No son puntos de vista, ni impresiones hechas a la ligera asegurar que en Colombia reina la división, el desinterés, la desinformación, el deseo de venganza y también el creciente deseo de perdonar, en orillas diferentes, todo esto expresado en el marco de una búsqueda de la paz nacional.

Los hechos más recientes muestran ampliamente por qué y cómo se dividió a los ciudadanos, y el resultado en el plebiscito del 2 de octubre pasado está más que trillado. En el Cesar, departamento azotado por la violencia, el SI ganó con 120.595 votos y por el NO los cesarenses marcaron 117.446 sufragios: solo 3.149 votos de diferencia, pero hay que tener en cuenta que también se registraron 3.298 votos nulos y 1.683 no marcados, y solo el 32,53 % del potencial electoral acudió a la jornada.

En Agustín Codazzi, el municipio de este departamento más victimizado por los grupos armados al margen de la ley, una diferencia muy parecida al resultado nacional del plebiscito dio como ganador al NO. ¿Por qué ocurrió esto?, EL PILÓN le consultó a los codacenses. El proceso de paz está en “hibernación” jurídica y en las calles aún se habla de lo mismo: Un “dialogo nacional”, revelaciones sobre una campaña manipuladora y un premio Nobel de Paz, agitan las opiniones y todo gira en torno a las víctimas.

“Quedamos fríos”

Aseguran los ciudadanos consultados, que en Codazzi no se reconoció a líderes visibles de campaña alguna, aunque todos podrían identificar a personalidades del municipio que estaban de un lado y de otro, y hasta los que supuestamente “se voltearon”.

Miguel Antonio Ricardo Serna es un campesino que ha liderado procesos de restitución de tierras en el Cesar. Ha sido amenazado varias veces y en su humilde vivienda hace presencia desde hace tres años un funcionario de la Unidad Nacional de Protección para acompañarlo. Fue víctima del desplazamiento en la vereda El Toco, jurisdicción de San Diego, Cesar, y por esto han ido a matarlo un par de veces en Codazzi, asegura que se salvó de caer en una de las 123 masacres que se realizaron en ese municipio algodonero; 605 víctimas, según la Fiscalía 58 de Justicia y Paz. Aun así fue promotor del Sí.

“La mayoría de los grandes hacendados son personas que promovían el No y manejan mucho la articulación de comunidades porque tienen fincas y muchos trabajadores. Hizo falta el sentido de pertenencia. Que hubieran cogestores que animaran el Sí”, dijo Ricardo Serna.

Aseguró que las víctimas en el municipio están de acuerdo con el proceso de paz y de presentarse una nueva oportunidad para dar un voto positivo lo harían, pero sigue sin explicarse el resultado. Mientras tanto, en las calles de la ciudad se debate el asunto y la desinformación es el pan de cada día.

En Agustín Codazzi, el municipio azotado por las Autodefensas Unidas de Colombia, el frente ‘Juan Andrés Álvarez’, y diferentes grupos guerrilleros, 6.681 personas votaron por él NO y 6.261 dijeron SÍ. La diferencia fue de tan solo 421 votos. Los votos nulos, 106, y los no marcados, 63, sumando 269. Estos “errores” de los sufragantes en las urnas, de ser válidos para SI o No, no habrían representado mayor diferencia, teniendo en cuenta que 45.552 personas estaban habilitadas para votar.

Tertulia en locales comerciales

De manera que en el municipio encontrar a líderes que movieran el SI fue un poco complicado, pero encontrar a líderes que promovieran el No fue difícil. De hecho, los consultados por EL PILÓN y que manifestaron haber votado por el NO, fueron reacios a dar entrevistas.

“Pienso que detrás de todo eso de la paz hay muchas cosas que la gente no conoce. Cada quien tiene derecho a rehacer su vida, pero hay mucha gente que necesita ayuda y el gobierno no ayuda. El gobierno va a premiar una cantidad de gente que realmente hizo mucho daño y a unas personas que realmente quieren contribuir a que este país salga adelante el gobierno no los premia”, afirmó Mario Campo, agricultor y ganadero.

Agregó que la paz no es lo que le están vendiendo al país. “Santos (Juan Manuel) tiene su cuota de razón pero Uribe (Álvaro) también tiene su cuota de razón. La paz es un contexto de cosas que hacen que la sociedad viva en convivencia normal y eso no es lo que se está haciendo”, subrayó.
En opinión del ganadero en Codazzi ganó el NO porque nadie sabía ni por qué estaba votando. “La mayoría de la gente no tiene ni idea de qué fue”.

El comerciante Vicente Cañas, desplazado por la guerrilla de la Serranía de Perijá en 1993, aseguró que el SI perdió en Codazzi porque faltó pedagogía para entender el alcance de los acuerdos. “Los que estaban trabajando por el NO sí hicieron trabajo. Iban por las casas, en Facebook echándole mentiras a la gente. Yo hice el trabajo por mi cuenta y visitaba amigos porque ya no queremos más esta guerra. Estamos cansados”, resaltó Cañas.

En la plaza del mercado
Los vendedores de frutas, verduras, queso, carne y otros productos en la plaza de mercado de Codazzi, sostenían una tertulia esta semana sobre los resultados del plebiscito y la situación actual de Colombia. Al consultárseles por qué votaron NO, la respuesta parece ser el reflejo nacional.

– Ibeth Velásquez: vote por el No.
– ¿Y por qué?
– Ja ja ja ja no recuerdo bien, pero voté NO.
– ¿Qué argumentos tuviste en cuenta para tomar esa decisión?
– Ajá, todo el mundo por el NO, de pronto no miré bien…
– ¿Si tuviera la oportunidad de votar de nuevo…?
– Votaría por el NO, ja ja ja ja

Mientras tanto los demás comerciantes se acercaban. “Yo estaba confundido porque no leí los pro y los contra del SÍ y del NO, entonces no voté pero al momento de ir a la urna hubiera votado por el Sí”, manifestó Jacob Valencia.

Un poco nostálgica Maribel Agudelo recordó que a su esposo lo asesinaron hace 16 años los grupos armados ilegales. “Voté NO porque uno en realidad no sabe qué es lo que van a hacer, apenas por encima le explican a uno, pero profundamente no sabe a qué nos va a llevar el SÍ. Un camino más seguro fue decir NO”, puntualizó.

Libertad al rebaño
El pastor Manuel Cantillo, de la iglesia Asamblea de Dios, con 16 años de experiencia y hoy líder de aproximadamente 300 personas, afirma que dejó libre a su rebaño para tomar la decisión.

“Nosotros leímos un comunicado a nivel nacional. No somos pastores del SÍ o del NO, somos pastores de una comunidad y esto significa que en nuestra iglesia hay gente de ambas tendencias y nosotros no podemos polarizarnos hacía un lado u otro”, recalcó el pastor.

Ser víctima del conflicto no garantiza necesariamente deseo de venganza en contra de una guerrilla que se sentó a negociar. Es claro que en el país las victimas sacaron el pecho y promovieron el perdón y la reconciliación nacional, aunque en algunos municipios y departamentos afectados por la violencia hubo una contundente respuesta negativa para los acuerdos.

La ignorancia y Matthew
Aunque en este recorrido por Codazzi no fue posible hallar movimientos fuertes que se autoreconocieran como tal, de ninguna tendencia, si surgieron algunos nombres como el de Edwin Rodríguez, un comerciante a quien recomendaron como líder del No. La sorpresa es que aseguró haber votado por el SÍ y señaló las causas de que en Codazzi ganara el No. “Aquí triunfó la falta de información porque los que votaron fueron los jóvenes, los que ignoraban qué era lo que iban a votar. A ellos se les pregunta por qué decían No y no sabían, también el factor climático influyó porque los que sí se informan son adultos mayores y ellos por las lluvias de ese día no salieron a votar”, finalizó.

Agustín Codazzi es el municipio más victimizado por los grupos armados ilegales y según sus habitantes, en esa localidad ganó la desinformación y la apatía.

Por Andrés Llamas Nova / EL PILÓN