En los últimos meses una de las palabras más mencionadas en Valledupar ha sido reactivación económica, esto, debido a que la capital del Cesar ha registrado alarmantes cifras de pobreza y desempleo entre el 2020 y 2021. 

El último informe del Departamento Nacional Estadísticos, DANE, precisó que para el mes de septiembre la tasa de desempleo en la ciudad fue del 18 %, un alto porcentaje que dejó a Valledupar como la cuarta capital del país con mayor número de desocupados. 

A pesar de que dicho porcentaje puso a la ciudad por encima de territorios del Caribe que tuvieron una baja cifra de desempleados, como Cartagena (8,9 %), Barranquilla (10,2 %), Sincelejo (14 %), Santa Marta (14,2 %) y Montería (17,1%), este dato refleja una leve disminución en el número de personas que están sin una fuente de empleo debido a que para el mes de agosto fue del 18,5 %.

Destaca aún más la reducción en la tasa de desempleo respecto a este mismo periodo en el 2020, cuando un 23,9 % de los vallenatos carecían de un trabajo fijo. La reducción exacta fue de 5.4 puntos porcentuales. Este resultado responde, entre otras cosas, a que actualmente los locales comerciales y actividades económicas están en funcionamiento, caso contrario a  septiembre del año pasado, cuando un alto porcentaje de establecimientos seguían cerrados por el aumento de los casos positivos para covid-19.

Como también estaban vigentes las restricciones para la movilidad y comprar alimentos, lo cual fue una medida para prevenir el contagio. Aunque dichas normativas fueron necesarias para salvaguardar la salud de los vallenatos, afectaron gravemente la economía de la capital del Cesar. 

La pausa de las actividades  y hasta el cierre definitivo de algunas pequeñas empresas repercutieron de manera negativa en el mercado laboral de la ciudad, y aumentaron la informalidad en las calles. 

En ese sentido, para marzo del 2020 la tasa de desempleo era del 19,0 %, abril, 20,7 %, y mayo, 22,6%, siendo estos los primeros meses en los que se vivió la pandemia y se decidió suspender la actividad económica. Estos cinco periodos representaron el mayor porcentaje de desocupados en comparación del 2019, cuando la mayor cifra registrada fue 16,7 % durante el mes de mayo. 

Es claro que el drástico aumento de desempleados y el desafortunado porcentaje de 27,2 % que registró el Cesar en el Índice de Pobreza Multidimensional, IPM, tuvo que ver con las restricciones asociadas al coronavirus. 

UNA PANDEMIA, MIL CRISIS

De acuerdo con el DANE, en marzo del 2019 la tasa de desocupados en Valledupar fue del 16,3 %, luego en abril del 16,4 %, mayo (16,7 %), meses en los que la tasa se mantuvo estable, pero para junio se registró un porcentaje de 16,2 %: una leve disminución que se afianzó en julio con un 15,9 % de desocupados. 

Estos porcentajes reflejaban que para dicho año había una aparente estabilidad en el mercado laboral y el porcentaje de personas desempleadas en cada mes se iba reduciendo. 

Caso contrario a lo registrado en el 2020. A diferencia de junio de 2019 donde bajó la tasa, en junio y julio del año pasado aumentó el porcentaje de desocupados 7% y  3%, respectivamente. Para agosto fue del 24 %, pero en septiembre se redujo a 23,9 %, de igual manera en octubre bajó a 22,2 %, noviembre (20 %) y diciembre (19,2 %). 

Esos últimos tres meses demuestran los efectos de la reactivación económica que inició en ese periodo para aprovechar la época navideña, una de las temporadas con mayor actividad comercial. Así mismo, el tercer día sin IVA que se llevó a cabo el 21 de noviembre contribuyó a aumentar las ventas. 

Lo anterior sirvió como un anímico para la economía de la ciudad y permitió aumentar el gasto en los hogares. Con eso llegó el aumento del personal para atender a los clientes y el retorno de los que se habían visto obligados a renunciar por el cierre de los establecimientos comerciales.  

PEQUEÑAS REDUCCIONES QUE ALIENTAN

En febrero del presente año, 158.131 habitantes estuvieron ocupados, a diferencia de febrero de 2020, en el que 164.831 vallenatos estaban desarrollando algún tipo de oficio. Esto refleja que entre los dos periodos la población ocupada tuvo una disminución de 6.700 personas. 

Por otro lado, los ciudadanos que deben realizar actividades informales para vivir suman hasta el 60 % de la ocupación del mercado laboral. Según el DANE, para el mes de septiembre esta cifra fue del 62,1%, dejando a la ciudad en el sexto lugar de la tabla que mide la población ocupada en el campo informal. Aunque la cifra continúa estando por encima del 60 %, hay una leve disminución en comparación de agosto del presente año, cuando fue del 62,5 %.

Estas leves reducciones en la informalidad también se están presentando en la tasa de desempleados: en abril bajó a 19,2 %, en mayo estuvo en 19,9 %, en junio disminuyó levemente a 19,1 %, julio (19,2 %), agosto (18,5 %) y septiembre (18 %), la cifra más baja registrada en el año y que está a dos puntos porcentuales de alcanzar la tasa registrada en diciembre del 2020 que fue del 16 %. 

Dichas cifras están relacionadas con la vacunación contra el coronavirus, la cual ha propiciado la reactivación de un alto porcentaje de empleos y el levantamiento de las restricciones. 

Seguramente habrá una tendencia a la baja que podría afianzarse aún más durante estos dos últimos meses del año de época navideña, ya que esta contribuirá a la generación de más puestos de empleo, y los días sin IVA que se llevarán a cabo el próximo 19 de noviembre y 3 de diciembre ayudarán a dinamizar la economía y aumentar el flujo de ventas.