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Crónica - 2 marzo, 2022

Oñate, está en la historia

Los medios y la gran mayoría de la gente hablan de sus 40’ años de vida artística, pero son muchos más, pues ya en 1965 cantaba parrandas con ‘Emilianito’ Zuleta.

Jorge Oñate, dividió en dos la historia del canto vallenato.
Jorge Oñate, dividió en dos la historia del canto vallenato.
Boton Wpp

Considerando que la excelencia es un talento o cualidad extraordinariamente bueno y que va más allá de las normas comunes podemos comprender la elevada distinción que en su edición 2010 la Academia del Grammy Latino le otorgó a Jorge Oñate, ‘El ruiseñor del Cesar’ posicionándolo en el mismo nivel musical del maestro Escalona, este, como compositor de primera talla y Oñate como privilegiado cantante de voz portentosa.

Los medios y la gran mayoría de la gente hablan de sus 40’ años de vida artística, pero son muchos más, pues ya en 1965, un adolescente flacuchento y de aguileño perfil, belicoso y trompeador se fajaba a muñeca limpia con cualquier horda de cachacos que intentarán sabotear una de aquellas memorables parrandas donde Jorge cantaba acompañado por el acordeón de ‘Emilianito’ Zuleta, en su época de estudiante en el capitalino barrio Santafé, de Bogotá.

SUS PARTICULARIDADES 

Luis Eduardo Martínez Arroyo (Coyongal, Bolívar), un erudito en Oñatología, considera a Oñate un raro espécimen de nuestro folclor pues sin ancestros musicales en su haber, sus extraordinarias cualidades interpretativas merecen destacarse toda vez que no pertenecen a ninguna de las dinastías musicales que hegemonizaron el vallenato en el Magdalena, La Guajira y el Cesar.

El timbre afinado y dulzón, el dejo, su rara facilidad para modular la voz y su gracia para cantar lograron seducir rápidamente a la gente del Caribe y después de toda Colombia, en un interminable trasegar pueblo a pueblo, ciudad a ciudad, inicialmente en compañía del acordeón alegre de Miguel López, no obstante haberse dado a conocer con Emilio Oviedo  y posteriormente de los más destacados ejecutantes del fuelle que han brillado con luz propia.
Si bien es cierto que la figura del cantante vallenato tiene lejanos antecedentes que datan de 1948 no existe duda alguna que fue Jorge Oñate quien inauguró la más importante época del canto vallenato  y abrió la senda para que con aire triunfal desfilarán otros grandes vocalistas de ayer, hoy y con seguridad, de mañana.

Jorge Oñate con ‘Colacho’ Mendoza.


LOS PRIMEROS CANTANTES

El nombre de Luis Enrique Martínez surge en este punto ya que él, con la frescura de su acordeón, más de 60 años atrás, le brindó la alternativa de mostrarse como cantantes de vallenatos a Esteban Montaño, Armando Zabaleta, Remberto Brú, Alberto Fernández, Orlando Nola Maestre y Tobías Enrique Pumarejo.
Posteriormente, Robertico Román ‘Romancito’, con el acordeón del entonces adolescente Aníbal Velásquez, marcaron una época importantísima en el litoral Atlántico divulgando los aires vallenatos.
Un poco más adelante, Alberto Pacheco le permitió a los compositores Julio Herazo y Gustavo Rada lucirse cantando paseos y merengues de su inspiración y finalmente Ovidio Granados tuvo en su elenco playonero a cantautores destacados como Miguel Yanet, Rafael ‘Wicho’ Sánchez, Isaac Carrillo, Miguel Mora y Néstor Martínez.
Todos ellos tuvieron su estelar momento, pero fue Jorge Oñate con su canto de ‘Ruiseñor’ quien tuvo el mérito de consolidar la figura del cantante como un miembro más de la agrupación. Fue Oñate el elegido que abrió la trocha a los acordeoneros que no cantaban al alzarse junto a Miguel López con la corona del Festival Vallenato en 1972.  Al respecto ya en 1968 Ovidio Granados había fracasado en el intento, junto a su cantante Miguel Yanet.

Jorge Oñate con ‘Los hermanos López’

PROMOTOR DE REYES
Oñate es el único cantante que ha sido copartícipe en la obtención del título de Rey Vallenato del Festival, en 1972 con Miguel López y en 1992 con su hijo Alvarito.
Es el único de los intérpretes, surgido después de 1970, que ha grabado cuatro puyas; ‘La vieja Gabriela’, ‘Déjala vení’, ‘El Pájaro de mi abuelo’ y ‘Los Vi Corriendo’. De los 100 vallenatos escogidos por Samper Pizano y Pilar Tafur como los mejores de la historia, Oñate ya había grabado 25 con distintos conjuntos.

Nos llena de orgullo no sólo a los vallenatos sino a todos los colombianos tener un artista tan prominente como Jorge Oñate que sólo gratos recuerdos nos ha dejado en su larga, brillante y victoriosa carrera musical. Por eso y mucho más, está en la historia.

POR JULIO OÑATE MARTÍNEZ/ESPECIAL PARA EL PILÓN

Crónica
2 marzo, 2022

Oñate, está en la historia

Los medios y la gran mayoría de la gente hablan de sus 40’ años de vida artística, pero son muchos más, pues ya en 1965 cantaba parrandas con ‘Emilianito’ Zuleta.


Jorge Oñate, dividió en dos la historia del canto vallenato.
Jorge Oñate, dividió en dos la historia del canto vallenato.
Boton Wpp

Considerando que la excelencia es un talento o cualidad extraordinariamente bueno y que va más allá de las normas comunes podemos comprender la elevada distinción que en su edición 2010 la Academia del Grammy Latino le otorgó a Jorge Oñate, ‘El ruiseñor del Cesar’ posicionándolo en el mismo nivel musical del maestro Escalona, este, como compositor de primera talla y Oñate como privilegiado cantante de voz portentosa.

Los medios y la gran mayoría de la gente hablan de sus 40’ años de vida artística, pero son muchos más, pues ya en 1965, un adolescente flacuchento y de aguileño perfil, belicoso y trompeador se fajaba a muñeca limpia con cualquier horda de cachacos que intentarán sabotear una de aquellas memorables parrandas donde Jorge cantaba acompañado por el acordeón de ‘Emilianito’ Zuleta, en su época de estudiante en el capitalino barrio Santafé, de Bogotá.

SUS PARTICULARIDADES 

Luis Eduardo Martínez Arroyo (Coyongal, Bolívar), un erudito en Oñatología, considera a Oñate un raro espécimen de nuestro folclor pues sin ancestros musicales en su haber, sus extraordinarias cualidades interpretativas merecen destacarse toda vez que no pertenecen a ninguna de las dinastías musicales que hegemonizaron el vallenato en el Magdalena, La Guajira y el Cesar.

El timbre afinado y dulzón, el dejo, su rara facilidad para modular la voz y su gracia para cantar lograron seducir rápidamente a la gente del Caribe y después de toda Colombia, en un interminable trasegar pueblo a pueblo, ciudad a ciudad, inicialmente en compañía del acordeón alegre de Miguel López, no obstante haberse dado a conocer con Emilio Oviedo  y posteriormente de los más destacados ejecutantes del fuelle que han brillado con luz propia.
Si bien es cierto que la figura del cantante vallenato tiene lejanos antecedentes que datan de 1948 no existe duda alguna que fue Jorge Oñate quien inauguró la más importante época del canto vallenato  y abrió la senda para que con aire triunfal desfilarán otros grandes vocalistas de ayer, hoy y con seguridad, de mañana.

Jorge Oñate con ‘Colacho’ Mendoza.


LOS PRIMEROS CANTANTES

El nombre de Luis Enrique Martínez surge en este punto ya que él, con la frescura de su acordeón, más de 60 años atrás, le brindó la alternativa de mostrarse como cantantes de vallenatos a Esteban Montaño, Armando Zabaleta, Remberto Brú, Alberto Fernández, Orlando Nola Maestre y Tobías Enrique Pumarejo.
Posteriormente, Robertico Román ‘Romancito’, con el acordeón del entonces adolescente Aníbal Velásquez, marcaron una época importantísima en el litoral Atlántico divulgando los aires vallenatos.
Un poco más adelante, Alberto Pacheco le permitió a los compositores Julio Herazo y Gustavo Rada lucirse cantando paseos y merengues de su inspiración y finalmente Ovidio Granados tuvo en su elenco playonero a cantautores destacados como Miguel Yanet, Rafael ‘Wicho’ Sánchez, Isaac Carrillo, Miguel Mora y Néstor Martínez.
Todos ellos tuvieron su estelar momento, pero fue Jorge Oñate con su canto de ‘Ruiseñor’ quien tuvo el mérito de consolidar la figura del cantante como un miembro más de la agrupación. Fue Oñate el elegido que abrió la trocha a los acordeoneros que no cantaban al alzarse junto a Miguel López con la corona del Festival Vallenato en 1972.  Al respecto ya en 1968 Ovidio Granados había fracasado en el intento, junto a su cantante Miguel Yanet.

Jorge Oñate con ‘Los hermanos López’

PROMOTOR DE REYES
Oñate es el único cantante que ha sido copartícipe en la obtención del título de Rey Vallenato del Festival, en 1972 con Miguel López y en 1992 con su hijo Alvarito.
Es el único de los intérpretes, surgido después de 1970, que ha grabado cuatro puyas; ‘La vieja Gabriela’, ‘Déjala vení’, ‘El Pájaro de mi abuelo’ y ‘Los Vi Corriendo’. De los 100 vallenatos escogidos por Samper Pizano y Pilar Tafur como los mejores de la historia, Oñate ya había grabado 25 con distintos conjuntos.

Nos llena de orgullo no sólo a los vallenatos sino a todos los colombianos tener un artista tan prominente como Jorge Oñate que sólo gratos recuerdos nos ha dejado en su larga, brillante y victoriosa carrera musical. Por eso y mucho más, está en la historia.

POR JULIO OÑATE MARTÍNEZ/ESPECIAL PARA EL PILÓN