Para Bolívar su actuación en Leandro Díaz es un regalo divino. “Dios me regaló a través de ‘Chico’ Bolaño cumplir un sueño que tuve en la vida real".
Bolaño fue un músico andariego que nunca dejó de caminar guiado por una incontenible necesidad espiritual de compartir sus saberes y virtudes musicales, sembrando y diseminando sin detenerse, como la misión que recibió de ese folclor que lo consagró y lo ubicó en uno de los sitios más privilegiados de nuestra historia musical.