En el homicidio de Guzmán se ha dicho que no fueron condenados los verdaderos responsables del crimen. El caso, como el de muchos otros periodistas de pequeños y medianos medios de comunicación, permanece en la impunidad.
A mediados de 1999, circulaba la versión de que iban a matar a otro periodista en Valledupar. Jaime José Daza (J.J.), quien se desempeñaba como editor judicial del diario EL PILÓN para la época de los hechos. Renunció al periódico porque dice que conocía que iban a matar a un periodista.
El antiguo jefe paramilitar, en una versión libre llevada a cabo el pasado primero de febrero, sorpresivamente aceptó su responsabilidad en la muerte del exjefe de redacción de este diario.