El Tribunal Superior del Distrito Judicial de Valledupar negó por improcedente la acción de tutela impuesta por la adulta mayor, de 73 años, que buscaba que le revocaran la medida de aseguramiento domiciliaria a su hija, a quien denunció por violencia intrafamiliar.  

Además, solicitó que se le garantizara el regreso a su casa en un ambiente libre de todos los tipos de violencia ejercida por Yaquelin Beltrán en contra de ella y sus familiares.

No obstante, el tribunal consideró que la tutela no era para resolver pretensiones que se podían debatir o solicitar en el marco del proceso que se adelanta en contra de Yaquelin Beltrán. 

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“La Sala no encuentra senda de resolución diferente que la de negar el amparo solicitado, al resultar palpable la improcedencia de este mecanismo de defensa judicial para resolver lo pretendido por la actora, en tanto que para dirimir las situaciones que se vienen analizando, se precisan medios de solución ante los mismos organismos accionados, de los cuales no existe evidencia de que la interesada haya acudido para lograr que se produzca su resolución dentro de los conductos regulares legalmente establecidos”, reza el fallo del magistrado ponente Diego Andrés Ortega Narváez. 

La acción judicial fue interpuesta por la adulta mayor con la asesoría de su abogado Jairo Patiño. La mujer se había marchado de su casa ubicada en el barrio Divino Niño para no convivir con la hija Yaquelin Beltrán. 

Esta se encuentra en su casa privada de la libertad desde el pasado mes de julio. 

Para la época, la mujer fue capturada por intimidar con arma blanca a su progenitora y a un hermano en presencia de toda la vecindad, donde también se encontraban menores de edad.   

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Por eso, Yaquelin Beltrán fue presentada ante el Juzgado Primero Penal Municipal con función de Control de Garantías que decidió cobijarla con medida de aseguramiento domiciliaria. 

La decisión fue apelada por la Fiscalía, pero recientemente fue confirmada por otro juez en segunda instancia, generando inconformidad en la adulta mayor.  

“He tenido que buscar refugio, mis derechos como víctima han sido totalmente vulnerados, mi calidad de adulta mayor omitida, he sido expuesta a los maltratos e intimidaciones de manera constante y con la omisión de las autoridades mencionadas”, consideró la mujer en la tutela.