La prioridad de López y sus amigos era hacer de Valledupar una ciudad igual o superior a Santa Marta. Tal idea competitiva con la antigua capital les impulsó a crear, incluso, un certamen festivo.
Con el fin de dar a conocer la difícil situación de los defensores de derechos humanos en la región, en Valledupar se llevó a cabo una reunión entre los embajadores de Alemania y Países Bajos con organizaciones defensoras de derechos humanos y la Mesa de Derechos Humanos y Territorios del Cesar.