La Casa en el Aire ha sido un proyecto que desde el inicio ha sufrido todo tipo de críticas por su diseño, inversión y tardanza en su construcción, esta última aumentó considerablemente el presupuesto que se había planteado al principio. Según se conoció, se le adicionó, muy tempranamente, el 45.28 % del valor de la obra. 

La estructura debió ser entregada en un tiempo de 11 meses; sin embargo, han pasado dos años y aún no se sabe la fecha exacta de su finalización. El contratista Jorge Mario Peña manifestó que ha habido contratiempos, aclarando que esos problemas han sido ajenos a sus labores puesto que las modificaciones que les sugirieron fueron entregadas, y que a la fecha, la obra se encuentra terminada al 100 % en su primera fase. Pese a esto, los expertos aseguran que ha sido el resultado de un mal diseño y una mala planificación. 

Ante el anuncio de esta primera fase la comunidad vallenata se pregunta en qué condiciones quedará la obra, su funcionamiento y, sobre todo, qué actividades podrán realizarse en ese estado. Al respecto, el secretario de Obras Públicas Municipal, Efraín Quintero Ternera, informó: “Este es un proyecto en el que realmente su funcionalidad va a depender muchísimo de la construcción de la segunda fase, ya que lo que tenemos hoy es un edificio que se compone de 4 niveles y algunos subniveles de la casa”. 

Ante los inconvenientes presentados con la primera fase del proyecto, surgen innumerables preguntas, entre esas las del concejal Luis Fernando Quintero, las cuales van enfocadas a qué población se va a beneficiar con la obra, si habrán oficinas de la administración municipal en esas instalaciones, y finalmente, cuál será el objetivo de La Casa en el Aire, todo esto por la preocupación de que no termine convertida en un ‘elefante blanco’ sin utilidad.

Lea también: Nueva prórroga: en junio se recibiría primera etapa de la ‘Casa en el aire’

Debido a estas incógnitas, Quintero Ternera indicó que dentro del Plan de Sostenibilidad está aunar todos los esfuerzos de la institucionalidad para que la etapa uno tenga alguna actividad.

SEGUNDA FASE

Según manifestó el secretario, en el debate de control político de este jueves 24 de junio, la segunda fase tendrá un costo alrededor de los 8 mil millones de pesos y estará comprendida por componentes como: almacenes, restaurantes, parqueaderos, un museo donde se expondrán todas las obras del maestro Rafael Escalona, y demás espacios.

Se ha hablado de la intención positiva del gobernador Luis Alberto Monsalvo de continuar la segunda fase, por consiguiente desde la Secretaría le enviaron un oficio para organizar una mesa de trabajo y mirar las opciones y disponibilidad, si aún la tiene, para continuar con la siguiente etapa. 

“En ese sentido, de ser positiva la respuesta habría que entregarle la primera fase al mandatario departamental, en caso contrario las dependencias institucionales de la administración municipal tenemos que darle funcionamiento realizando actividades propias de la Alcaldía que estamos realizando en estos momentos en muchos sectores y también entraríamos a hacerlos en el edificio de La Casa en el Aire para que esa obra no quede ahí sola, sino que nosotros podamos darle funcionalidad”, acotó Quintero.  

Añadió: “Pero decirles que va a quedar un museo o que vamos a hacer cierta actividad es decirles cosas que no son, porque tenemos pensado primero entregarlo a la Gobernación por si quiere invertir en la segunda fase”.

¿Y LOS PARQUEADEROS?

El concejal Jorge Luis Arzuaga manifestó que una de sus inquietudes hacia la megaobra es la  capacidad de parqueo vehicular que tendrá y los planes para no generar un caos en la movilidad, teniendo en cuenta que son dos carriles de pequeña amplitud. “El tema de los parqueaderos termina constituyéndose en algo fundamental porque va a permitir una mayor capacidad de visitantes a esa obra y también al mejoramiento de la movilidad, en la medida de que no se parqueen en el carril”, sostuvo. 

Le puede interesar: Un solo proponente para un proyecto de $138.817 millones, ¿por qué?

Frente a esto el secretario de Obras explicó que al revisar lo constatado en la primera fase notaron ese problema, por ende solicitaron  al contratista organizar un parqueadero provisional mientras se conseguían los recursos de la segunda fase, según concluyó, la petición fue elaborada. 

VENDEDORES AMBULANTES

Las demoras en su construcción, inversiones, parqueaderos y demás no son los únicos problemas que, aparentemente, notan los vallenatos y concejales del municipio puesto que al comparar la megaobra con la Plaza Alfonso López, el edil Arzuaga expresó su inquietud con los vendedores ambulantes, debido a que estas obras, generalmente, por ser un punto de bastante tráfico de turistas se vuelven encantadores para los vendedores y “terminan ellos apropiándose sin ningún orden de las obras publicas y afectando el embellecimiento y desestimulando las visitas de los turistas”. 

Por tanto, propone la construcción de unas estaciones para la comercialización de productos comestibles y así evitar que se tomen el frente de la obra, ocupando los carriles con sus estaciones móviles. Ante esto, el secretario de Obras manifestó que se está organizando un plan estratégico de la mano del secretario de Gobierno Luis Galvis.

POR: KETTY GUTIÉRREZ MAESTRE/EL PILÓN 

[email protected]