre ellos, una mayor y mejor oferta, medios de pago más accesibles, más usuarios conectados e interesados y, por supuesto, la certeza de poder lograr de manera online un intercambio de dinero sencillo, cómodo y seguro.
Según informe, las categorías de productos más buscadas en la plataforma en la última versión del Cyberlunes fueron Celulares, con un 17% de las búsquedas totales; seguida de Computación, con un 13%. El listado lo completan Salud y Belleza, con 11% de las búsquedas; Electrónica, Audio y Video, con el 10%; Deportes y Fitness, con 8% y Ropa y Accesorios, con 5%.
Además de la gran variedad de promociones ofrecidas por reconocidas marcas nacionales e internacionales, de las garantías que brindan hoy los comercios e intermediarios para hacer del comercio electrónico una práctica confiable, los usuarios también tienen un rol clave en el sistema.
1) Proteger los datos personales: tal como uno no deja su tarjeta de crédito o débito descuidada ni da detalles bancarios a un extraño, nunca deben introducirse datos personales ni financieros en circunstancias que no sean el cierre de una compra. No debemos revelar nuestros datos financieros a nadie, no importa si es en una tienda física o una en línea.
2) Revisar la seguridad de los sitios y de las conexiones a internet. Es necesario analizar los sitios antes de hacer la compra. Los exploradores de Internet dan señales claras acerca de la confiabilidad de un portal de compras. Nunca debe realizarse un pago online si la dirección del sitio no comienza con “https” o, en su margen, aparezca el ícono del candado cerrado, que indica que los datos que se trasladen desde el usuario al procesador de pagos lo harán en forma cifrada. Además, se deben evitar las redes Wi-Fi públicas.
3) Privilegiar el uso de plataformas de pago. Miles de sitios locales ya aceptan plataformas simples, seguras y cómodas, que permiten hacer pagos con un nombre de usuario y contraseña, sin necesidad de introducir la tarjeta de crédito cada vez que se realiza una transacción. Son más seguras, ya que la información viaja por la red en forma encriptada y no se revelan los datos financieros al comercio. Además, ante cualquier duda, estas plataformas tienen un Centro de Atención al Cliente, y tanto el comercio como el usuario, cuentan con un seguro de protección en caso de inconvenientes.
4) Prestar atención al producto y al vendedor. Una de las ventajas del Internet es que permite comparar en un par de clics cientos de artículos y sus precios. Lo anterior nos posibilita analizar los productos, su valor y revisar los antecedentes del vendedor, cuando se presenten grandes descuentos de los que podamos llegar a desconfiar. Como en el mundo offline, los buenos vendedores buscan que sus clientes estén cómodos y seguros, ofrecen muchos medios de pago y dan garantías por anticipado. Hoy, las plataformas de pago electrónico han democratizado el acceso de los vendedores a poder ofrecer tarjetas de crédito y tener otras formas de cobro.
5) Confirmar la compra. Revisar el resumen de la tarjeta o de la cuenta bancaria una vez realizado el pago nunca está de más. También es una buena medida de prevención conservar el correo electrónico o el número de confirmación de compra, porque tal vez resulte útil, incluso ante un error involuntario de cualquiera de las partes. Seguramente no sea necesario, y en ese caso, serás parte de las millones de historias de éxito que dinamizan el comercio electrónico día a día.
Cada año crece el interés de los colombianos por participar en iniciativas de comercio electrónico pensadas para que los consumidores puedan acceder a las mejores ofertas del mercado, durante unas cuantas horas.
Cada año crece el interés de los colombianos por participar en iniciativas de comercio electrónico pensadas para que los consumidores puedan acceder a las mejores ofertas del mercado, durante unas cuantas horas. Esto se debe a una multiplicidad de factores, entre ellos, una mayor y mejor oferta, medios de pago más accesibles, más usuarios conectados e interesados y, por supuesto, la certeza de poder lograr de manera online un intercambio de dinero sencillo, cómodo y seguro.
Según informe, las categorías de productos más buscadas en la plataforma en la última versión del Cyberlunes fueron Celulares, con un 17% de las búsquedas totales; seguida de Computación, con un 13%. El listado lo completan Salud y Belleza, con 11% de las búsquedas; Electrónica, Audio y Video, con el 10%; Deportes y Fitness, con 8% y Ropa y Accesorios, con 5%.
Además de la gran variedad de promociones ofrecidas por reconocidas marcas nacionales e internacionales, de las garantías que brindan hoy los comercios e intermediarios para hacer del comercio electrónico una práctica confiable, los usuarios también tienen un rol clave en el sistema.
1) Proteger los datos personales: tal como uno no deja su tarjeta de crédito o débito descuidada ni da detalles bancarios a un extraño, nunca deben introducirse datos personales ni financieros en circunstancias que no sean el cierre de una compra. No debemos revelar nuestros datos financieros a nadie, no importa si es en una tienda física o una en línea.
2) Revisar la seguridad de los sitios y de las conexiones a internet. Es necesario analizar los sitios antes de hacer la compra. Los exploradores de Internet dan señales claras acerca de la confiabilidad de un portal de compras. Nunca debe realizarse un pago online si la dirección del sitio no comienza con “https” o, en su margen, aparezca el ícono del candado cerrado, que indica que los datos que se trasladen desde el usuario al procesador de pagos lo harán en forma cifrada. Además, se deben evitar las redes Wi-Fi públicas.
3) Privilegiar el uso de plataformas de pago. Miles de sitios locales ya aceptan plataformas simples, seguras y cómodas, que permiten hacer pagos con un nombre de usuario y contraseña, sin necesidad de introducir la tarjeta de crédito cada vez que se realiza una transacción. Son más seguras, ya que la información viaja por la red en forma encriptada y no se revelan los datos financieros al comercio. Además, ante cualquier duda, estas plataformas tienen un Centro de Atención al Cliente, y tanto el comercio como el usuario, cuentan con un seguro de protección en caso de inconvenientes.
4) Prestar atención al producto y al vendedor. Una de las ventajas del Internet es que permite comparar en un par de clics cientos de artículos y sus precios. Lo anterior nos posibilita analizar los productos, su valor y revisar los antecedentes del vendedor, cuando se presenten grandes descuentos de los que podamos llegar a desconfiar. Como en el mundo offline, los buenos vendedores buscan que sus clientes estén cómodos y seguros, ofrecen muchos medios de pago y dan garantías por anticipado. Hoy, las plataformas de pago electrónico han democratizado el acceso de los vendedores a poder ofrecer tarjetas de crédito y tener otras formas de cobro.
5) Confirmar la compra. Revisar el resumen de la tarjeta o de la cuenta bancaria una vez realizado el pago nunca está de más. También es una buena medida de prevención conservar el correo electrónico o el número de confirmación de compra, porque tal vez resulte útil, incluso ante un error involuntario de cualquiera de las partes. Seguramente no sea necesario, y en ese caso, serás parte de las millones de historias de éxito que dinamizan el comercio electrónico día a día.