De acuerdo a Corpocesar la situación se presenta por la sedimentación del río de tantos años sumado a que nunca se le ha hecho un dragado.
La comunidad de este barrio ubicado en el suroccidente de Valledupar asegura que el espejo de agua recibe aguas residuales por causa de la obra. El SIVA se comprometió a analizar el impacto de las aguas contaminadas que cayeron al humedal.
Según la comunidad, el rebosamiento de varios manjoles estaría ocasionado la afectación a la pequeña reserva natural.