Yo no sé si aquí en nuestra ciudad hay alguna oficina de Control de Precio y si lo hay parece que no estuviera funcionando. Creo que es urgente una acción orientada a neutralizar la desbocada explotación de los especuladores en todos los sentidos. No solo se especula con los artículos de primera necesidad, especialmente con los comprendidos en la canasta familiar, sino también en los parqueaderos que no tienen una tarifa fija.
Pasaron 17 meses para que se consolidara, en parte, una de las promesas de campaña del alcalde Fredys Socarrás Reales: acabar con las concesiones que tenían en saldo rojo las finanzas del municipio.