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Editorial - 24 mayo, 2023

Una nueva era para Telecaribe

Es de recordar que Telecaribe nació en Valledupar, fue la conversión regional y pública de un emprendimiento innovador llamado Televallenato

Con la elección unánime de las gobernaciones de la costa Caribe del villanuevero Ismael Fernández, un hombre de la radio, la prensa y las comunicaciones regionales, vuelve la dirección de Telecaribe a la amplia provincia vallenata y de Padilla.

Es de recordar que Telecaribe nació en Valledupar, fue la conversión regional y pública de un emprendimiento innovador llamado Televallenato, fundado por el vallenato, de ancestros también de Villanueva, José Jorge Dangond.

Dangond, como lo ha manifestado en entrevistas, se aburrió de ver tanta televisión venezolana desde adolescente, tantas novelas o culebrones, como los llaman allá en Venezuela y lo sorprendía la escasa capacidad y cobertura de la televisión colombiana.

El municipio de Villanueva ha contado con el privilegio de tener hijos suyos al frente de tan importante cargo, recordemos que allí también estuvo gerenciando el distinguido compositor vallenato Iván Ovalle Poveda.

En cuanto a la nueva era que inicia ahora el canal Telecaribe con la gerencia de Fernández, a quien le deseamos éxito, como colegas, es importante que reafirme el compromiso del primer canal, el nuestro, con todas las regiones olvidadas de la región, en especial las más abandonadas, representando sus historias, sus usos, tradiciones y su cultura; sus ambiciones de progreso – es un empresario de las comunicaciones – y su desarrollo en todos los ámbitos y dimensiones sociales y humanas.

Por supuesto, el vallenato tendrá su gran atención pues a él no solo le gusta, sino que lo estudia y analiza en programas de radio y hace tal nivel de aportes que, en el pasado Festival Vallenato, Sayco se lo reconoció en formal ceremonia.

Fundamental que Telecaribe ratifique su condición de ser un canal de televisión abierta, con gran sentido de inclusión regional, sin distingo alguno y así acabar de una buena vez con ese concepto que aún persiste en algunos críticos, en el sentido de considerar que ese medio concentra gran parte de su programación en la ciudad de Barranquilla.

Como es sabido por todos, la señal de Telecaribe cubre a los departamentos de Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena y Sucre, por ello lo mínimo que se espera es que este canal sea el espejo en el cual se vea reflejada toda la región Caribe, con sus costumbres, tradiciones y esa amplia gama de valores culturales que distinguen a esta parte del país, con su potencial económico, industrial, turístico, energético y su gran vocación agropecuaria, entre otros sectores de similar importancia.

Con la llegada de Ismael Fernández, desde EL PILÓN auguramos que se avecina una buena época para Telecaribe, pero además con un nuevo oxígeno para el folclor vallenato, claro está, sin restarle importancia a las otras tendencias culturales del Caribe colombiano.

Esa nueva época también debe incluir entre sus prioridades espacios importantes para la academia, las artes, las letras y todo aquello que contribuya al fortalecimiento del conocimiento que soporta todo proceso de desarrollo y progreso de una región. A eso debe apuntarle un medio de comunicación tan importante como Telecaribe. ¡Buen viento y buena mar para el nuevo gerente!

Editorial
24 mayo, 2023

Una nueva era para Telecaribe

Es de recordar que Telecaribe nació en Valledupar, fue la conversión regional y pública de un emprendimiento innovador llamado Televallenato


Con la elección unánime de las gobernaciones de la costa Caribe del villanuevero Ismael Fernández, un hombre de la radio, la prensa y las comunicaciones regionales, vuelve la dirección de Telecaribe a la amplia provincia vallenata y de Padilla.

Es de recordar que Telecaribe nació en Valledupar, fue la conversión regional y pública de un emprendimiento innovador llamado Televallenato, fundado por el vallenato, de ancestros también de Villanueva, José Jorge Dangond.

Dangond, como lo ha manifestado en entrevistas, se aburrió de ver tanta televisión venezolana desde adolescente, tantas novelas o culebrones, como los llaman allá en Venezuela y lo sorprendía la escasa capacidad y cobertura de la televisión colombiana.

El municipio de Villanueva ha contado con el privilegio de tener hijos suyos al frente de tan importante cargo, recordemos que allí también estuvo gerenciando el distinguido compositor vallenato Iván Ovalle Poveda.

En cuanto a la nueva era que inicia ahora el canal Telecaribe con la gerencia de Fernández, a quien le deseamos éxito, como colegas, es importante que reafirme el compromiso del primer canal, el nuestro, con todas las regiones olvidadas de la región, en especial las más abandonadas, representando sus historias, sus usos, tradiciones y su cultura; sus ambiciones de progreso – es un empresario de las comunicaciones – y su desarrollo en todos los ámbitos y dimensiones sociales y humanas.

Por supuesto, el vallenato tendrá su gran atención pues a él no solo le gusta, sino que lo estudia y analiza en programas de radio y hace tal nivel de aportes que, en el pasado Festival Vallenato, Sayco se lo reconoció en formal ceremonia.

Fundamental que Telecaribe ratifique su condición de ser un canal de televisión abierta, con gran sentido de inclusión regional, sin distingo alguno y así acabar de una buena vez con ese concepto que aún persiste en algunos críticos, en el sentido de considerar que ese medio concentra gran parte de su programación en la ciudad de Barranquilla.

Como es sabido por todos, la señal de Telecaribe cubre a los departamentos de Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena y Sucre, por ello lo mínimo que se espera es que este canal sea el espejo en el cual se vea reflejada toda la región Caribe, con sus costumbres, tradiciones y esa amplia gama de valores culturales que distinguen a esta parte del país, con su potencial económico, industrial, turístico, energético y su gran vocación agropecuaria, entre otros sectores de similar importancia.

Con la llegada de Ismael Fernández, desde EL PILÓN auguramos que se avecina una buena época para Telecaribe, pero además con un nuevo oxígeno para el folclor vallenato, claro está, sin restarle importancia a las otras tendencias culturales del Caribe colombiano.

Esa nueva época también debe incluir entre sus prioridades espacios importantes para la academia, las artes, las letras y todo aquello que contribuya al fortalecimiento del conocimiento que soporta todo proceso de desarrollo y progreso de una región. A eso debe apuntarle un medio de comunicación tan importante como Telecaribe. ¡Buen viento y buena mar para el nuevo gerente!