En EL PILÓN cada vez estamos más convencidos de las muchas razones que nos motivan para continuar con nuestro proceso de promover la cultura por la defensa de los árboles en Valledupar y es así como ya llegamos a la versión número 8 del Foro del Árbol.

Por fortuna, en estos 8 años que llevamos desarrollando este evento hemos logrado contar con el apoyo de muchas entidades del sector privado, y en algunas ocasiones del sector público, para cumplir con el propósito de generar conciencia ciudadana. Todo está listo para el foro de este año 2025, el cual se llevará a cabo este miércoles 26 de marzo, a partir de las nueve de la mañana en el salón Yui del Hotel Sicarare, de Valledupar.

Además de agradecer a nuestros lectores y distintas audiencias, anticipamos nuestra gratitud a entidades como Corpocesar, Emdupar, Drummond, Afinia y al Hotel Sicarare, empresas que hacen posible la realización de este foro que nos permite brindar estos espacios para analizar un tema de tanto interés general como es la conservación y defensa de los árboles en Valledupar y la región.

La agenda para este año se estructuró bajo el lema “Preservación de los árboles antiguos, un tesoro para la biodiversidad urbana”, la cual contará con la participación del destacado arborista e ingeniero mexicano Edgar Ojeda, quien resaltará la importancia de la arquitectura arborista en la planificación urbana. También estarán Carlos Llanos y Obed Bayona, de Corpocesar, ellos nos hablarán de todo lo relacionado con árboles antiguos en la región.

Además del foro, con el apoyo del vivero Colanta-Coolesar, en Valledupar, serán plantados cerca de unos 300 árboles durante el evento.

De verdad son miles de razones las que nos comprometen a seguir en defensa de nuestros árboles, la lista de beneficios que ellos nos brindan es bastante larga, de la cual podemos mencionar: 1) Los árboles purifican el aire y nos dan oxígeno. 2) Ayudan a bajar la temperatura. 3) Contribuyen con el ahorro de energía. 4) protegen de los rayos UV del sol. 5) Protegen y dan cobijo a los animales, fijan el terreno y son fuente de alimento y materia primera.

De esa extensa lista de beneficios también es necesario valorar su importancia para combatir el cambio climático, mediante la absorción del CO2, removiendo y almacenando el carbono al tiempo que liberan oxígeno al aire. Ellos absorben los olores y gases contaminantes (óxidos de nitrógeno, amoníaco, dióxido de azufre y ozono) y filtran las partículas contaminantes del aire, atrapándolas en sus hojas y corteza. Proporcionan oxígeno, refrescan las calles y la ciudad, sus sombras disminuyen la evaporación del agua de los céspedes sedientos, atrapan el agua de lluvia y permiten que fluya por el tronco y llegue a la tierra donde están plantados. Protegen a los niños de los rayos ultravioletas y evitan el cáncer de piel y, en fin, son múltiples las bondades de nuestra arborización.

En esta octava versión, queremos dedicar especial atención a los árboles más viejos, a menudo subestimados, recordemos que ellos son monumentos de tiempo, de resistencia y los guardianes del equilibrio ecológico de nuestra ciudad.

Como se puede ver, tenemos sobradas razones para que despertemos con entusiasmo el interés por el cuidado de nuestros árboles. Todos están cordialmente invitados a este octavo foro del árbol.