La ‘obra’ lleva por nombre ‘Mi primer amor’ y hace referencia a la cultura costeña de los hombres de sostener relaciones sexuales con las burras.
De acuerdo con las historias populares tener relaciones sexuales con una burra aumenta la virilidad, es necesario para que los jóvenes demuestren su “hombría” y que este acto solo lo realizan los costeños, son algunas de las creencias sobre este animal de herradura que ha disminuido en más del 50 % en el Cesar, Magdalena, La Guajira y es víctima de esta práctica en diversas zonas rurales del país.