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Leer es nuestro cuento - 5 agosto, 2019

Tres vestidos mágicos para una princesa valeiente

Esta historia comienza en el reino de Kingdom donde nace una hermosa princesa llamada Lìa. Prontamente creció y con ella un hermoso sueño de vivir una aventura.

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Daniela Johana del Valle Castro

Esta historia comienza en el reino de Kingdom donde nace una hermosa princesa llamada Lìa. Prontamente creció y con ella un hermoso sueño de vivir una aventura.

Una noche, Lìa sale del reino en busca de su aventura, pero lo que no se imagina es que en esta va a encontrar el amor de su vida.

Cuando sale del reino se dirige al bosque en donde nadie la encuentre y pueda vivir su sueño. Ya en el bosque, mira una estrecha casita de madera incendiándose y una voz chillona gritando ¡auxilio! ¡Auxilio!

Ella corrió a ver que era y se llevó la sorpresa de que era un hada. A Lìa no le importó que la casa se estuviera incendiando y entró a la estrecha casa y salvó a la indefensa hada.

Pronto ya el temor había pasado. El hada le regaló tres vestidos.

-¡wao! Dijo Lìa, que hermosos son

-Son para ti. Dijo el hada muy agradecida.

-Gracias. Dijo Lìa.

Lìa siguió su camino y se probó el vestido rojo y este le permitió correr lo más rápido posible. Lìa encantada decidió averiguar que poder tenían los demás. Se probó el blanco y con este pudo volar y el rosado le dio fuerza y así continuó feliz.

Por la noche, mientras Lìa dormía, y escuchó gritos ¡ayúdenme! ¡Necesito ayuda, un ogro me persigue!

Lìa se levantó y sintió los gritos, y efectivamente era un príncipe a punto de ser devorado por un ogro. Lìa inmediatamente se puso el vestido color rosa (le daba la súper fuerza) y le dio una patada en el trasero, quien de inmediato soltó al príncipe y salió volando hasta caer en un charco de lodo y el ogro se fue corriendo. Por otro lado, el príncipe estaba cayendo y Lìa rápidamente se puso el vestido blanco (que le permitía volar), voló y atrapó al príncipe.

Cuando lo tuvo en sus brazos, tuvo amor a primera vista y èl muy sorprendido por lo que le sucedió, le pasaba igual. Ellos bajaron y regresaron a sus castillos, se casaron y como el príncipe también era aventurero, vivieron muchas aventuras y fueron felices por siempre.

Por: Daniela Johana del Valled Castro – I.E. Eduardo Súarez Orcasita

Leer es nuestro cuento
5 agosto, 2019

Tres vestidos mágicos para una princesa valeiente

Esta historia comienza en el reino de Kingdom donde nace una hermosa princesa llamada Lìa. Prontamente creció y con ella un hermoso sueño de vivir una aventura.


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Daniela Johana del Valle Castro

Esta historia comienza en el reino de Kingdom donde nace una hermosa princesa llamada Lìa. Prontamente creció y con ella un hermoso sueño de vivir una aventura.

Una noche, Lìa sale del reino en busca de su aventura, pero lo que no se imagina es que en esta va a encontrar el amor de su vida.

Cuando sale del reino se dirige al bosque en donde nadie la encuentre y pueda vivir su sueño. Ya en el bosque, mira una estrecha casita de madera incendiándose y una voz chillona gritando ¡auxilio! ¡Auxilio!

Ella corrió a ver que era y se llevó la sorpresa de que era un hada. A Lìa no le importó que la casa se estuviera incendiando y entró a la estrecha casa y salvó a la indefensa hada.

Pronto ya el temor había pasado. El hada le regaló tres vestidos.

-¡wao! Dijo Lìa, que hermosos son

-Son para ti. Dijo el hada muy agradecida.

-Gracias. Dijo Lìa.

Lìa siguió su camino y se probó el vestido rojo y este le permitió correr lo más rápido posible. Lìa encantada decidió averiguar que poder tenían los demás. Se probó el blanco y con este pudo volar y el rosado le dio fuerza y así continuó feliz.

Por la noche, mientras Lìa dormía, y escuchó gritos ¡ayúdenme! ¡Necesito ayuda, un ogro me persigue!

Lìa se levantó y sintió los gritos, y efectivamente era un príncipe a punto de ser devorado por un ogro. Lìa inmediatamente se puso el vestido color rosa (le daba la súper fuerza) y le dio una patada en el trasero, quien de inmediato soltó al príncipe y salió volando hasta caer en un charco de lodo y el ogro se fue corriendo. Por otro lado, el príncipe estaba cayendo y Lìa rápidamente se puso el vestido blanco (que le permitía volar), voló y atrapó al príncipe.

Cuando lo tuvo en sus brazos, tuvo amor a primera vista y èl muy sorprendido por lo que le sucedió, le pasaba igual. Ellos bajaron y regresaron a sus castillos, se casaron y como el príncipe también era aventurero, vivieron muchas aventuras y fueron felices por siempre.

Por: Daniela Johana del Valled Castro – I.E. Eduardo Súarez Orcasita