La Comisión de la Verdad realizó este miércoles un diálogo virtual, denominado ‘Democracia, otra víctima del conflicto en Magdalena, El Cesar y La Guajira’, el cual fue transmitido por las redes sociales de EL PILÓN, y en cuyo espacio fueron escuchados actores de partidos políticos en esta región del Caribe colombiano y finalmente las conclusiones de la comisionada Marta Ruíz.

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La jornada fue un espacio u oportunidad en la que se escucharon las voces de los representantes de colectividades de dichos departamentos que vivieron las consecuencias de la guerra durante el ejercicio de sus actividades políticas y democráticas.

Por el departamento del Cesar, participó el líder del partido Alianza Verde, Xavier Estrada, quien indicó que en esta región hubo un emergente y progresivo surgimiento de liderazgos, de nombres de líderes que cautivaron a la ciudadanía y que durante el conflicto fueron perseguidos y, en muchos casos asesinados.

Citó el caso de Luis Fernando Rincón López, exalcalde de Aguachica y candidato por segunda vez, quien fue asesinado por las Autodefensas Unidas; el cual promovió la iniciativa de la Consulta por La Paz en 1995.  También se refirió a las afectaciones y percusiones que sufrió la dirigencia sindical del Cesar durante lo que llamó ‘la época dorada’ de este sector y dijo que esta represión y actos de violencia contra líderes sindicales es la causa de que en estos tiempos la dirigencia actual no tenga la misma influencia y brillantez de aquellos tiempos. Sostuvo que el detrimento de los sindicatos es uno de los impactos del conflicto a la democracia en este departamento. 

Por su parte la presidenta del partido Liberal de La Guajira, Astrid Ariza dijo que La Guajira, El Cesar y el Magdalena han sufrido los embates de la guerra, pero insistió en que es importante que se siga luchando por la paz y el cumplimiento y defensa del Acuerdo de Paz.

“Hay que insistir en nuevos acuerdos con los nuevos grupos armados que han surgido para poder vivir en paz, una paz duradera y también es importante que se conozca la verdad, la reparación de las víctimas, el perdón y la no repetición para una convivencia política y lograr el desarrollo de los departamentos y el país”, sostuvo.

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‘EL CONFLICTO ARMADO SURGIÓ POR DISPUTA DE PODER’

La comisionada Marta Ruiz manifestó que es muy importante entender cuál ha sido el impacto del conflicto armado en la democracia, en el funcionamiento, en la vida y en la política, pero no solo los impactos en términos de muertes, de exterminio de movimientos, en términos de cooptación del estado sino en términos de la calidad de vida y del intercambio que hay de la convivencia y las personas.

“Este es un conflicto armado que surgió por un problema político por disputa de poder que pasó a ser un problema armado, pero la esencia de este conflicto es la lucha por el poder. Tanto en el Cesar, La Guajira y Magdalena hay que preguntarse si los periodistas pudieron informar si se pudo conocer la verdad de lo que sucedió, si hubo prensa libre cuando mataron a muchos periodistas y a otros los silenciaron aún sin matarlos. Qué pasó con los movimientos sociales y que hoy siguen siendo asesinados por la tierra, por el medio ambiente y por derechos laborales”, destacó la comisionada.

Igualmente indicó que lo peor que le puede pasar a una democracia es que se dispute con violencia y esto es  lo que ha pasado en todo el país, en el Cesar, La Guajira y Magdalena a lo largo de los años.

“Ha habido violencia revolucionaria y reaccionaria, violencia mafiosa y hay que hablar del cómo la financiación mafiosa de las campañas políticas interfieren con la democracia porque hacen que esta no pueda funcionar, no puede llegar al poder solo el que tenga el dinero que en muchos casos proviene de las economías ilícitas de las mafias y eso nos va llevando a un problema que va acabando con la competencia electoral y se va convirtiendo en un sistema normal de la democracia cuando en la realidad lo que hay es una gran precariedad, miedo y silencio”, subrayó Marta Ruiz.

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Puntualizó al decir que: “Erradicar la violencia no implica solo erradicar la muerte sino la intimidación y la amenaza. Necesitamos dignificar la política para construir paz. La Comisión de la Verdad se compromete a generar diálogos entre la región y nación y hay que entender que el problema de la democracia es nacional y tenemos la obligación de esclarecer lo que ha pasado”.

POR: MILAGRO SÁNCHEZ FLÓREZ/ EL PILÓN.