Secretaria Departamental de Salud investigará la causa en la que murieron cuatro personas provenientes del E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco de Pailitas.
Un sistema de salud representa la suma de todas las organizaciones, instituciones y recursos cuyo objetivo principal corresponde en mejorar la salud pero sobre todo asistir de manera oportuna garantizando la vida del paciente. El personal, la financiación, suministros, comunicación, así como la orientación, una dirección general y un óptimo sistema de transporte son piezas claves que permiten prestar en calidad y tiempo un buen servicio.
Este último, en el departamento del Cesar se ha convertido en uno de los huesos fracturados del sistema, hasta el punto que muchos consideran que el negocio de las ambulancias es más rentable que cualquier otro
Escenarios que van desde una posible negligencia de operadores de un peaje o de médicos que muchas veces no cuentan con dinero durante los traslados para pagar nueve mil pesos en uno de los ocho puntos distribuidos en las tres subregiones del Cesar, ocasionando la muerte de un paciente que requiere ser llevado con urgencia a un centro médico en Valledupar, hasta el reciente fallecimiento de cuatro personas producto de una colisión por una remisión desde el municipio de Pailitas hasta la capital del departamento.
Estas cuatro muertes desde el punto de vista médico vial pudieran representar uno de los sucesos más fatales en el 2019, por el número de pacientes que trasladaba la ambulancia, según fuentes oficiales superaba la capacidad violando las normas en el traslado de enfermos ya que de ocurrir algún riesgo el seguro solo cubre a uno de los lesionados que se transportan y no a dos como sucedió en el caso de las cuatro víctimas que murieron el pasado 12 de diciembre de 2019, entre Codazzi y San Diego.
Este acontecimiento dio paso a la apertura de una investigación en contra del gerente de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco de Pailitas, Romano Renato Olivieri, por ser el presunto responsable, como ordenador del gasto, ante la presencia de hallazgos que no se compadecen con la norma, así lo anunció el secretario departamental de salud, Jorge Orozco, quien expresó que: “La remisión y contra remisión es responsabilidad de la clínica o del hospital. En la unidad venía más de un paciente y eso es prohibido, junto a familiares que tampoco es permitido”.
Orozco informó que en la investigación que inicia el día lunes se atenderán diferentes interrogantes: ¿Cómo llegaron al hospital? ¿Qué patologías presentaban? ¿Por qué los remitieron? Adicional al estudio de la hipótesis que se maneja de un posible micro sueño del que fue víctima el conductor Hernando Álvarez Naisir, producto de posible exceso en sus funciones laborales. “Estamos investigando porque tenemos una competencia de vigilancia y control; cuando eso se dé, tendremos que tomar medidas con el centro asistencial”.
El Cesar hasta la madrugada de ese 12 de diciembre contaba con 28 ambulancias para atender la red pública coordinada a través del Centro Regulador de Emergencias, Urgencias y Desastres, Crue, una por cada centro médico, 25 dispuestas en los de baja complejidad y tres en los de media y mediana; hoy solo están a disposición 27 para este cierre de año.
Otra de las inquietudes a las que dio respuesta el secretario Orozco fue al hecho de trasladar a los pacientes al municipio de Valledupar, ubicado a tres horas de Pailitas y no a Aguachica a la mitad de distancia. “Esto hace parte de la investigación, ¿con qué red cuenta el departamento? ¿Qué era más cerca? ¿Cuál era la pertinencia médica?
Por su parte, el gerente de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco, doctor Romano Renato Olivieri, en conversación con EL PILÓN, sostuvo que el traslado de los pacientes obedeció a que una de ella tenía una complicación intestinal, además de una enfermedad de base con una neoplasia gástrica y la niña con una amputación del 99 % del dedo, en el caso de la pequeña, el gerente expresó que había transcurrido un tiempo prudencial desde que la menor de un año y 10 meses había sufrido el trauma. “Se consideró que tenía que ser valorada por un ortopedista y un médico vascular para evaluar la reinserción del dedo o tomar la decisión de quitar el área amputada con una remodelación del muñón”.
El gerente ante la consulta de por qué se tomó la decisión de remitir a los pacientes a Valledupar, y no a Aguachica, señaló: “Todos los enfermos uno los reporta, pero una de las pacientes necesitaba cuidados intensivos y Aguachica no lo tiene, fueron reportados y Aguachica no los aceptó”. Olivieri destacó que las hoy victimas en su momento aprobaron con “consentimiento informado” el traslado hacia la capital del Cesar, declaraciones que se contrastan con la versión de María Cecilia Orozco, abuela de la niña fallecida y madre de Kelly Johanna Martínez acompañante de la paciente quien también murió en el siniestro. Orozco madre de Johanna, desde Medicina Legal manifestó su inconformidad ante la “remisión que no tenía necesidad” quien consideró que María Belén Olmedo solo se había lastimado un dedo.
Extraoficialmente, se conoció que para un hospital municipal no representa el mismo costo un traslado diurno a una remisión en horas de la madrugada como fue el caso en el que una decisión médica desencadenó un escenario que enlutó a tres familias cesarenses. Una fuente consultada, quien pidió mantener reserva de su identidad, expresó que algunos centros de salud en cabeza de sus gerentes realizan hasta cinco traslados en un solo viaje generando múltiples recobros en un solo destino, ahorrando combustible, adicional a toda la asistencia medica que traiga el enfermo, así como el traslado de la enfermera que debería recibir una bonificación por viaje.
Para Romano Olivieri el traslado de cada enfermo se atiende en función a la disponibilidad del centro al que se le solicita el apoyo. “El traslado se realizó a la una de la mañana porque apenas se aceptan los pacientes nosotros tenemos que sacarlos, y ellos estuvieron de acuerdo, nosotros no podíamos quedarnos con una obstrucción intestinal que esperara la mañana ni con una niña que se amputó el dedo a las cinco de la tarde”, acotó el gerente.
El funcionario a cargo del hospital de primer nivel, desde el 2017 expresó: “El problema es la circunstancia que se presenta cuando la gente nos dice que no tienen para moverse, es una situación difícil. En cualquier clínica puede preguntar si le reciben un paciente que no lleve acompañante, no se lo reciben porque así es la norma”, respuesta que dio Olivieri al momento de consultarle cuál es el criterio que impera para la administración del hospital en trasladar a varios pacientes en la misma unidad ambulatoria.
¿Pasión, soberbia e intransigencia? Razones para una muerte anunciada
A través de un documento entregado por el Sindicato Nacional de la Salud y Seguridad Social, Sindess, seccional Cesar de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco, de fecha 03 de julio de 2019, dirigido a Romano Renato Olivieri Duque, mediante un derecho de petición evocando el artículo 23 de la Constitución Política Nacional solicitan lo siguiente:
“El compañero Hernando Álvarez Naisir, quien desempeña el cargo de conductor del Hospital y es miembro activo del comité local del sindicato, manifestó a este comité que únicamente hay dos conductores prestando el servicio de traslado de paciente a hospitales de segundo y tercer nivel de complejidad fuera del municipio de Pailitas”.
El comunicado también expresa que en su momento el hospital venía prestando servicio de traslado de pacientes con tres choferes y uno de ellos se encontraba de vacaciones cargando a los dos restantes el turno del que estaba en descanso. Solicitud que deja en claro las exigencias del comité sindical al expresar que esta decisión genera alto riesgo por los niveles de desgaste y cansancio de los conductores.
Sigue en el comunicado: “transitando por carreteras de alta peligrosidad, se pueden presentar microsueños y ocasionar accidentes graves donde se puede afectar la salud y vida de los pacientes y acompañantes, personal médico y como es de su conocimiento puede afectar las finanzas de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco debido a la demanda que puede venir por un hecho de esta magnitud”, expresa el requerimiento enviado a la gerencia del hospital.
En entrevista previa con el gerente Olivieri, este dijo que: “No hay en la gerencia del hospital nada por escrito ni verbal ni por WhatsApp ni correo de la institución que el conductor haya manifestado al gerente la anomalía de salud que se le estaba presentando, en la urgencia del hospital no hay ninguna consulta por parte del conductor donde se haya estudiado por cualquier problema que lo afectaría para el desempeño de él como conductor de la ambulancia”.
Ante el número de peticiones realizadas por el comité sindical se detallan: la contratación de otro conductor para suplir la necesidad que padecía el hospital teniendo en cuenta las remisiones a los niveles dos y tres por días promedios. La solicitud por parte del sindicato en que el hospital explique por qué no se había contratado otro chofer que cubra al que estaba de vacaciones puesto que esa petición debía estar explicita dentro del “Plan vacacional de 2019 del centro asistencial de Pailitas, y por último, la exigencia de una copia del plan vacacional de los empleados del hospital. Este documento fue recibido por el hospital de Pailitas, el 04 de julio de 2019 a las 9:30 a.m. y por la Personería Municipal de Pailitas el 03 de julio de 2019 a las 5:50 p.m.
“El último viaje que había realizado el chofer de la ambulancia lo hizo a las 8:30 p.m., del día 10 de diciembre y el regresó al hospital a las 3:00 a.m., del día 11 de diciembre y volvió a salir en el viaje donde tuvo el accidente el día 13 a la 1:40 de la mañana entonces no se puede decir que el conductor llegó y enseguida le tocó voltear otra vez. El conductor tuvo un lapso de 23 horas de reposo”, Según la fuente consultada expresa que la tragedia ocurrió el día 13, sin embargo, es de conocimiento público que sucedió el 12 de diciembre de 2019. Cabe destacar que por las diferencias en fechas ya había antecedes que venían demostrando la posible fatiga de salud a la que se estaba enfrentando el conductor posterior a la solicitud que realizó la seccional del sindicato.
Olivieri mencionó que los conductores estaban en total conocimiento del escenario al que se enfrentaban. “Eso implica que ellos conocen que van a cubrir las remisiones entre los dos, se le ha dicho a ellos que cualquier conductor está en la libertad de manifestar si se encuentra en condiciones de hacer un viaje o no. Si el señor Hernando Álvarez, tenía problemas que ni siquiera lo manifestó a la gerencia. Un médico del hospital lo hubiese visto e incapacitado encontrando que el conductor no estaba apto para eso, y yo, retomo otra vez, y llamo al señor Peñaloza para que se hubiera reintegrado”, no obstante, desde el mes de julio de 2019 se venían exigiendo una serie de peticiones para prever ese escenario.
En conversación con el presidente local del Sindicato Nacional de la Salud y Seguridad Social, Sindess, seccional Cesar de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco, Alfredo Ramos Valle, este mencionó que el conductor en su momento se dirigió al sindicato por lo “intransigente y soberbio que es el gerente”. “… Tuve una discusión con él y le dije usted no escucha al trabajador, usted es muy intransigente, hay que escucharlo, ellos se enferman uno no sabe cómo está la persona y me dijo y ¿cuándo trabajaban los dos?”.
El hospital cuenta con una nómina de 45 empleados de planta y 55 contratados por orden de prestación de servicios. El director mencionó que el chofer contaba con vacaciones vencidas desde el 2015 hasta el 2019, donde mencionó que el conductor había disfrutado de tres periodos vacacionales otorgados por la actual administración. “Una la disfrutó en agosto, otra en septiembre y la otra salió el 11 de noviembre, no sé puede decir que el señor venía saturado…”, destacó Olivieri quien lamentó la muerte de las cuatro personas desconociendo.
Jorge Luis López González / EL PILÓN
[email protected]
Secretaria Departamental de Salud investigará la causa en la que murieron cuatro personas provenientes del E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco de Pailitas.
Un sistema de salud representa la suma de todas las organizaciones, instituciones y recursos cuyo objetivo principal corresponde en mejorar la salud pero sobre todo asistir de manera oportuna garantizando la vida del paciente. El personal, la financiación, suministros, comunicación, así como la orientación, una dirección general y un óptimo sistema de transporte son piezas claves que permiten prestar en calidad y tiempo un buen servicio.
Este último, en el departamento del Cesar se ha convertido en uno de los huesos fracturados del sistema, hasta el punto que muchos consideran que el negocio de las ambulancias es más rentable que cualquier otro
Escenarios que van desde una posible negligencia de operadores de un peaje o de médicos que muchas veces no cuentan con dinero durante los traslados para pagar nueve mil pesos en uno de los ocho puntos distribuidos en las tres subregiones del Cesar, ocasionando la muerte de un paciente que requiere ser llevado con urgencia a un centro médico en Valledupar, hasta el reciente fallecimiento de cuatro personas producto de una colisión por una remisión desde el municipio de Pailitas hasta la capital del departamento.
Estas cuatro muertes desde el punto de vista médico vial pudieran representar uno de los sucesos más fatales en el 2019, por el número de pacientes que trasladaba la ambulancia, según fuentes oficiales superaba la capacidad violando las normas en el traslado de enfermos ya que de ocurrir algún riesgo el seguro solo cubre a uno de los lesionados que se transportan y no a dos como sucedió en el caso de las cuatro víctimas que murieron el pasado 12 de diciembre de 2019, entre Codazzi y San Diego.
Este acontecimiento dio paso a la apertura de una investigación en contra del gerente de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco de Pailitas, Romano Renato Olivieri, por ser el presunto responsable, como ordenador del gasto, ante la presencia de hallazgos que no se compadecen con la norma, así lo anunció el secretario departamental de salud, Jorge Orozco, quien expresó que: “La remisión y contra remisión es responsabilidad de la clínica o del hospital. En la unidad venía más de un paciente y eso es prohibido, junto a familiares que tampoco es permitido”.
Orozco informó que en la investigación que inicia el día lunes se atenderán diferentes interrogantes: ¿Cómo llegaron al hospital? ¿Qué patologías presentaban? ¿Por qué los remitieron? Adicional al estudio de la hipótesis que se maneja de un posible micro sueño del que fue víctima el conductor Hernando Álvarez Naisir, producto de posible exceso en sus funciones laborales. “Estamos investigando porque tenemos una competencia de vigilancia y control; cuando eso se dé, tendremos que tomar medidas con el centro asistencial”.
El Cesar hasta la madrugada de ese 12 de diciembre contaba con 28 ambulancias para atender la red pública coordinada a través del Centro Regulador de Emergencias, Urgencias y Desastres, Crue, una por cada centro médico, 25 dispuestas en los de baja complejidad y tres en los de media y mediana; hoy solo están a disposición 27 para este cierre de año.
Otra de las inquietudes a las que dio respuesta el secretario Orozco fue al hecho de trasladar a los pacientes al municipio de Valledupar, ubicado a tres horas de Pailitas y no a Aguachica a la mitad de distancia. “Esto hace parte de la investigación, ¿con qué red cuenta el departamento? ¿Qué era más cerca? ¿Cuál era la pertinencia médica?
Por su parte, el gerente de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco, doctor Romano Renato Olivieri, en conversación con EL PILÓN, sostuvo que el traslado de los pacientes obedeció a que una de ella tenía una complicación intestinal, además de una enfermedad de base con una neoplasia gástrica y la niña con una amputación del 99 % del dedo, en el caso de la pequeña, el gerente expresó que había transcurrido un tiempo prudencial desde que la menor de un año y 10 meses había sufrido el trauma. “Se consideró que tenía que ser valorada por un ortopedista y un médico vascular para evaluar la reinserción del dedo o tomar la decisión de quitar el área amputada con una remodelación del muñón”.
El gerente ante la consulta de por qué se tomó la decisión de remitir a los pacientes a Valledupar, y no a Aguachica, señaló: “Todos los enfermos uno los reporta, pero una de las pacientes necesitaba cuidados intensivos y Aguachica no lo tiene, fueron reportados y Aguachica no los aceptó”. Olivieri destacó que las hoy victimas en su momento aprobaron con “consentimiento informado” el traslado hacia la capital del Cesar, declaraciones que se contrastan con la versión de María Cecilia Orozco, abuela de la niña fallecida y madre de Kelly Johanna Martínez acompañante de la paciente quien también murió en el siniestro. Orozco madre de Johanna, desde Medicina Legal manifestó su inconformidad ante la “remisión que no tenía necesidad” quien consideró que María Belén Olmedo solo se había lastimado un dedo.
Extraoficialmente, se conoció que para un hospital municipal no representa el mismo costo un traslado diurno a una remisión en horas de la madrugada como fue el caso en el que una decisión médica desencadenó un escenario que enlutó a tres familias cesarenses. Una fuente consultada, quien pidió mantener reserva de su identidad, expresó que algunos centros de salud en cabeza de sus gerentes realizan hasta cinco traslados en un solo viaje generando múltiples recobros en un solo destino, ahorrando combustible, adicional a toda la asistencia medica que traiga el enfermo, así como el traslado de la enfermera que debería recibir una bonificación por viaje.
Para Romano Olivieri el traslado de cada enfermo se atiende en función a la disponibilidad del centro al que se le solicita el apoyo. “El traslado se realizó a la una de la mañana porque apenas se aceptan los pacientes nosotros tenemos que sacarlos, y ellos estuvieron de acuerdo, nosotros no podíamos quedarnos con una obstrucción intestinal que esperara la mañana ni con una niña que se amputó el dedo a las cinco de la tarde”, acotó el gerente.
El funcionario a cargo del hospital de primer nivel, desde el 2017 expresó: “El problema es la circunstancia que se presenta cuando la gente nos dice que no tienen para moverse, es una situación difícil. En cualquier clínica puede preguntar si le reciben un paciente que no lleve acompañante, no se lo reciben porque así es la norma”, respuesta que dio Olivieri al momento de consultarle cuál es el criterio que impera para la administración del hospital en trasladar a varios pacientes en la misma unidad ambulatoria.
¿Pasión, soberbia e intransigencia? Razones para una muerte anunciada
A través de un documento entregado por el Sindicato Nacional de la Salud y Seguridad Social, Sindess, seccional Cesar de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco, de fecha 03 de julio de 2019, dirigido a Romano Renato Olivieri Duque, mediante un derecho de petición evocando el artículo 23 de la Constitución Política Nacional solicitan lo siguiente:
“El compañero Hernando Álvarez Naisir, quien desempeña el cargo de conductor del Hospital y es miembro activo del comité local del sindicato, manifestó a este comité que únicamente hay dos conductores prestando el servicio de traslado de paciente a hospitales de segundo y tercer nivel de complejidad fuera del municipio de Pailitas”.
El comunicado también expresa que en su momento el hospital venía prestando servicio de traslado de pacientes con tres choferes y uno de ellos se encontraba de vacaciones cargando a los dos restantes el turno del que estaba en descanso. Solicitud que deja en claro las exigencias del comité sindical al expresar que esta decisión genera alto riesgo por los niveles de desgaste y cansancio de los conductores.
Sigue en el comunicado: “transitando por carreteras de alta peligrosidad, se pueden presentar microsueños y ocasionar accidentes graves donde se puede afectar la salud y vida de los pacientes y acompañantes, personal médico y como es de su conocimiento puede afectar las finanzas de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco debido a la demanda que puede venir por un hecho de esta magnitud”, expresa el requerimiento enviado a la gerencia del hospital.
En entrevista previa con el gerente Olivieri, este dijo que: “No hay en la gerencia del hospital nada por escrito ni verbal ni por WhatsApp ni correo de la institución que el conductor haya manifestado al gerente la anomalía de salud que se le estaba presentando, en la urgencia del hospital no hay ninguna consulta por parte del conductor donde se haya estudiado por cualquier problema que lo afectaría para el desempeño de él como conductor de la ambulancia”.
Ante el número de peticiones realizadas por el comité sindical se detallan: la contratación de otro conductor para suplir la necesidad que padecía el hospital teniendo en cuenta las remisiones a los niveles dos y tres por días promedios. La solicitud por parte del sindicato en que el hospital explique por qué no se había contratado otro chofer que cubra al que estaba de vacaciones puesto que esa petición debía estar explicita dentro del “Plan vacacional de 2019 del centro asistencial de Pailitas, y por último, la exigencia de una copia del plan vacacional de los empleados del hospital. Este documento fue recibido por el hospital de Pailitas, el 04 de julio de 2019 a las 9:30 a.m. y por la Personería Municipal de Pailitas el 03 de julio de 2019 a las 5:50 p.m.
“El último viaje que había realizado el chofer de la ambulancia lo hizo a las 8:30 p.m., del día 10 de diciembre y el regresó al hospital a las 3:00 a.m., del día 11 de diciembre y volvió a salir en el viaje donde tuvo el accidente el día 13 a la 1:40 de la mañana entonces no se puede decir que el conductor llegó y enseguida le tocó voltear otra vez. El conductor tuvo un lapso de 23 horas de reposo”, Según la fuente consultada expresa que la tragedia ocurrió el día 13, sin embargo, es de conocimiento público que sucedió el 12 de diciembre de 2019. Cabe destacar que por las diferencias en fechas ya había antecedes que venían demostrando la posible fatiga de salud a la que se estaba enfrentando el conductor posterior a la solicitud que realizó la seccional del sindicato.
Olivieri mencionó que los conductores estaban en total conocimiento del escenario al que se enfrentaban. “Eso implica que ellos conocen que van a cubrir las remisiones entre los dos, se le ha dicho a ellos que cualquier conductor está en la libertad de manifestar si se encuentra en condiciones de hacer un viaje o no. Si el señor Hernando Álvarez, tenía problemas que ni siquiera lo manifestó a la gerencia. Un médico del hospital lo hubiese visto e incapacitado encontrando que el conductor no estaba apto para eso, y yo, retomo otra vez, y llamo al señor Peñaloza para que se hubiera reintegrado”, no obstante, desde el mes de julio de 2019 se venían exigiendo una serie de peticiones para prever ese escenario.
En conversación con el presidente local del Sindicato Nacional de la Salud y Seguridad Social, Sindess, seccional Cesar de la E.S.E. Hospital Helí Moreno Blanco, Alfredo Ramos Valle, este mencionó que el conductor en su momento se dirigió al sindicato por lo “intransigente y soberbio que es el gerente”. “… Tuve una discusión con él y le dije usted no escucha al trabajador, usted es muy intransigente, hay que escucharlo, ellos se enferman uno no sabe cómo está la persona y me dijo y ¿cuándo trabajaban los dos?”.
El hospital cuenta con una nómina de 45 empleados de planta y 55 contratados por orden de prestación de servicios. El director mencionó que el chofer contaba con vacaciones vencidas desde el 2015 hasta el 2019, donde mencionó que el conductor había disfrutado de tres periodos vacacionales otorgados por la actual administración. “Una la disfrutó en agosto, otra en septiembre y la otra salió el 11 de noviembre, no sé puede decir que el señor venía saturado…”, destacó Olivieri quien lamentó la muerte de las cuatro personas desconociendo.
Jorge Luis López González / EL PILÓN
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