Así como sucediera en el pasado mes de febrero con unas de estas especies en el barrio Nuevo Amanecer, ahora la situación la vive la comunidad de este sector que se encuentra en el suroccidente de Valledupar.
Alarmados por el daño que se hizo a tres árboles de una de las áreas de cesión del barrio Tobías Daza se encuentran los habitantes de dicha comunidad quienes denunciaron ayer que alguien de la comunidad atentó contra estas especies lo que causó que se secaran.
“Están parados, pero los mataron, están secos”, aseguró Adalberto Vega, presidente de la Junta de Acción Comunal, quien reconoció que no se sabe desde cuándo se venía presentando esta situación puesto que en su caso estaba incapacitado y no se había percatado del hecho.
El daño ambiental se llevó a cabo en una de las áreas de cesión de esta urbanización, ubicado en el suroccidente de Valledupar, más exactamente en la cancha deportiva que está en la etapa uno con manzana seis frente a las casas 17, 18, 19 y 20 de dicha urbanización.
Otro agravante de este caso es que los vecinos, a pesar de tener algunos indicios de quién sería la persona que produjo esta afectación, han preferido guardar discreción al respecto por temor a represalias.
“Vamos a replantear a ver con Planeación Municipal que van a hacer un estudio a ver qué clase de veneno echaron porque ya no hay tiempo de salvarlos, ya están secos”, aseguró este líder.
Esto también ha afectado la organización del campeonato que tienen previsto desarrollar en esta urbanización y para lo cual contaban con este escenario a fin de realizar algunos de los partidos.
Sobre esta situación ya tiene conocimiento la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, que tenía previsto realizar una visita de inspección al sitio en la tarde de ayer.
De la misma manera, como indicó el presidente de la Junta de Acción Comunal de este sector que colinda con el barrio Populandia, la Oficina de Planeación del municipio ya tiene conocimiento del hecho y programó igualmente una visita que debe llevarse a cabo hoy.
“Nos informaron ese tema y ordenamos una visita técnica que se va a realizar el día de mañana (hoy)”, anunció Robert Martínez Murgas, jefe de dicha sectorial.
Sin embargo, precisó el funcionario, esta oficina no tiene ninguna competencia de tipo sancionatorio que les permita interponer medidas al respecto en el caso de que encuentren alguna clase de anomalía o actuación que haya puesto en riesgo los árboles.
“Lo único que hacemos es que con el informe técnico remitimos a Corpocesar y la Policía Ambiental para que estas realicen o inicien los procesos sancionatorios necesarios”, argumentó Martínez Murgas.
Por último enfatizó en que al tener conocimiento de este hecho dispusieron del equipo agroambiental para que efectivamente se dirijan hoy al sitio y efectúen la evaluación técnica que luego será remitida a las entidades anteriormente mencionadas.
Sin duda esto causa, junto con el daño ambiental, una gran preocupación entre la comunidad que siempre se ha mantenido en una fuerte lucha por conservar sus áreas de cesión que todavía no cuentan con una adecuación ideal para el esparcimiento de todos los moradores de la zona.
Por: Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
[email protected]
Así como sucediera en el pasado mes de febrero con unas de estas especies en el barrio Nuevo Amanecer, ahora la situación la vive la comunidad de este sector que se encuentra en el suroccidente de Valledupar.
Alarmados por el daño que se hizo a tres árboles de una de las áreas de cesión del barrio Tobías Daza se encuentran los habitantes de dicha comunidad quienes denunciaron ayer que alguien de la comunidad atentó contra estas especies lo que causó que se secaran.
“Están parados, pero los mataron, están secos”, aseguró Adalberto Vega, presidente de la Junta de Acción Comunal, quien reconoció que no se sabe desde cuándo se venía presentando esta situación puesto que en su caso estaba incapacitado y no se había percatado del hecho.
El daño ambiental se llevó a cabo en una de las áreas de cesión de esta urbanización, ubicado en el suroccidente de Valledupar, más exactamente en la cancha deportiva que está en la etapa uno con manzana seis frente a las casas 17, 18, 19 y 20 de dicha urbanización.
Otro agravante de este caso es que los vecinos, a pesar de tener algunos indicios de quién sería la persona que produjo esta afectación, han preferido guardar discreción al respecto por temor a represalias.
“Vamos a replantear a ver con Planeación Municipal que van a hacer un estudio a ver qué clase de veneno echaron porque ya no hay tiempo de salvarlos, ya están secos”, aseguró este líder.
Esto también ha afectado la organización del campeonato que tienen previsto desarrollar en esta urbanización y para lo cual contaban con este escenario a fin de realizar algunos de los partidos.
Sobre esta situación ya tiene conocimiento la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, que tenía previsto realizar una visita de inspección al sitio en la tarde de ayer.
De la misma manera, como indicó el presidente de la Junta de Acción Comunal de este sector que colinda con el barrio Populandia, la Oficina de Planeación del municipio ya tiene conocimiento del hecho y programó igualmente una visita que debe llevarse a cabo hoy.
“Nos informaron ese tema y ordenamos una visita técnica que se va a realizar el día de mañana (hoy)”, anunció Robert Martínez Murgas, jefe de dicha sectorial.
Sin embargo, precisó el funcionario, esta oficina no tiene ninguna competencia de tipo sancionatorio que les permita interponer medidas al respecto en el caso de que encuentren alguna clase de anomalía o actuación que haya puesto en riesgo los árboles.
“Lo único que hacemos es que con el informe técnico remitimos a Corpocesar y la Policía Ambiental para que estas realicen o inicien los procesos sancionatorios necesarios”, argumentó Martínez Murgas.
Por último enfatizó en que al tener conocimiento de este hecho dispusieron del equipo agroambiental para que efectivamente se dirijan hoy al sitio y efectúen la evaluación técnica que luego será remitida a las entidades anteriormente mencionadas.
Sin duda esto causa, junto con el daño ambiental, una gran preocupación entre la comunidad que siempre se ha mantenido en una fuerte lucha por conservar sus áreas de cesión que todavía no cuentan con una adecuación ideal para el esparcimiento de todos los moradores de la zona.
Por: Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
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