El gremio de taxistas  colombianos anunció que el próximo  25 de octubre se estará desarrollando una jornada de manifestación pacífica en todo el país que tendrá como objetivo exigir al Gobierno nacional  mejores condiciones  laborales.

Entre las peticiones que estarán realizando los conductores de servicio público tipo taxi se encuentran el oponerse al funcionamiento de las plataformas digitales como Uber, Didi, Cabify o Indriver, quienes desde algunos años se han mantenido en una posición de negativa a la legalización de este tipo de aplicaciones que presenta un servicio de transporte. Otro de los motivos por los cuales los taxistas estarán   protestando será para exigir la  revisión a las actuaciones de los agentes de tránsito, ya que manifiestan que en los últimos meses se han presentado supuestas vulneraciones a los derechos de los taxistas.

Lo anterior, pese a que el Ministerio de Minas y Energía anunció que para el mes de octubre del presente año no habría un alza en el valor del galón de gasolina en el país, esto con el fin de mitigar el alto impacto  que ha tenido el combustible  en el territorio, así como también la entrega de bonos económicos, compensatorios, con el cual se  podrá beneficiar la  agremiación, siempre y cuando realice la actualización  de documentos en el Registro Único Nacional de Tránsito (Runt). Además de darle  la posibilidad a los administradores territoriales de aumentar  la tarifa del servicio de taxis a nivel nacional.

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Al parecer todos estos beneficios no serían suficientes para el gremio de taxista, dado que han tomado dicha decisión, que también surge  luego de que la Corte Suprema de Justicia aprobara las plataformas virtuales de transporte como Uber, que podrán libremente circular y realizar sus servicios  en el país. 

Por su parte el gremio de taxistas  de Valledupar no se ha pronunciado ante la convocatoria realizada a nivel nacional por los conductores de servicio público.   El PILÓN intentó comunicarse con uno de los líderes de taxistas, pero no fue posible hallar respuesta.

POR YUSTIN VARELA