En junio de 2022, Carlos Fajardo fue nombrado gerente general de Klarens. Fajardo se define como un “cachaco nacionalizado en Valledupar” pues vivió durante 20 años en la capital del departamento del Cesar. EL PILÓN dialogó con el gerente sobre el estado financiero y operativo de Klarens y el futuro de la empresa.

¿Hace cuánto llegó a la empresa? 

En junio de 2022. 

¿Qué encontró?

Esta empresa estaba caída, no producía. Tenía a la gente sin pagarle salario y sin seguridad social. No comprabamos leche. El estado era bastante precario. 

Siete meses después, ¿cómo está la empresa?

Estamos produciendo y comprando 50.000 litros de leche al día. Los salarios y la seguridad social están al día, pero aún falta mucho. Estamos en Ley de Insolvencia, por eso no tenemos acceso  a los créditos que tienen otras empresas. Pero estamos avanzando, y estamos vendiendo algunos productos en casi todo el país.

¿Cómo llegó la empresa a la Ley de Insolvencia?

Simplemente porque no pudimos cumplir con nuestras obligaciones y pagarle a los acreedores. Se acabó el dinero y tocó pedirle ayuda al Gobierno. Lo que se hizo con la Ley de Insolvencia fue congelar temporalmente las deudas mientras se llega a un acuerdo con los acreedores.

¿Ya firmaron los acuerdos con los acreedores?

Estamos en ese proceso. En unos meses debemos firmarlos con la Superintendencia de Sociedades en acuerdo con los acreedores. 

La empresa está comprando alrededor de 50.000 litros de leche diarios… ¿Cuál sería el ideal? 

Esta empresa tiene una capacidad para producir 100.000 litros diarios de leche. Lo que más nos interesa es vender suero. Estamos haciendo todos los contactos para buscar canales alternativos para vender suero en todo el país. 

Actualmente tenemos un convenio con Almacenes Éxito. Nos ha ido súper bien. Para seguir creciendo debemos llegar a las tiendas de descuento. Estamos negociando con Ara y con D1. 

¿Qué productos venderían en esas tiendas? 

 Nosotros estamos enfocados en vender suero, quesillo, avena, yogurt y leche. Se desarrolló un suero que no ha sido posible que lo imiten. Tenemos consumidores fieles a nuestro producto. El reto es llevarlo a todo el país. Valledupar representa más del 40 % del mercado. 

Aún no hemos llegado  a ciudades pequeñas. Eso esperamos lograrlo con las tiendas de descuento, que están en todo el país. 

¿Con Olímpica hay negociaciones?

No todavía.

¿Cuál es el futuro de Klarens? 

Queremos ser una empresa reconocida en todo el país. A medida que vayamos creciendo, buscaremos ampliar la gama de productos. Actualmente, por las limitaciones de capital tenemos una gama pequeña.

¿Qué tan cerca está Klarens de lograr el punto de equilibrio? 

Estamos cerca, pero no podemos olvidar que la empresa tiene deudas. 

Quiero destacar que los accionistas han reconocido que la empresa puede mejorar y están haciendo aportes económicos que hace seis meses eran imposible. Porque si la empresa se iba acabar meter dinero era botarla. Ya recuperamos la confianza de los inversionistas. 

También tuvimos una respuesta impresionante de nuestros trabajadores, a pesar de que vivieron retrasos en el pago. Pero estamos al día y la empresa se ha ido recuperando. Fue impresionante la convicción de los trabajadores cuando la empresa estuvo en su peor momento. Fueron leales, el bastión para salvar esta empresa. 

¿Fue cierto que la empresa estuvo a punto de liquidarse? 

Estuvimos a un paso de liquidar Klarens.

¿Ahora qué tan cerca están de la liquidación?

Muy lejos. Ahora ya estamos más cerca de empezar a crecer. Pero no es algo de un día para otro. Es un proceso lento que involucra a todos. 

Si le preguntaran cómo se salvó Klarens de la liquidación, ¿qué respondería?

Empiezo desde los accionistas; también el equipo directivo, que se quedó en esta empresa a pesar de que tenían otras oportunidades; los trabajadores, que fueron resilientes; y por supuesto, los vallenatos, que quieren esta marca. 

¿Hubo inyección de recursos de los accionistas?

Sí claro. Sin la inyección de recursos era imposible. Cuando llegué no contábamos con más de $2 millones en la cuenta. 

¿Cómo califica la aceptación y el cariño de los vallenatos hacia la empresa?

Yo quedé asombrado con la respuesta que hubo. A raíz de la crisis salimos del mercado. Volvimos 6 meses después. Creíamos que habíamos perdido el mercado, sin embargo, el cariño que le tienen los vallenatos a la empresa es grande, y eso nos permitió sacar la nariz debajo del agua. Ahora ya estamos sacando la cabeza. 

¿Cuántos empleos genera Klarens? 

Directos, alrededor de 140. Indirectos, fácilmente hay más de 300 personas. 

¿A quién le compra Klarens la leche? 

A ganaderos de la región. 

¿Qué es hacer industria?

En esta región hacer industria es hacer patria. Estamos en una ciudad alejada de las grandes capitales. Sacar el producto de la ciudad tiene un costo, sobre todo cuando es un producto líquido. Pero también es gratificante cuando uno ve empleados motivados con aspiraciones de crecer. 

Como empresario, ¿qué le diría a los líderes políticos del departamento?

Que vendan a Valledupar como destino; que trabajen para traer empresas a Valledupar. La ciudad necesita industrias para comprar, pagar, y vender por fuera, para que llegue dinero a la ciudad. En la ciudad circula dinero, pero si vendemos fuera ingresa dinero externo. 

Por Deivis Caro
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