EL PILÓN dialogó con Yeiner Paul Soto, presidente de los ediles de la Comuna 1 de Valledupar, sobre su trabajo durante estos cuatro años y la necesidad de implementar la política pública para los habitantes de calle en Valledupar.
EL PILÓN dialogó con Yeiner Paul Soto, presidente de los ediles de la Comuna 1 de Valledupar, sobre su trabajo durante estos cuatro años y la necesidad de implementar la política pública para los habitantes de calle en Valledupar.
Hacer control político a los secretarios de Despacho de la Alcaldía de Valledupar. Nosotros solicitamos el recinto de la Casa de la Cultura y allí nos reunimos. Los secretarios nos comparten informes de las obras que implementan en los barrios. Para eso nosotros armamos comisiones y acompañamos donde construyen obras. Siempre vamos a ver qué materiales instalan, cómo lo hacen, las condiciones, y se hace seguimiento.
Nos acercamos a las autoridades y llevamos las peticiones. En mi caso, en medio de la pandemia se pidió apoyo a empresas de Medellín y Riohacha para entregar alcohol y tapabocas. También trabajamos por la pavimentación en barrios como Garupal, La Granja, Arizona, Bella Vista y Don Alberto.
En algunos casos. Nosotros trabajamos para que en Valledupar se implementara la Política Pública de los habitantes de calle, pero no hubo disposición para construir los hogares de paso. Nosotros estuvimos en Bogotá, Barranquilla, Bucaramanga, aprendiendo cómo se trabajaban los hogares de paso para recuperar a los habitantes de calle.
Necesitamos que los próximos mandatarios se comprometan con esa política pública y construyan tres hogares de paso en la ciudad porque sigue creciendo el número de habitantes de calle.
Los hay, pero privados. El municipio no tiene un lugar donde atender a esa población.
La idea es que la Gobernación del Cesar y la Alcaldía de Valledupar aporten los terrenos para reducir el número de habitantes de calle. Ahora que se intervino el pabellón del Idema, los habitantes de calle salieron del lugar y se esparcieron por la ciudad. El último dato que conocí es que hay más de 1.200 habitantes de calle en Valledupar.
La idea es que los hogares de paso sean administrados por el municipio y la Gobernación del Cesar. Serían lugares de descanso, aseo, alimentación, todo en busca de la rehabilitación de las personas. Barranquilla se ofreció ayudar a Valledupar en el proceso, pero necesitamos la voluntad política de nuestros gobernantes.
La política pública se creó para que los municipios la implementen durante 10 años. El Gobierno nacional la construyó, pero cada municipio tiene autonomía para aprobar en los concejos. Solo sería aterrizarla a Valledupar.
Lo que queremos es que se haga seguimiento y se rehabiliten las personas. En el tiempo adecuado. La política pública establece que es necesario que mantengan la mente ocupada, es decir, que puedan trabajar para evitar que recaigan.
Con Superservicios y Afinia logramos una inversión en el mercado público. Desde hace varios años, el servicio de energía en el mercado era pésimo porque no habían cambiado los transformadores a pesar de que era una obligación. Se trajeron dos transformadores para que el servicio funcionara al 100%.
¿Cómo les fue con la modificación del POT?
Estuvimos en la Oficina de Planeación hablando sobre los barrios Gaitán y La Granja. Ambos barrios son residenciales y querían clasificarlos en los estratos 4 y 3 y como zona comercial. Eso implicaba pagar más en todos los sentidos. Nosotros lo que hicimos fue presentar una petición a la Oficina de Planeación, la cual delegó profesionales. Ellos nos visitaron y confirmaron que es una zona residencial.
32 barrios.
¿Cuáles son los barrios más desafiantes?
La margen derecha del río Guatapurí. Con el Ejército Nacional hemos realizado campañas para el control de la pólvora y con la Policía Ambiental buscamos controlar las quemas. Ahora el problema son las acequias que están siendo contaminadas.
Estamos hablando con empresas como Argos para que nos ayuden con una escombrera en la ciudad. Ahora que fui al congreso de ediles visité esas empresas. Ojalá se pueda dar.
Lo negativo fue que el alcalde Mello Castro nunca se reunió con los ediles. Los alcaldes no pueden dejar a un lado a los ediles. Lo solicitamos varias veces, pero nunca respondió. El Concejo también estuvo de espalda a los ediles y la ciudad. Lo único que hicieron fue aprobar el sueldo a los ediles porque así lo determinaba la norma.
Creo que por falta de voluntad política, o quizás por egoísmo. Siento que a veces nos miran con menosprecio, pero no. Ser edil es un privilegio. Es el primer contacto con la comunidad.
Que trabaje de la mano de los ediles y presidentes de juntas que quedaron electos. Que no se olvide de caminar las calles, que esté de la mano del pueblo.
Por Deivis Caro
EL PILÓN dialogó con Yeiner Paul Soto, presidente de los ediles de la Comuna 1 de Valledupar, sobre su trabajo durante estos cuatro años y la necesidad de implementar la política pública para los habitantes de calle en Valledupar.
EL PILÓN dialogó con Yeiner Paul Soto, presidente de los ediles de la Comuna 1 de Valledupar, sobre su trabajo durante estos cuatro años y la necesidad de implementar la política pública para los habitantes de calle en Valledupar.
Hacer control político a los secretarios de Despacho de la Alcaldía de Valledupar. Nosotros solicitamos el recinto de la Casa de la Cultura y allí nos reunimos. Los secretarios nos comparten informes de las obras que implementan en los barrios. Para eso nosotros armamos comisiones y acompañamos donde construyen obras. Siempre vamos a ver qué materiales instalan, cómo lo hacen, las condiciones, y se hace seguimiento.
Nos acercamos a las autoridades y llevamos las peticiones. En mi caso, en medio de la pandemia se pidió apoyo a empresas de Medellín y Riohacha para entregar alcohol y tapabocas. También trabajamos por la pavimentación en barrios como Garupal, La Granja, Arizona, Bella Vista y Don Alberto.
En algunos casos. Nosotros trabajamos para que en Valledupar se implementara la Política Pública de los habitantes de calle, pero no hubo disposición para construir los hogares de paso. Nosotros estuvimos en Bogotá, Barranquilla, Bucaramanga, aprendiendo cómo se trabajaban los hogares de paso para recuperar a los habitantes de calle.
Necesitamos que los próximos mandatarios se comprometan con esa política pública y construyan tres hogares de paso en la ciudad porque sigue creciendo el número de habitantes de calle.
Los hay, pero privados. El municipio no tiene un lugar donde atender a esa población.
La idea es que la Gobernación del Cesar y la Alcaldía de Valledupar aporten los terrenos para reducir el número de habitantes de calle. Ahora que se intervino el pabellón del Idema, los habitantes de calle salieron del lugar y se esparcieron por la ciudad. El último dato que conocí es que hay más de 1.200 habitantes de calle en Valledupar.
La idea es que los hogares de paso sean administrados por el municipio y la Gobernación del Cesar. Serían lugares de descanso, aseo, alimentación, todo en busca de la rehabilitación de las personas. Barranquilla se ofreció ayudar a Valledupar en el proceso, pero necesitamos la voluntad política de nuestros gobernantes.
La política pública se creó para que los municipios la implementen durante 10 años. El Gobierno nacional la construyó, pero cada municipio tiene autonomía para aprobar en los concejos. Solo sería aterrizarla a Valledupar.
Lo que queremos es que se haga seguimiento y se rehabiliten las personas. En el tiempo adecuado. La política pública establece que es necesario que mantengan la mente ocupada, es decir, que puedan trabajar para evitar que recaigan.
Con Superservicios y Afinia logramos una inversión en el mercado público. Desde hace varios años, el servicio de energía en el mercado era pésimo porque no habían cambiado los transformadores a pesar de que era una obligación. Se trajeron dos transformadores para que el servicio funcionara al 100%.
¿Cómo les fue con la modificación del POT?
Estuvimos en la Oficina de Planeación hablando sobre los barrios Gaitán y La Granja. Ambos barrios son residenciales y querían clasificarlos en los estratos 4 y 3 y como zona comercial. Eso implicaba pagar más en todos los sentidos. Nosotros lo que hicimos fue presentar una petición a la Oficina de Planeación, la cual delegó profesionales. Ellos nos visitaron y confirmaron que es una zona residencial.
32 barrios.
¿Cuáles son los barrios más desafiantes?
La margen derecha del río Guatapurí. Con el Ejército Nacional hemos realizado campañas para el control de la pólvora y con la Policía Ambiental buscamos controlar las quemas. Ahora el problema son las acequias que están siendo contaminadas.
Estamos hablando con empresas como Argos para que nos ayuden con una escombrera en la ciudad. Ahora que fui al congreso de ediles visité esas empresas. Ojalá se pueda dar.
Lo negativo fue que el alcalde Mello Castro nunca se reunió con los ediles. Los alcaldes no pueden dejar a un lado a los ediles. Lo solicitamos varias veces, pero nunca respondió. El Concejo también estuvo de espalda a los ediles y la ciudad. Lo único que hicieron fue aprobar el sueldo a los ediles porque así lo determinaba la norma.
Creo que por falta de voluntad política, o quizás por egoísmo. Siento que a veces nos miran con menosprecio, pero no. Ser edil es un privilegio. Es el primer contacto con la comunidad.
Que trabaje de la mano de los ediles y presidentes de juntas que quedaron electos. Que no se olvide de caminar las calles, que esté de la mano del pueblo.
Por Deivis Caro