Virgelina Flórez, una comerciante informal que lleva 15 años trabajando a las afueras del Hospital Rosario Pumarejo de López, ha sido testigo del deterioro que día a día sufre el parque del sector,  el Santa Lucía. 

Pese a lo religioso que parece su nombre, esta mujer aseguró que no es devota de ningún santo, pero paradójicamente admite que solo un ‘milagro’, podría salvar a este parque. 

“Nosotros somos lo que le trabajamos, hacemos arreglitos, pero las autoridades deben restaurarlo, porque antes era muy bonito y ahora  lo tienen muy abandonado, solo lo salva un milagrito”, contó.  

Virgelina recordó que las quejas por falta de alumbrado público y amoblamiento urbano han sido muchas y nulas las respuestas. 

“Cuando empecé a trabajar aquí, este parque era muy bacano, pero de un tiempo para acá se fue deteriorando hasta como está hoy, parece un basurero, en las noches oscuro y lleno de drogadictos”, dijo mientras observaba la placa rodeada de escombros, que está en el centro del parque, que dice: “PARQU   AN A LUCIA”.

Aunque está ubicado en calle 16 entre carreras 17A y 18, una de las zonas más transitadas de la capital del Cesar, Virgelina aseguró que este lugar parece no tener dolientes y que el abandono ha sido total por parte de los mandatarios de turno. 

Sin embargo, es optimista y aunque un poco incrédula sigue esperando el ‘milagrito’. 

Puntos de vista

Virgelina Flórez. Comerciante del sector. “Esperamos que el alcalde se ponga la mano en el pecho, que por lo menos los arbolitos los poden”. 

Armando Rapalino. Comerciante del sector. “Los muros los han tumbado y durante las noches esto se llena de homosexuales y drogadictos”.

Por Martín Elías Mendoza