Mientras aumentan los estragos de la sequía en el Cesar y La Guajira, las autoridades regionales y gremios de la producción agrícola esperan apoyo del Gobierno Nacional.
El principal objetivo de los productores del sector agropecuario de Cesar y La Guajira es lograr que el presidente Juan Manuel Santos decrete la emergencia económica, social y ecológica para esta región del país, y así poder sobrellevar el Fenómeno de El Niño que se avecina.
Así lo dio a conocer el presidente del Comité de Arroceros de estos dos departamentos, Joaquín Tomás Ovalle, quien representa a un vasto sector de los cultivadores de cereales, los más afectados al perder un 40% de sus cosechas por la actual escasez de agua.
En municipios del sur de Cesar como Rio de Oro y Aguachica, ya empezó a faltar el agua para consumo humano, por lo que las autoridades locales están adoptando medidas.
“El compromiso de los secretarios de agricultura es que se van a reunir con los respectivos gobernadores para que ellos soliciten cita al presidente de la república, con el fin de solicitarle la emergencia económica, social y ecológica para esta zona de Colombia”, dijo el líder gremial.
Agregó que los encuentros entre representantes del sector agropecuario seguirán hoy a las 10:00 de la mañana, en las instalaciones de Fedearroz, para formular propuestas que posteriormente serán presentadas al Gobierno Nacional.
“Primero hay que darle un tratamiento a los créditos de los productores que están vencidos o están por vencerse. Ese tratamiento debe ser especial porque las cosechas se han perdido y la producción de leche ha bajado y el ganado se está muriendo.
En segunda medida, se requieren créditos rápidos y agiles para que los productores puedan construir pozos profundos, reservorios de agua y pueden comprar o hacer comida para el ganado”, así resumió los primeros acuerdos de las propuestas.
Primeras medidas
El secretario de agricultura del Cesar, Wilson Solano, recordó que desde hace dos meses viene trabajando con la Secretaria de Ambiente y la Oficina de Gestión del Riesgo las estrategias para mitigar la sequía.
“En la parte de ganadería tenemos casi listo un proyecto para la compra de alimentos, para que a los productores les salga más barata toda la parte de alimentación de sus animales”, anunció.
Sin embargo, advirtió que las medidas que se tomen a nivel local para afrontar el Fenómeno de El Niño, serán pañitos de agua tibia mientras no haya respaldo contundente del Ministerio de Agricultura.
“Radiqué un documento ante el Ministerio de Agricultura donde precisamente le justificó la situación que estamos viviendo y le pregunto qué planes de contingencia tienen para esta crisis.
Estamos a la espera de esa respuesta”, explicó Solano.
Por último manifestó su preocupación porque el Cesar afrontaría verano de un año.
“Tenemos una época seca que arrancó desde diciembre, pasó por enero, febrero, marzo, abril y supuestamente mayo-junio son nuestra época de lluvia normal; pero fueron muy pocas precipitaciones. Si el Fenómeno del El Niño se presenta como lo presenta el Ideam tenemos un verano que va a ir hasta diciembre y se nos junta con nuestra época tradicional de verano que es de enero a abril”, explicó el funcionario.
Sin agua para la gente
En municipios del sur de Cesar como Rio de Oro y Aguachica, ya empezó a faltar el agua para consumo humano, por lo que las autoridades locales están adoptando medidas para garantizar que se dé prioridad en el suministro del preciado líquido a las comunidades sedientas antes que a las actividades industriales y agropecuarias.
Una de las principales denuncias se presenta en el municipio de San Alberto, donde la comunidad interpuso varias quejas y peticiones que reposaban en la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar.
Las quejas están relacionadas con la extracción de material de arrastre en el lecho río San Alberto Espíritu Santo.
El director de la corporación, Kaleb Villalobos explicó se hizo la suspensión inmediata de las actividades de extracción mecanizada de materiales de arrastre para proteger al cuerpo hídrico de las diferentes afectaciones al medio ambiente y a la comunidad de la zona.
Para los próximos días la Gobernación citará a los 25 alcaldes del departamento para socializar los planes de contingencia que deben aplicar.
La crisis de Badillo
El corregimiento de Badillo, al norte de Valledupar, es uno de los principales productores del arroz del departamento. Allí la situación es crítica porque no hay como regar los cultivos y la poca de agua del río que lleva el mismo nombre del pueblo, tiene que ser distribuida por turnos a los 45 arroceros de la zona.
“El río está seco, aquí nos estamos turnando. Ahora mismo Campo Alegre que es una zona grande, tiene el agua y estamos esperando que se le cumpla el turno de cuatro días, para que nuevamente la zona de aquí vuelva a tener un poquito de agua”, contó Pedro Pablo Rodríguez, habitante de Badillo.
Atilio Rodríguez, invirtió cuatro millones de pesos en dos hectáreas de arroz y a la mitad del tiempo de cosecha reconoce que la inversión está perdida.
“Este verano nos está acosando entonces nos toca recurrir a nuestro patrono San Antonio de Badillo. Tuvimos una misa el miércoles con todos los arroceros y lo sacamos a un cultivo, en la vía al mediodía a ver sin con la ayuda de él confiere ante Dios que nos mande el agua”, expresó el campesino.
Otro de los arroceros y ganadero de la zona es José Zequeda, quien manifestó a EL PILÓN que algunas reses están muriendo dejando millonarias pérdidas. “Se está vendiendo el ganado a carrera para no dejarlo desmejorar tanto y poderle sacarle algo de dinero. Vacas paridas de 2 millones y medio se están vendiendo en un millón o en 800 mil pesos”.
Los pequeños y grandes productores agropecuarios de esta zona piden al Gobierno Nacional los ayude a afrontar la escasez de agua.
“En la parte de ganadería tenemos casi listo un proyecto para la compra de alimentos, para que a los productores les salga más barata toda la parte de alimentación de sus animales”: Wilson Solano, secretario de agricultura.
Por Martín Elías Mendoza
[email protected]
Mientras aumentan los estragos de la sequía en el Cesar y La Guajira, las autoridades regionales y gremios de la producción agrícola esperan apoyo del Gobierno Nacional.
El principal objetivo de los productores del sector agropecuario de Cesar y La Guajira es lograr que el presidente Juan Manuel Santos decrete la emergencia económica, social y ecológica para esta región del país, y así poder sobrellevar el Fenómeno de El Niño que se avecina.
Así lo dio a conocer el presidente del Comité de Arroceros de estos dos departamentos, Joaquín Tomás Ovalle, quien representa a un vasto sector de los cultivadores de cereales, los más afectados al perder un 40% de sus cosechas por la actual escasez de agua.
En municipios del sur de Cesar como Rio de Oro y Aguachica, ya empezó a faltar el agua para consumo humano, por lo que las autoridades locales están adoptando medidas.
“El compromiso de los secretarios de agricultura es que se van a reunir con los respectivos gobernadores para que ellos soliciten cita al presidente de la república, con el fin de solicitarle la emergencia económica, social y ecológica para esta zona de Colombia”, dijo el líder gremial.
Agregó que los encuentros entre representantes del sector agropecuario seguirán hoy a las 10:00 de la mañana, en las instalaciones de Fedearroz, para formular propuestas que posteriormente serán presentadas al Gobierno Nacional.
“Primero hay que darle un tratamiento a los créditos de los productores que están vencidos o están por vencerse. Ese tratamiento debe ser especial porque las cosechas se han perdido y la producción de leche ha bajado y el ganado se está muriendo.
En segunda medida, se requieren créditos rápidos y agiles para que los productores puedan construir pozos profundos, reservorios de agua y pueden comprar o hacer comida para el ganado”, así resumió los primeros acuerdos de las propuestas.
Primeras medidas
El secretario de agricultura del Cesar, Wilson Solano, recordó que desde hace dos meses viene trabajando con la Secretaria de Ambiente y la Oficina de Gestión del Riesgo las estrategias para mitigar la sequía.
“En la parte de ganadería tenemos casi listo un proyecto para la compra de alimentos, para que a los productores les salga más barata toda la parte de alimentación de sus animales”, anunció.
Sin embargo, advirtió que las medidas que se tomen a nivel local para afrontar el Fenómeno de El Niño, serán pañitos de agua tibia mientras no haya respaldo contundente del Ministerio de Agricultura.
“Radiqué un documento ante el Ministerio de Agricultura donde precisamente le justificó la situación que estamos viviendo y le pregunto qué planes de contingencia tienen para esta crisis.
Estamos a la espera de esa respuesta”, explicó Solano.
Por último manifestó su preocupación porque el Cesar afrontaría verano de un año.
“Tenemos una época seca que arrancó desde diciembre, pasó por enero, febrero, marzo, abril y supuestamente mayo-junio son nuestra época de lluvia normal; pero fueron muy pocas precipitaciones. Si el Fenómeno del El Niño se presenta como lo presenta el Ideam tenemos un verano que va a ir hasta diciembre y se nos junta con nuestra época tradicional de verano que es de enero a abril”, explicó el funcionario.
Sin agua para la gente
En municipios del sur de Cesar como Rio de Oro y Aguachica, ya empezó a faltar el agua para consumo humano, por lo que las autoridades locales están adoptando medidas para garantizar que se dé prioridad en el suministro del preciado líquido a las comunidades sedientas antes que a las actividades industriales y agropecuarias.
Una de las principales denuncias se presenta en el municipio de San Alberto, donde la comunidad interpuso varias quejas y peticiones que reposaban en la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar.
Las quejas están relacionadas con la extracción de material de arrastre en el lecho río San Alberto Espíritu Santo.
El director de la corporación, Kaleb Villalobos explicó se hizo la suspensión inmediata de las actividades de extracción mecanizada de materiales de arrastre para proteger al cuerpo hídrico de las diferentes afectaciones al medio ambiente y a la comunidad de la zona.
Para los próximos días la Gobernación citará a los 25 alcaldes del departamento para socializar los planes de contingencia que deben aplicar.
La crisis de Badillo
El corregimiento de Badillo, al norte de Valledupar, es uno de los principales productores del arroz del departamento. Allí la situación es crítica porque no hay como regar los cultivos y la poca de agua del río que lleva el mismo nombre del pueblo, tiene que ser distribuida por turnos a los 45 arroceros de la zona.
“El río está seco, aquí nos estamos turnando. Ahora mismo Campo Alegre que es una zona grande, tiene el agua y estamos esperando que se le cumpla el turno de cuatro días, para que nuevamente la zona de aquí vuelva a tener un poquito de agua”, contó Pedro Pablo Rodríguez, habitante de Badillo.
Atilio Rodríguez, invirtió cuatro millones de pesos en dos hectáreas de arroz y a la mitad del tiempo de cosecha reconoce que la inversión está perdida.
“Este verano nos está acosando entonces nos toca recurrir a nuestro patrono San Antonio de Badillo. Tuvimos una misa el miércoles con todos los arroceros y lo sacamos a un cultivo, en la vía al mediodía a ver sin con la ayuda de él confiere ante Dios que nos mande el agua”, expresó el campesino.
Otro de los arroceros y ganadero de la zona es José Zequeda, quien manifestó a EL PILÓN que algunas reses están muriendo dejando millonarias pérdidas. “Se está vendiendo el ganado a carrera para no dejarlo desmejorar tanto y poderle sacarle algo de dinero. Vacas paridas de 2 millones y medio se están vendiendo en un millón o en 800 mil pesos”.
Los pequeños y grandes productores agropecuarios de esta zona piden al Gobierno Nacional los ayude a afrontar la escasez de agua.
“En la parte de ganadería tenemos casi listo un proyecto para la compra de alimentos, para que a los productores les salga más barata toda la parte de alimentación de sus animales”: Wilson Solano, secretario de agricultura.
Por Martín Elías Mendoza
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