La placa faltante en la carrera 22 con calle 7C, barrio La Esperanza, no solo ha ocasionado inconformismo entre los habitantes de ese sector, además trancones y múltiples accidentes, situación que se han convertido en el diario vivir.

De igual forma, esta situación afecta a los pequeños que permanecen en las instituciones aledañas, donde sus padres temen por cualquier eventualidad que les pueda pasar, así lo dieron a conocer moradores de ese sector al noroccidente de la ciudad.

Astrid Mejía, residente del barrio, dijo que si bien agradecen por la construcción que se realizó en la carrera 22, están angustiados por la placa que levantó la máquina en la puerta de su casa, justo cuando hacían éste trabajo al costado de la vía. “Nos dirigimos a donde el alcalde para que nos arreglaran esto, quien nos envió a el secretario de Obras, Jair González Vigna, quien dio la orden para arreglarlo, esto fue hace tres meses y ha hecho caso omiso”, cuando llueve es una laguna, se han caído niños, tenemos cerca instituciones y guarderías lo que puede causar enfermedades a los pequeños.

“Hacemos un llamado urgente al gobierno municipal, a autoridades competentes, Secretaria de Salud, este no es un problema solo de vía, no queremos que alguien termine con alguna enfermedad por las aguas que se estancan en esta calle cuando llueve”, añadió Mejía, quien a su vez indicó que quienes realizaban el trabajo pretendían que recogieran dos bultos de cementos por casas, además la gravilla y mano de obra.

Po su parte el secretario de Obras Públicas Municipal, Jair González Vigna, dijo que el inconveniente en la carrera 22 con calle 7C se presentó porque el pavimento estaba deteriorado, además hizo énfasis en que los moradores del barrio La Esperanza demolieron esa parte para que les fuera construida; “próximamente cuando iniciemos un proceso de reparcheo le arreglaremos eso, pero están presionando para arreglar algo que no estaba incluido en el programa Transformando Mi Barrio 1”, pues el programa no es de reparcheo es de pavimentos nuevos, añadió.

Indicó además, que están obligando a la administración a reestablecer algo que no les compete, aunque enviará un equipo que tome las medidas pertinentes “pero no vamos a pavimentar en estos momentos porque no está en ningún plan de trabajo, los vecinos aducen que nosotros dañamos eso, pero es un pavimento que estaba deteriorado, tenía muchos años hechos por autogestión, puntualizó González Vigna.

A su vez Marcelo Rueda, residente del barrio, señaló que la problemática va mas allá, puesto que en el programa realizado por la Alcaldía “nos correspondía un porcentaje sobre los andenes y nos presionarán a tal punto, que la obra tenía que quedar 100% sino el predio quedaba con una mora ante la administración municipal, que no podían terminarla sino se cancelaba todo”, todos los vecinos pagaron, “pero la máquina que hizo el trabajo rompió la loza que estaba bien en la calle 7, eso perjudica toda la labor y esfuerzo de autogestión que se hizo para el pavimento, porque se filtra el agua y daña lo realizado”.

Por Letty Polo Thomas
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