Los urumiteros son jodidos, para ellos todo lo que en su pueblo se hace es lo mejor
Mientras para unos los dulces son un manjar, un postre para bajar la sal del almuerzo o un deleite irresistible, para Mary Luz Fonseca representan un ‘dulce negocio’ que no solo le ha permitido sacar a sus cuatro hijos adelante, sino que gracias a ellos, hoy tiene casa propia.