Este gobierno es definitivamente un caso perdido. Con el paso de los días, ya nos acercamos a la tercera parte del cuatrienio -menos mal, cada día que termina es uno menos de esta locura- se levanta más el tapete y quedan al descubierto las miserias de Petro y sus compinches. Constantemente me pregunto cómo se sentirán muchos de los votantes de Petro en tiempos en los que recordamos su caótico paso por la Alcaldía de Bogotá, ya que está haciendo lo mismo, pero en el orden nacional. 

Peor no pueden estar las cosas. Permítanme actualizarlos con lo último que ha pasado.

Petro va a la Asamblea General de la ONU y le correspondió hablar después del Presidente Biden -otro que está irremediablemente perdido-. A su público le importa un pito -parafraseo al mismo Petro recientemente hablando del Presidente Duque- que él esté de pie, en el atril, esperando que hagan silencio para empezar a decir las sandeces a las que nos tiene acostumbrados. En 3 oportunidades quien preside la Asamblea, el señor Dennis Francis, pidió silencio y atención y a los comensales, a quienes les siguió importando un pito que Petro estuviera ahí, indefenso, como cuando un imbécil se para frente a los líderes mundiales y a estos nada les importa la presencia del guerrillero. Burla e irrespeto totales, es lo que recibe de la comunidad internacional.

Mientras tanto, el ELN se sigue riendo del gobierno en sus narices, de frente al país afirma no estar dispuesto a dejar las armas y a desmovilizarse y el gobierno insiste en el diálogo con ellos. Otra estupidez que se agranda al saber, por los mismos días, que muy pronto el gobierno se sentará a conversar con las disidencias de Iván Mordisco. Como si no tuviéramos suficiente.

En medio de tanto desorden, el Ministerio de Relaciones Exteriores -en manos del octogenario Álvaro Leyva Durán- declara desierta la licitación para la producción y expedición de pasaportes porque no les gusta Thomas Greg & Sons, empresa que ha venido realizando esta labor por años. Estamos de acuerdo en que dicha compañía ha sido muy cercana a personajes como el mal recordado Juan Manuel Santos, pero hay que ser honestos: esa labor la han cumplido bastante bien. Ahora el gobierno acudirá a la figura de la “urgencia manifiesta”, para gozar de la potestad de adjudicar a dedo esta importante actividad. Huele maluco, al igual que las basuras que se dejaron de recoger en Bogotá, durante la Alcaldía de Petro por allá en diciembre de 2012, sólo porque el señorito quería adjudicarles a sus amigos. La ciudad nunca ha terminado de recuperarse de semejante perjuicio, el servicio nunca volvió a ser el mismo, Petro fue destituido por la Procuraduría por lleva a Bogotá a una emergencia sanitaria y luego se fue a chillar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos -órgano adscrito a la OEA- para hacerle el quite a su destitución y al pago de una millonaria multa que se le impuso por inepto.

Rematamos la actualidad del gobierno con 3 perlas: que se le viene un problemón porque políticos del Pacto Histórico usaron aviones del mafioso Carlos Restrepo, alias “El Caco”, para hacer campaña -recordemos que los mafiosos son hermanitos de leche de este gobierno que eligieron- a pesar de que lo nieguen una y otra vez; que 18 militares se han visto envueltos en un escándalo de posible abuso de poder en Tierralta, Córdoba, llevando a que las Fuerzas Militares, admiradas en otros tiempos, ahora actúen igual de arbitrariamente que el ejecutivo; y que la llegada de Gareth Steven Sella como viceministro de juventud, miembro principalísimo de la Primera Línea, desatará una marea de comentarios adversos a Petro porque estos gestos legitiman la delincuencia en el poder y envían mensajes perversos a la sociedad.

POR: JORGE EDUARDO AVILA.

Mientras tanto, nos solidarizamos con la familia y allegados de Ana María Serrano, víctima de feminicidio en México. ¿Qué tenemos que hacer para que el de Ana María sea el último de estos casos? No puede ser posible que un amor distorsionado sea la causa de muerte de miles de mujeres al año en el planeta. ¡La mujer y la vida son sagradas!