Debido a la preocupación sobre el porcentaje de estudiantes que desertaron de las instituciones educativas durante el año 2020 y la necesidad de conectividad de los escolares para las clases virtuales se realizó un debate de control político para exponer qué acciones está realizando la administración municipal para subsanar las necesidades de conectividad en la zona rural e indagar en los procesos contractuales de aseo y vigilancia de los colegios de Valledupar. 

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A este debate realizado por el Concejo Municipal de Valledupar asistió el secretario de Educación Municipal, Iván Bolaño, quien aseveró que según el Ministerio de Educación el porcentaje de deserción escolar en la capital del Cesar fue de 1,3 % a corte del mes junio del año 2020. Señaló que dicha cifra es preliminar y está sujeta a ajustes de los meses siguientes.

“Este porcentaje refleja una disminución en el índice de deserción escolar a comparación de los años anteriores. En la pandemia los estudiantes no se caracterizaron por una deserción porque eso corresponde al retiro del Simat por un largo periodo de tiempo, hubo más un ausentismo. A los escolares se les dio plazos considerables para la entrega de sus tareas”, comentó Bolaño.

Por medio de una presentación visual, el funcionario público respondió el cuestionario de preguntas que le envío el Concejo Municipal sobre las acciones que se están realizando para mejorar la conectividad en la zona rural, las inversiones en materia educativa en el municipio de Valledupar y las estrategias para disminuir la deserción escolar.

HERRAMIENTAS PARA LA PERMANENCIA

Bolaño precisó que para mejorar el acceso a las clases virtuales alrededor de 4.159 tablets fueron entregadas en el 2020. Así mismo, 1.496  ‘Computadores para Educar’ en principios del año anterior y en lo corrido del 2021 han entregado 2.615 computadores a estudiantes de instituciones educativas que no contaban con la capacidad económica para adquirir una herramienta tecnológica.

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Manifestó que para que los estudiantes tengan un mayor acceso a internet se va a establecer una contratación con los operadores de este servicio en las instituciones educativas. Esta iniciativa no había sido implementada anteriormente debido a que el Ministerio de Educación la tenía que aprobar. Señaló que dichas acciones están encaminadas a que los escolares continúen estudiando y los contenidos los puedan adquirir con mayor facilidad.

LOS KANKUAMOS SOLICITAN ALTERNANCIA

Saúl Montero, coordinador general de educación del pueblo Kankuamo, señaló que solo estuvieron en alternancia durante una semana porque esta fue suspendida por las medidas preventivas frente al tercer pico de la pandemia de la covid-19. Aseveró que la alternancia es muy necesaria en las zonas del resguardo indígena kankuamo, ubicadas en los corregimientos de La Mina, Atanquéz y Guatapurí, porque la conectividad es muy baja y hay un alto porcentaje de analfabetismo en los padres de familia.

Lo anterior dificulta que haya un correcto aprendizaje para los escolares. Agregó que en el resguardo kankuamo la pandemia de la covid-19 no ha “proliferado” debido a que se ha mantenido en control, por lo que no correrían tanto peligro si vuelven a la alternancia. 

Al respecto, Bolaño señaló que la decisión de suspender alternancia fue preventiva por la dinámica de contagio que se venía presentando en Valledupar. Invitó a Montero a una mesa de trabajo donde le expondrá las razones de dicha determinación; sin embargo, aseveró que “deja abierta la posibilidad de hacer un retorno a la alternancia” si Montero lo considera y si cuente con el aval del cabildo gobernador.

¿COLEGIOS SIN IMPLEMENTOS?

De acuerdo con el concejal de Valledupar, Jorge Pana, un punto de suma preocupación es la falta de elementos de bioseguridad en algunas instituciones educativas que entraron bajo el modelo de alternancia en Valledupar. Puntualizó que la Institución Educativa Leónidas Acuña no cuenta con los implementos de bioseguridad necesarios para atender a la comunidad educativa, por lo cual se puso en peligro la salud de los estudiantes y los profesores de este plantel educativo.

Señaló que los lavamanos portátiles, señalizaciones, tapetes, entre otras dotaciones eran insuficientes para recibir de forma segura a los estudiantes del grado 11 de manera presencial en la institución. Además de esto precisó que las baterías sanitarias estaban en mal estado y el plantel educativo tiene una sola aseadora para limpiar el colegio.

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El secretario de Educación Municipal  señaló que en dicho colegio se entregaron los elementos de bioseguridad pertinentes para que la institución contara con todos los parámetros de seguridad fijados por el Ministerio de Salud. Sobre las baterías sanitarias en mal estado, el funcionario público aseveró que las evidencias que sostenían dicha afirmación “eran falsas”, puesto que la institución educativa si contaba con estas estructuras en óptimas condiciones.

Precisó que la contratación de los servicios generales en el plantel educativo se venía adelantando bajo la “modalidad de mínima cuantía que duró un periodo de tiempo establecido en condiciones de vigilancia y de servicios generales”, pero debido a que en la institución solo asistían los estudiantes del grado once una sola aseadora “era suficiente para atender los grados asignados”.

Por: Namieh Baute Barrios / EL PILÓN.