El inmenso barco que naufragó en abril de 1912 está a 4.000 metros en el fondo del océano Atlántico.
Asimismo, recordó la incomodidad y la pérdida rápida de la comunicación. Los ocupantes deben ir acostados o sentados, no obstante, el submarino es solo una cápsula en la que no hay sillas.
“Ahora creemos que nuestro CEO Stockton Rush, Shahzada Dawood y su hijo Suleman Dawood, Hamish Harding y Paul-Henri Nargeolet, se han perdido tristemente”, señaló la compañía.
Las imágenes fueron captadas por un grupo de exploradores marinos a 370 millas al sur de Terranova, Canadá.