Según las autoridades regionales de Electricaribe, las zonas subnormales presentaron el mayor aumento en el consumo de energía. Mientras para febrero de 2019 se facturaron $2.900 millones en los 217 barrios subnormales del departamento, para el 2020, en el mismo mes, la facturación fue de $4.500 millones.
La alta participación de la energía hidráulica (68,2 %) en la torta de generación eléctrica hace frágil al país en épocas de sequías como la que se ha extendido desde noviembre del año pasado. Asimismo, esa escasez estimula el aumento de los precios de la energía en los movimientos de la bolsa de valores.
De allí el aumento registrado en los últimos meses en el costo de la factura. Como explican las autoridades, la tarifa tiene varios componentes: generación, transporte, comercialización, distribución, pérdidas reconocidas, entre otros. El componente de generación es el más ligado con los factores climáticos. Por lo tanto, en época de sequía incentiva el aumento del precio de la energía.
Problema mayor cuando a pesar de la sequía, departamentos como el Cesar incrementan el consumo un 10 %, el doble que el promedio del país. ¿La principal causa? Según las autoridades regionales de Electricaribe, las zonas subnormales presentaron el mayor aumento en el consumo de energía. Cifras institucionales señalan que mientras para febrero de 2019 se facturaron $2.900 millones en los 217 barrios subnormales del departamento, para el 2020, en el mismo mes, la facturación fue de $4.500 millones. Un aumento del 64.4 %.
La ley define un asentamiento subnormal a las zonas habitadas y que están ubicadas en las cabeceras de municipios y, por lo tanto, no cuentan con el servicio público domiciliario de energía eléctrica o que este se obtenga a través de derivaciones del Sistema de Distribución Local o de una acometida, efectuadas sin aprobación del respectivo operador de red, en este caso, Electricaribe.
A nivel institucional, el primer reto para Electricaribe es incrementar el porcentaje de recaudo, que no supera el 5 % de lo facturado. En otras palabras, de cada $100 que ofrece la empresa en servicio, pierde $95.
En segundo lugar está la disminución del consumo, por eso la empresa creó la campaña ‘Ojo con tu consumo’. “Tenemos como expectativa que los usuarios tengan un ahorro y su economía se mejore. Y, por supuesto, que mejore el concepto que tienen sobre la empresa”, indicó Jorge Rivero, gerente de Electricaribe seccional Cesar.
Dentro de la campaña se busca explicar el consumo de cada uno de los electrodomésticos. Por ejemplo, la empresa señala que tener encendido el aire acondicionado 9.000 btu 8 horas diarias durante un mes significa un consumo de 264 kilovatios/hora.
Cabe señalar que dentro de los subsidios que aplica el Gobierno nacional según estratos, para la zona residencial 1 el gobierno financia alrededor del 55 % del consumo menor de 173 kilovatios. Luego del kilovatio 174 se cobra pleno.
“Hay un mito: se dice que la tarifa de Electricaribe es la más cara del país. No es cierto, es la más barata. La tarifa tiene un componente llamado distribución, ese componente es más costoso para las empresas que han hecho las inversiones necesarias en las redes. Al hacer las inversiones se le reconoce al operador su actividad para mejorar la calidad del servicio”, señaló el gerente.
Como Electricaribe, intervenida desde el 2016 por la Superintendencia de Servicios Públicos, no ha realizado la inversión necesaria para mejorar su red y por lo tanto el servicio, el componente llamado distribución es más económico en la región. Pero esa falta de inversión implica una desmejora en la prestación del servicio.
En ese sentido, con la posible llegada del nuevo operador, el cual se conocería el próximo 20 marzo, llegarían millonarias inversiones a la red de energía, pero a la vez un aumento en el costo de las facturas.
Según las autoridades regionales de Electricaribe, las zonas subnormales presentaron el mayor aumento en el consumo de energía. Mientras para febrero de 2019 se facturaron $2.900 millones en los 217 barrios subnormales del departamento, para el 2020, en el mismo mes, la facturación fue de $4.500 millones.
La alta participación de la energía hidráulica (68,2 %) en la torta de generación eléctrica hace frágil al país en épocas de sequías como la que se ha extendido desde noviembre del año pasado. Asimismo, esa escasez estimula el aumento de los precios de la energía en los movimientos de la bolsa de valores.
De allí el aumento registrado en los últimos meses en el costo de la factura. Como explican las autoridades, la tarifa tiene varios componentes: generación, transporte, comercialización, distribución, pérdidas reconocidas, entre otros. El componente de generación es el más ligado con los factores climáticos. Por lo tanto, en época de sequía incentiva el aumento del precio de la energía.
Problema mayor cuando a pesar de la sequía, departamentos como el Cesar incrementan el consumo un 10 %, el doble que el promedio del país. ¿La principal causa? Según las autoridades regionales de Electricaribe, las zonas subnormales presentaron el mayor aumento en el consumo de energía. Cifras institucionales señalan que mientras para febrero de 2019 se facturaron $2.900 millones en los 217 barrios subnormales del departamento, para el 2020, en el mismo mes, la facturación fue de $4.500 millones. Un aumento del 64.4 %.
La ley define un asentamiento subnormal a las zonas habitadas y que están ubicadas en las cabeceras de municipios y, por lo tanto, no cuentan con el servicio público domiciliario de energía eléctrica o que este se obtenga a través de derivaciones del Sistema de Distribución Local o de una acometida, efectuadas sin aprobación del respectivo operador de red, en este caso, Electricaribe.
A nivel institucional, el primer reto para Electricaribe es incrementar el porcentaje de recaudo, que no supera el 5 % de lo facturado. En otras palabras, de cada $100 que ofrece la empresa en servicio, pierde $95.
En segundo lugar está la disminución del consumo, por eso la empresa creó la campaña ‘Ojo con tu consumo’. “Tenemos como expectativa que los usuarios tengan un ahorro y su economía se mejore. Y, por supuesto, que mejore el concepto que tienen sobre la empresa”, indicó Jorge Rivero, gerente de Electricaribe seccional Cesar.
Dentro de la campaña se busca explicar el consumo de cada uno de los electrodomésticos. Por ejemplo, la empresa señala que tener encendido el aire acondicionado 9.000 btu 8 horas diarias durante un mes significa un consumo de 264 kilovatios/hora.
Cabe señalar que dentro de los subsidios que aplica el Gobierno nacional según estratos, para la zona residencial 1 el gobierno financia alrededor del 55 % del consumo menor de 173 kilovatios. Luego del kilovatio 174 se cobra pleno.
“Hay un mito: se dice que la tarifa de Electricaribe es la más cara del país. No es cierto, es la más barata. La tarifa tiene un componente llamado distribución, ese componente es más costoso para las empresas que han hecho las inversiones necesarias en las redes. Al hacer las inversiones se le reconoce al operador su actividad para mejorar la calidad del servicio”, señaló el gerente.
Como Electricaribe, intervenida desde el 2016 por la Superintendencia de Servicios Públicos, no ha realizado la inversión necesaria para mejorar su red y por lo tanto el servicio, el componente llamado distribución es más económico en la región. Pero esa falta de inversión implica una desmejora en la prestación del servicio.
En ese sentido, con la posible llegada del nuevo operador, el cual se conocería el próximo 20 marzo, llegarían millonarias inversiones a la red de energía, pero a la vez un aumento en el costo de las facturas.