Los vendedores estacionarios y los locales comerciales se han tomado los andenes para ofertar múltiples productos, mientras que los vehículos y motocicletas parqueados indebidamente también obstaculizan la movilidad en varios sectores de la ciudad.
La invasión del espacio público parece no tener fin. Al hablar de esta problemática es inevitable traer a colación la zona céntrica de la Valledupar donde la informalidad campea; los vendedores estacionarios y los locales comerciales se han tomado los andenes para ofertar múltiples productos.
Desde la venta de jugos, frutas y otros tipos de comidas, hasta libros, prendas de vestir, calzado e implementos para el hogar han obstaculizado el paso peatonal principalmente en las carreras séptima y octava, específicamente entre las calles 16 A y 16 B.
Pero los únicos responsables no son los vendedores, los vehículos y motocicletas también hacen parte del caos que se vive en ese sector de Valledupar, puesto que constantemente se parquean haciendo las vías menos transitables; lo mismo ocurre en los alrededores de La Galería Popular.
Pero el panorama en otros sectores de la ciudad no parece ser mejor, los ciudadanos de algunos barrios se han quejado de esta situación. Solo por mencionar dos de los tantos casos, en la avenida principal del barrio La Nevada, en el sector conocido como la Calle Ancha, se han tomado los andenes con ventas de todo tipo de alimentos, sillas y mesas para recibir a los clientes; lo mismo ocurre en la transversal 23 del barrio Los Fundadores, donde el sector comercial se ha apoderado de los andenes.
Sobre este tema el arquitecto y exsecretario de Obras Públicas Municipal, Jorge Armando Maestre, indicó: “La indebida ocupación del espacio público por actividades comerciales y de servicios, vendedores estacionarios y malos ciudadanos que con rejas y otro tipo de cerramientos ocupan más de lo que los títulos de propiedad le permiten es una problemática de vieja data no solo en Valledupar sino en Colombia”.
Maestre explicó que anteriormente este tipo infracciones urbanísticas eran atendidas por la Oficina de Planeación. “En virtud de la Ley 810 de 2003 y siguiendo lo establecido en el Código de Procedimiento Administrativo, pero en 2016 entró en vigencia la Ley 1801 de 2015 y cambió todo”, subrayó.
Así las cosas, se estableció que las conductas que atenten contra la integridad urbanística deberán ser atendidas por los inspectores urbanos de Policía, los cuales están adscritos a la Secretaría de Gobierno.
“El procedimiento se abrevió, es verbal, ya no es a través del Código de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso Administrativo, sino del Código de Policía y establece multas altas para quienes atenten contra la integridad urbanística y en especial contra el espacio público”, agregó Maestre.
En ese sentido, son los inspectores urbanos los responsables de conocer las infracciones, abrir los procesos e imponer las sanciones, multas y ordenar la suspensión de las obras, demoliciones y restitución del espacio público cuando se requiera.
Ante las dudas sobre si se hacen los respectivos seguimientos a los infractores, EL PILÓN se dio a la tarea de contactar al secretario de Gobierno de Valledupar, Luis Galvis Núñez, al coordinador de la Unidad de Espacio Público del municipio, Luis Maya, pero no hubo respuestas.
POR: REDACCIÓN EL PILÓN.
Los vendedores estacionarios y los locales comerciales se han tomado los andenes para ofertar múltiples productos, mientras que los vehículos y motocicletas parqueados indebidamente también obstaculizan la movilidad en varios sectores de la ciudad.
La invasión del espacio público parece no tener fin. Al hablar de esta problemática es inevitable traer a colación la zona céntrica de la Valledupar donde la informalidad campea; los vendedores estacionarios y los locales comerciales se han tomado los andenes para ofertar múltiples productos.
Desde la venta de jugos, frutas y otros tipos de comidas, hasta libros, prendas de vestir, calzado e implementos para el hogar han obstaculizado el paso peatonal principalmente en las carreras séptima y octava, específicamente entre las calles 16 A y 16 B.
Pero los únicos responsables no son los vendedores, los vehículos y motocicletas también hacen parte del caos que se vive en ese sector de Valledupar, puesto que constantemente se parquean haciendo las vías menos transitables; lo mismo ocurre en los alrededores de La Galería Popular.
Pero el panorama en otros sectores de la ciudad no parece ser mejor, los ciudadanos de algunos barrios se han quejado de esta situación. Solo por mencionar dos de los tantos casos, en la avenida principal del barrio La Nevada, en el sector conocido como la Calle Ancha, se han tomado los andenes con ventas de todo tipo de alimentos, sillas y mesas para recibir a los clientes; lo mismo ocurre en la transversal 23 del barrio Los Fundadores, donde el sector comercial se ha apoderado de los andenes.
Sobre este tema el arquitecto y exsecretario de Obras Públicas Municipal, Jorge Armando Maestre, indicó: “La indebida ocupación del espacio público por actividades comerciales y de servicios, vendedores estacionarios y malos ciudadanos que con rejas y otro tipo de cerramientos ocupan más de lo que los títulos de propiedad le permiten es una problemática de vieja data no solo en Valledupar sino en Colombia”.
Maestre explicó que anteriormente este tipo infracciones urbanísticas eran atendidas por la Oficina de Planeación. “En virtud de la Ley 810 de 2003 y siguiendo lo establecido en el Código de Procedimiento Administrativo, pero en 2016 entró en vigencia la Ley 1801 de 2015 y cambió todo”, subrayó.
Así las cosas, se estableció que las conductas que atenten contra la integridad urbanística deberán ser atendidas por los inspectores urbanos de Policía, los cuales están adscritos a la Secretaría de Gobierno.
“El procedimiento se abrevió, es verbal, ya no es a través del Código de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso Administrativo, sino del Código de Policía y establece multas altas para quienes atenten contra la integridad urbanística y en especial contra el espacio público”, agregó Maestre.
En ese sentido, son los inspectores urbanos los responsables de conocer las infracciones, abrir los procesos e imponer las sanciones, multas y ordenar la suspensión de las obras, demoliciones y restitución del espacio público cuando se requiera.
Ante las dudas sobre si se hacen los respectivos seguimientos a los infractores, EL PILÓN se dio a la tarea de contactar al secretario de Gobierno de Valledupar, Luis Galvis Núñez, al coordinador de la Unidad de Espacio Público del municipio, Luis Maya, pero no hubo respuestas.
POR: REDACCIÓN EL PILÓN.