Hasta ahora el mensaje es de preocupación, pero el Ministerio de Cultura espera cristalizar el proyecto de la Cátedra de la Música Vallenata Tradicional, a través de la Universidad Popular del Cesar.
Existe un alto grado de preocupación entre conocedores y defensores de la música vallenata tradicional por el desconocimiento en la declaratoria del vallenato como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad, hecha por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco- por sus siglas en inglés, el 1 de diciembre de 2015.
El mensaje de la Unesco, como lo describe el compositor Rosendo Romero Ospino, es una alerta para el país sobre los riesgos de una de sus expresiones culturales más arraigadas.
“La gente ha cogido esto como si se tratara de un premio y no lo es, es una advertencia que nos hace la Unesco y una alerta para que se tomen las medidas consecuentes para la defensa de la música vallenata”, aclara Romero Ospino.
Después del histórico día (1 de diciembre de 2015) que se logró conocer que el vallenato tradicional está en “peligro de desaparición”, como explicó el Ministerio de Cultura, las medidas adoptadas “han sido paños de agua tibia”, afirma el autor de obras como ‘Mensaje de navidad’, ‘Noche sin luceros’, ‘Cadenas’, entre otras más.
“Ya va para un año que se tomó la determinación de la Unesco y es la hora y muchos periodistas no saben a ciencia cierta cuáles son los riesgos, ni cómo, ni qué se debe proteger”, recalca el autor villanuevero.
Una luz al final del camino es la opción que estudia la Universidad Popular del Cesar, de abrir la Cátedra de la Música Vallenata, en 2017.
“Anhelamos que la Universidad Popular lidere procesos investigativos en la Cátedra de la Música Vallenata, sería fundamental porque quienes van a asumir el vallenato tradicional son los niños de 7 años. A la generación actual no le interesa la tradición, ellos creen que lo que graban es vallenato y opinan que el vallenato ha evolucionado, que mentira tan grande. Entiendo que si me hablan de la parte interpretativa lo acepto, pero en la composición hay un retroceso comprobado”, puntualiza Romero, quien es miembro del Comité de Vigilancia del Plan Especial de Salvaguardia (PES), encargado de hacerle seguimiento a los detalles del vallenato como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad.
“Es absolutamente contradictorio que el vallenato haya sido puesto en la lista de los patrimonios inmateriales de la humanidad y en nuestros festivales se le dé mayor importancia a unas músicas foráneas que no le aportan nada a la región. ¿Hasta cuándo vamos a estar creyendo que la música de afuera es mejor que la de nosotros?”, agrega el compositor, hermano del acordeonero Israel Romero, otro artista insigne del folclor vallenato.
La iniciativa del médico y compositor Adrián Pablo Villamizar Zapata, basada en trabajar en la recuperación, compilación, preservación y divulgación del vallenato auténtico, primero fue entregada al Clúster de la Cultura y la Música Vallenata, y posteriormente al Ministerio de Cultural. El gobierno nacional la declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación y luego fue llevado ante la Unesco, para que la música tradicional del Magdalena Grande quedara incluida en la Lista de Patrimonio Cultural Inmaterial en necesidad de salvaguardia urgente.
“El vallenato se apegó a la nueva ola, ese movimiento en el cual la construcción literaria es facilista y rítmica, donde se privilegia el sabor y no el contenido, empezó a modificar en la mente de las personas el imaginario de lo que significa música vallenata, por tal razón sentí que debía dejar de quejarme y trabajar por esta música, ahí fue donde me inquietó buscar otras alternativas”, argumenta Adrián Villamizar, ganador del concurso de la Canción Inédita del Festival Vallenato en 2011.
El vallenato como patrimonio de la humanidad acarrea que las administraciones municipales, departamentales y la nación pueden abrir proyectos encaminados a la salvaguarda del vallenato tradicional, además se puede acceder a los recursos del Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA) al consumo de la telefonía celular en los departamentos de La Guajira, Magdalena y Cesar, y los 26 municipios cubiertos por la declaratoria.
La Cátedra de la Música Vallenata Tradicional es un proyecto del Plan Especial de Salvaguarda, a través del Ministerio de Cultura y con el acompañamiento de la Universidad Popular del Cesar.
Viviana Cortés Angarita, asesora del grupo de Patrimonio Cultural Inmaterial, explicó las acciones que la Dirección del Patrimonio adscrita al MinCultura ha venido desarrollando desde la decisión tomada en Windhoek, Namibia (África), en la décima reunión realizada por el Comité Intergubernamental de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco.
Aparecen proyectos como: un congreso de festivales vallenatos en Valledupar; Música vallenata tradicional en sintonía, que se está desarrollando en el Cesar, La Guajira y Magdalena, por medio de 10 propuestas radiales que aporten a la salvaguardia del vallenato; la elaboración de la cartilla ¡Ay Ombe juepa jé! Toca, canta, versea, juega y baila con el vallenato: iniciación en música popular tradicional Eje Caribe Oriental, La Guajira, Magdalena y Cesar, por medio del Programa Nacional de Música para la Convivencia de la Dirección de Artes; documental “La Provincia, vallenato tradicional” y cortos de 6 y 3 realizados por el documentalista Felipe Paz.
“Estas iniciativas que el Ministerio está promoviendo necesitan un soporte muy fuerte y un apoyo de la región. Pensamos que es un compromiso también de las regiones, tanto de sus gobiernos territoriales como de los gestores locales”, señala Viviana Cortés Angarita.
Sobre la Cátedra de la Música Vallenata dijo que estudian el diseño de una facultad que se adapte a la misma manifestación, no una clase común y corriente que tiene como punto de partida el año 2017.
Las regiones con influencia en la salvaguarda del vallenato tradicional tienen que darle por ley el 50 % de los recursos del Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA) al consumo de la telefonía celular, traducidos a recursos llegan a los 800 millones de pesos anuales.
“Es un presupuesto de las regiones más directo para salvaguardar esa manifestación que lo que el Ministerio de Cultura podría hacer anualmente. Son ocho manifestaciones que están en la lista de la humanidad, todas con urgencias y requieren una presencia del gobierno central”, explica Cortés Angarita.
Por los lados de la oficina de Cultura del Cesar se conoció que abrirán una convocatoria, a finales de octubre, para mostrarle a la comunidad cómo presentar los proyectos de salvaguardia del vallenato. Mientras que en Magdalena han presentado 16 proyectos de formación y apoyo a las estrategias de divulgación por medio de festivales, escuelas de formación, y el Ministerio de Cultura ha aprobado varios de ellos. La Guajira está en el trámite para entregar el proyecto denominado ‘Diseño del observatorio de la música vallenata’.
Cabe aclarar que los recursos de Impuesto al Consumo de la telefonía asignado son desde 2016.
Algunos de los proyectos previstos en el PES son:
* Creación del Observatorio de la Música y cultura vallenata tradicional.
* Formulación del proyecto para la implementación de la cátedra vallenata.
* Fortalecimiento del conocimiento en las escuelas de música vallenata sobre el vallenato tradicional.
* Programa de investigación y memoria del vallenato tradicional “placeres tengo”.
* Fomento de la difusión del vallenato tradicional en el espacio electromagnético de la nación.
* Formulación del plan de desarrollo turístico-cultural de “El vallenato tradicional.”
El Comité de Vigilancia del Plan Especial de Salvaguardia (PES) está integrado por Álvaro Cuello Blanchar, Lenín Bueno Suárez, Rosendo Romero, Ariel Castillo y Efraín Quintero Molina. Ellos avalan las iniciativas que el Ministerio de Cultura pone a consideración. Ese PES tiene cuatro líneas de trabajo:
1. Transmisión de conocimientos: recuperación de memoria que pueda ser usada en capacitaciones y en la formación de las nuevas generaciones de la región Caribe.
2. Normatividad, políticas y organización sectorial: incentivar las organizaciones comunitarias que fomenten creación, producción y circulación del vallenato tradicional.
3. Promoción, difusión y comercialización: actualmente no hay una difusión adecuada de los elementos culturales constitutivos de la música vallenata tradicional.
4. Seguimiento y evaluación: la comunidad designó un comité que deberá hacer seguimiento a los proyectos que permitan salvaguardar el vallenato tradicional.
Peter Manjarrés es uno de los intérpretes que lidera la defensa por la música vallenata tradicional. Así lo demostró con el compacto ‘Solo Clásicos’ en su segunda edición, entregado al público con los acordeones de Emiliano Zuleta Díaz y Sergio Luis Rodríguez.
Además de Manjarrés, está el rey de reyes Hugo Carlos Granados, quien prepara un compacto que busca preservar la música vallenata tradicional, y es en homenaje a su padre Ovidio Granados. El Ministerio de Cultura está apoyando la grabación del disco y al final este producto tendrá circulación gratuita en todo el país. La voz será de Armando Mendoza.
Aunque los artistas elogian la decisión de la Unesco, la responsabilidad también es de ellos porque deben trabajar para salvar las raíces de la música que hoy se identifica como la más fuerte y más sonada en el país, manteniéndose por encima de los nuevos géneros.
Datos Infografía
Inversión 2011-2016
Año Mincultura – Dirección del Patrimonio
2012 $50 millones (Elaboración del PES)
2013 $90 millones (Elaboración del PES)
2014 $153 millones (Ejecución del PES)
2015 $103.908 millones (proyectos varios)
2015 $95.700 millones (proyectos varios)
2016 $95.700 millones (‘La música vallenata tradicional en sintonía’, entre otros.)
Sub total ejecución PES $910.570 millones
En la lista de los patrimonios culturales inmateriales colombianos de la Unesco están el Carnaval de Barranquilla, espacio cultural de Palenque de San Basilio, entre otros.
“La declaración se cogió como si la Unesco nos hubiera dado un premio. No es un premio, es una advertencia de que hay un Patrimonio Inmaterial de la Humanidad que está en riesgo de desaparecer. Es increíble que la gente no haya comprendido ese campanazo que nos dieron”: Rosendo Romero Ospino.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
Hasta ahora el mensaje es de preocupación, pero el Ministerio de Cultura espera cristalizar el proyecto de la Cátedra de la Música Vallenata Tradicional, a través de la Universidad Popular del Cesar.
Existe un alto grado de preocupación entre conocedores y defensores de la música vallenata tradicional por el desconocimiento en la declaratoria del vallenato como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad, hecha por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco- por sus siglas en inglés, el 1 de diciembre de 2015.
El mensaje de la Unesco, como lo describe el compositor Rosendo Romero Ospino, es una alerta para el país sobre los riesgos de una de sus expresiones culturales más arraigadas.
“La gente ha cogido esto como si se tratara de un premio y no lo es, es una advertencia que nos hace la Unesco y una alerta para que se tomen las medidas consecuentes para la defensa de la música vallenata”, aclara Romero Ospino.
Después del histórico día (1 de diciembre de 2015) que se logró conocer que el vallenato tradicional está en “peligro de desaparición”, como explicó el Ministerio de Cultura, las medidas adoptadas “han sido paños de agua tibia”, afirma el autor de obras como ‘Mensaje de navidad’, ‘Noche sin luceros’, ‘Cadenas’, entre otras más.
“Ya va para un año que se tomó la determinación de la Unesco y es la hora y muchos periodistas no saben a ciencia cierta cuáles son los riesgos, ni cómo, ni qué se debe proteger”, recalca el autor villanuevero.
Una luz al final del camino es la opción que estudia la Universidad Popular del Cesar, de abrir la Cátedra de la Música Vallenata, en 2017.
“Anhelamos que la Universidad Popular lidere procesos investigativos en la Cátedra de la Música Vallenata, sería fundamental porque quienes van a asumir el vallenato tradicional son los niños de 7 años. A la generación actual no le interesa la tradición, ellos creen que lo que graban es vallenato y opinan que el vallenato ha evolucionado, que mentira tan grande. Entiendo que si me hablan de la parte interpretativa lo acepto, pero en la composición hay un retroceso comprobado”, puntualiza Romero, quien es miembro del Comité de Vigilancia del Plan Especial de Salvaguardia (PES), encargado de hacerle seguimiento a los detalles del vallenato como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad.
“Es absolutamente contradictorio que el vallenato haya sido puesto en la lista de los patrimonios inmateriales de la humanidad y en nuestros festivales se le dé mayor importancia a unas músicas foráneas que no le aportan nada a la región. ¿Hasta cuándo vamos a estar creyendo que la música de afuera es mejor que la de nosotros?”, agrega el compositor, hermano del acordeonero Israel Romero, otro artista insigne del folclor vallenato.
La iniciativa del médico y compositor Adrián Pablo Villamizar Zapata, basada en trabajar en la recuperación, compilación, preservación y divulgación del vallenato auténtico, primero fue entregada al Clúster de la Cultura y la Música Vallenata, y posteriormente al Ministerio de Cultural. El gobierno nacional la declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación y luego fue llevado ante la Unesco, para que la música tradicional del Magdalena Grande quedara incluida en la Lista de Patrimonio Cultural Inmaterial en necesidad de salvaguardia urgente.
“El vallenato se apegó a la nueva ola, ese movimiento en el cual la construcción literaria es facilista y rítmica, donde se privilegia el sabor y no el contenido, empezó a modificar en la mente de las personas el imaginario de lo que significa música vallenata, por tal razón sentí que debía dejar de quejarme y trabajar por esta música, ahí fue donde me inquietó buscar otras alternativas”, argumenta Adrián Villamizar, ganador del concurso de la Canción Inédita del Festival Vallenato en 2011.
El vallenato como patrimonio de la humanidad acarrea que las administraciones municipales, departamentales y la nación pueden abrir proyectos encaminados a la salvaguarda del vallenato tradicional, además se puede acceder a los recursos del Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA) al consumo de la telefonía celular en los departamentos de La Guajira, Magdalena y Cesar, y los 26 municipios cubiertos por la declaratoria.
La Cátedra de la Música Vallenata Tradicional es un proyecto del Plan Especial de Salvaguarda, a través del Ministerio de Cultura y con el acompañamiento de la Universidad Popular del Cesar.
Viviana Cortés Angarita, asesora del grupo de Patrimonio Cultural Inmaterial, explicó las acciones que la Dirección del Patrimonio adscrita al MinCultura ha venido desarrollando desde la decisión tomada en Windhoek, Namibia (África), en la décima reunión realizada por el Comité Intergubernamental de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco.
Aparecen proyectos como: un congreso de festivales vallenatos en Valledupar; Música vallenata tradicional en sintonía, que se está desarrollando en el Cesar, La Guajira y Magdalena, por medio de 10 propuestas radiales que aporten a la salvaguardia del vallenato; la elaboración de la cartilla ¡Ay Ombe juepa jé! Toca, canta, versea, juega y baila con el vallenato: iniciación en música popular tradicional Eje Caribe Oriental, La Guajira, Magdalena y Cesar, por medio del Programa Nacional de Música para la Convivencia de la Dirección de Artes; documental “La Provincia, vallenato tradicional” y cortos de 6 y 3 realizados por el documentalista Felipe Paz.
“Estas iniciativas que el Ministerio está promoviendo necesitan un soporte muy fuerte y un apoyo de la región. Pensamos que es un compromiso también de las regiones, tanto de sus gobiernos territoriales como de los gestores locales”, señala Viviana Cortés Angarita.
Sobre la Cátedra de la Música Vallenata dijo que estudian el diseño de una facultad que se adapte a la misma manifestación, no una clase común y corriente que tiene como punto de partida el año 2017.
Las regiones con influencia en la salvaguarda del vallenato tradicional tienen que darle por ley el 50 % de los recursos del Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA) al consumo de la telefonía celular, traducidos a recursos llegan a los 800 millones de pesos anuales.
“Es un presupuesto de las regiones más directo para salvaguardar esa manifestación que lo que el Ministerio de Cultura podría hacer anualmente. Son ocho manifestaciones que están en la lista de la humanidad, todas con urgencias y requieren una presencia del gobierno central”, explica Cortés Angarita.
Por los lados de la oficina de Cultura del Cesar se conoció que abrirán una convocatoria, a finales de octubre, para mostrarle a la comunidad cómo presentar los proyectos de salvaguardia del vallenato. Mientras que en Magdalena han presentado 16 proyectos de formación y apoyo a las estrategias de divulgación por medio de festivales, escuelas de formación, y el Ministerio de Cultura ha aprobado varios de ellos. La Guajira está en el trámite para entregar el proyecto denominado ‘Diseño del observatorio de la música vallenata’.
Cabe aclarar que los recursos de Impuesto al Consumo de la telefonía asignado son desde 2016.
Algunos de los proyectos previstos en el PES son:
* Creación del Observatorio de la Música y cultura vallenata tradicional.
* Formulación del proyecto para la implementación de la cátedra vallenata.
* Fortalecimiento del conocimiento en las escuelas de música vallenata sobre el vallenato tradicional.
* Programa de investigación y memoria del vallenato tradicional “placeres tengo”.
* Fomento de la difusión del vallenato tradicional en el espacio electromagnético de la nación.
* Formulación del plan de desarrollo turístico-cultural de “El vallenato tradicional.”
El Comité de Vigilancia del Plan Especial de Salvaguardia (PES) está integrado por Álvaro Cuello Blanchar, Lenín Bueno Suárez, Rosendo Romero, Ariel Castillo y Efraín Quintero Molina. Ellos avalan las iniciativas que el Ministerio de Cultura pone a consideración. Ese PES tiene cuatro líneas de trabajo:
1. Transmisión de conocimientos: recuperación de memoria que pueda ser usada en capacitaciones y en la formación de las nuevas generaciones de la región Caribe.
2. Normatividad, políticas y organización sectorial: incentivar las organizaciones comunitarias que fomenten creación, producción y circulación del vallenato tradicional.
3. Promoción, difusión y comercialización: actualmente no hay una difusión adecuada de los elementos culturales constitutivos de la música vallenata tradicional.
4. Seguimiento y evaluación: la comunidad designó un comité que deberá hacer seguimiento a los proyectos que permitan salvaguardar el vallenato tradicional.
Peter Manjarrés es uno de los intérpretes que lidera la defensa por la música vallenata tradicional. Así lo demostró con el compacto ‘Solo Clásicos’ en su segunda edición, entregado al público con los acordeones de Emiliano Zuleta Díaz y Sergio Luis Rodríguez.
Además de Manjarrés, está el rey de reyes Hugo Carlos Granados, quien prepara un compacto que busca preservar la música vallenata tradicional, y es en homenaje a su padre Ovidio Granados. El Ministerio de Cultura está apoyando la grabación del disco y al final este producto tendrá circulación gratuita en todo el país. La voz será de Armando Mendoza.
Aunque los artistas elogian la decisión de la Unesco, la responsabilidad también es de ellos porque deben trabajar para salvar las raíces de la música que hoy se identifica como la más fuerte y más sonada en el país, manteniéndose por encima de los nuevos géneros.
Datos Infografía
Inversión 2011-2016
Año Mincultura – Dirección del Patrimonio
2012 $50 millones (Elaboración del PES)
2013 $90 millones (Elaboración del PES)
2014 $153 millones (Ejecución del PES)
2015 $103.908 millones (proyectos varios)
2015 $95.700 millones (proyectos varios)
2016 $95.700 millones (‘La música vallenata tradicional en sintonía’, entre otros.)
Sub total ejecución PES $910.570 millones
En la lista de los patrimonios culturales inmateriales colombianos de la Unesco están el Carnaval de Barranquilla, espacio cultural de Palenque de San Basilio, entre otros.
“La declaración se cogió como si la Unesco nos hubiera dado un premio. No es un premio, es una advertencia de que hay un Patrimonio Inmaterial de la Humanidad que está en riesgo de desaparecer. Es increíble que la gente no haya comprendido ese campanazo que nos dieron”: Rosendo Romero Ospino.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN