La violencia sexual es reconocida a nivel internacional como un problema de salud pública ya que atenta contra los derechos humanos y principalmente los derechos sexuales y reproductivos.

Según la Secretaría de Salud Departamental, el abuso sexual es uno de los problemas más graves a nivel social que afectan a los niños, niñas y adolescentes,  pues se desconocen sus dimensiones exactas ya que permanece generalmente oculto por distintas razones, ya sea desconocimiento de las víctimas y sus familiares, por indefensión de las víctimas o por tabúes vinculados con la sexualidad que impiden hablar del tema.

De esta manera, es posible determinar que debido al silencio que rodea el abuso sexual en menores, las denuncias no son interpuestas, sin embargo, fuentes de la Secretaría de Salud aseguran que el año pasado y lo que va corrido del año, estas han aumentado, pero que los resultados obtenidos siguen siendo parciales.

Cabe resaltar, que la población más vulnerable y que la más violentada es la población infantil que en la mayoría de los casos vive en estado de pobreza, y donde los victimarios suelen ser conocidos de los afectados.

Es así, como en la mayoría de los casos de abuso sexual, son protagonizados por personas cercanas al núcleo familiar de la víctima, o puede ocurrir en sitios que son frecuentados por los menores como los colegios, parques, jardines infantiles, entre otros.

¿Cómo detectar una posible violación? 

Según Comentó Yulibeth Almarales de Ávila, Coordinadora del programa de Maternidad Segura y Salud Sexual y Reproductiva de la Secretaría de Salud departamental, hay que estar muy pendientes de los posibles cambios que tiene un menor cuando es abusado.

“Cuando un menor es víctima de abuso sexual es muy difícil que comente lo sucedido a alguien, por eso los padres deben estar al tanto de los cambios anímicos que pueda presentar, por ejemplo, si el niño de repente empieza a estar solitario, si era un niño que le gustaba salir a jugar, después de ser abusado se va a ver retraído, va tener llanto fácil, puede haber falta de apetito, bajas calificaciones en el colegio, sentimiento de culpa. De igual manera, es necesario que los profesores del menor también trabajen para detectar los cambios de comportamiento que tiene, si el niño en el colegio era participativo, proactivo, pero después no habla en el salón, no se vincula con los demás niños, ahí hay que empezar a determinar las razones por las cuales ese cambio de comportamiento”, explicó Almarales de Ávila.

Consecuencia del abuso sexual 

El líder de salud pública, Adinson Calderón, dijo que “son muchas las consecuencias tanto físicas como psicológicas que puede acarrear una violación sexual a un menor de edad. En el caso de las niñas, con frecuencia se detecta un embarazo no deseado; en el caso de una niña menor de edad que no está preparada para afrontar un rol de madre. Otro de los problemas que se puede presentar es una infección o una enfermedad de transmisión sexual, pues cuando un niño es abusado, el victimario casi nunca se protege”.

De igual manera, la OMS, tiene una lista de consecuencias de maltrato infantil, en el caso explícito de violación, donde se destacan las dificultades para establecer vínculos afectivos, falta de conocimiento o expectativas no realistas sobre desarrollo infantil, consumo indebido de alcohol o drogas, participación en actividades delictivas, problemas de desarrollo en la familia, ruptura familiar o violencia entre los mismos miembros de la familia, aislamiento de la comunidad, depresión, comportamientos sexuales de alto riesgo y embarazos no deseados.

En Valledupar 

Si bien las cifras no están determinadas de manera total, por lo expuesto en la primera parte de este informe, con los números de casos reportados en la alcaldía de Valledupar, también se realizan acciones para la prevención del abuso sexual.

Según manifestó Rossana Sabatino Cantillo, Coordinadora de Salud Sexual y Reproductiva de Valledupar, “este es un problema muy difícil de atacar, pues no se tienen un consolidad total de las violaciones a menores, pero estamos trabajando para la prevención de estos hechos, con charlas en los colegios, en los barrios y abriendo espacios de participación e información para toda la comunidad. Este tema es importante y se hace necesario trabajar para que en el municipio no haya más abuso a menores, y si hay que los victimarios sean castigados como merecen. 

Abuso sexual a menores en cifras 

Para el año 2011 se denunciaron en la Secretaría de Salud 203 caos de abuso sexual a menores de edad en todo el departamento, siendo los principales municipios donde se registraron Valledupar, San Martín, La Jagua de Ibirico, El Copey, Bosconia y Aguachica con 32, 26, 21, 15, 15 y 12 casos respectivamente.

Para el año pasado, las denuncias aumentaron, pues se presentaron 309 casos de abusos sexuales a niños, niñas y adolescentes en el Cesar, siendo los principales municipios que aportaron a este total Valledupar, Bosconia, Curumaní, Codazzi y San Alberto, con 58, 25, 23, 22 y 21, respectivamente.

En lo que va corrido de este año, se han reportado a la Secretaría de Salud del Cesar, 283 casos de abuso sexual donde las víctimas son menores de 18 años. Siendo la capital del departamento el principal municipio donde se han presentado estos hechos. Valledupar ha reportado 78 casos de abuso sexuales a menores.

A nivel general, y según las cifras del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud Departamental, SIVIGILA, desde el 2011 hasta  lo que va corrido del 2013 se han reportado 775 casos de abuso sexual en menores de edad.

Acciones  de prevención 

Son varias las acciones que implementa la Secretaría de Salud Departamental, de acuerdo con Yulibeth Almarales, se realizan “asistencias técnicas a la red de instituciones de salud de primer y segundo nivel de complejidad en los 25 municipios del departamento, creación de estrategia comunicativa código verde, con la cual se busca evitar la revictimización secundaria en el sector de salud, socialización del modelo de atención integral a víctimas de violencia sexual con capacitaciones a personal médico y la creación de comités interinstitucionales consultivos municipales para la prevención de abuso sexual en niñas”.

Datos de la OMS

Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, aproximadamente un 20% de las mujeres y un 7% de los hombres manifiestan haber sufrido abuso sexual en la infancia, mientras que un 25 a 50 por ciento de los niños de ambos sexos refieren maltratos físicos.

Entre las consecuencias del abuso sexual infantil se encuentran problemas de salud física y mental para toda la vida y efectos sociales y laborales negativos que pueden retrasar el desarrollo económico y social de los países.
De acuerdo con la OMS, es posible prevenir el abuso sexual infantil antes de que se produzca, estudiando los comportamientos que tiene el menor; y las atenciones constantes a los niños y familiares pueden reducir el riesgo de repetición del abuso o el maltrato y minimizar las consecuencias.

Por Freddy Oñate Acevedo

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