12 miembros de empresa y sindicato, trabajaron de la mano durante varios días para que la compañía cumpliera con lo expuesto en la convención colectiva.
La industria minera recibió un fuerte golpe en su producción con la pasada huelga de los trabajadores de la empresa Carbones de Cerrejón, el país dejó en el aire recursos por más de 160 mil millones de pesos y se dejaron de exportar alrededor de tres millones de toneladas de carbón.
El gran interrogante es que ¿cuántas personas se benefician directa o indirectamente en La Guajira por la compañía minera?, cuya respuesta es aún incierta la respuesta, trabajadores anunciaron que todo fue por un beneficio mutuo, mientras las directivas afirmaron “aquí perdimos todos”; al inicio de la huelga, habitantes denunciaron que los carnavales de Fonseca no quedaron buenos, “porque la mina estaba parada”.
De acuerdo a lo que inicialmente se pactó entre los trabajadores para llegar a la huelga, se cumplieron muchos propósitos, según comentó el presidente de Sintracarbón, Igor Díaz López, “los puntos más importantes están en el sistema de salud, también la participación del sindicato en el nuevo contrato de prestación de servicio, la puesta en marcha de un centro de rehabilitación para atender a los trabajadores y comunidad, un nuevo sistema de transporte para la mano obrera”, estos pactos al parecer no son compartidos por empresa la minera.
El presidente de la compañía, Roberto Junguito Pombo, dijo en estos 32 días de la protesta, para Cerrejón fue una gran noticia reiniciar labores. Pero esto ha sido un proceso largo, donde todos terminaron perdiendo.
Jungito Pombo declaró que había sido un proceso donde perdieron no solo los empleados de la empresa, también las familias de ellos, proveedores, y contratistas, sino todas las personas que están relacionadas con la compañía en La Guajira, “pensamos que este es el momento para pasar la página”.
Mientras tanto, el director de sindical indicó que la huelga es una herramienta legal que permite a los trabajadores cuando no se logra un arreglo en las condiciones de negociaciones, “pérdidas o ganancias, la verdad hay que ser más analíticos y futuristas, no hay tiempo para acusaciones sino para reflexiones profundas”, comentó Igor Díaz.
La empresa por medio de Jungito Pombo, manifestó que se debe retomar el plan minero, deben mirar cuáles son las metas de explotación para el fin de año. “El precio del carbón ha caído un 36 por ciento desde hace dos años, en este momento el valor que tenemos por tonelada de carbón es alrededor de 76 dólares, inclusive después de la huelga, el precio sigue cayendo”, argumentó el líder, pero sus palabras fueron más allá y claras, “la huelga realmente no trajo ningún beneficio para nadie, todos perdimos en este proceso. Eso nos deja el receso en los 32 días de huelga”.
Se conoció que la nueva convención colectiva contempla un aumento salarial del 5,1 por ciento para el primer año, anticipa los bonos correspondientes hasta el año 2015 como consecuencia de la extensión de su vigencia por tres años, establece condiciones más favorables para los préstamos de vivienda, auxilios educativos, becas y prima de antigüedad y define mejoras en la prestación de los servicios de salud y de transporte de los trabajadores, la contratación de más de 600 trabajadores a término fijo, entre otros. En total valoraron 144 puntos.
En cuanto sí le tocó ceder mucho la empresa para llegar a un acuerdo o no, el dirigente comentó “la negociación se dio de una forma diferente, la compañía dialogó todo el tiempo. Una vez entrados en huelga nos tocó evaluar formas distintas para llegar a un acuerdo”.
En los temas de salud y transporte so específicos en cuanto a la fecha, en dos meses se contratará la firma que hará las evaluaciones y valoración real de los trabajadores en ambos temas, en los tres meses siguientes se debe tener la firma que ejecutará los trabajos y en los cinco siguientes se definirá el contrato y la puesta en marcha del proyecto.
El economista Javier Delgado Pérez argumentó que hay que tener cuidado cuando se dice que se perdió dinero en La Guajira, “la plata no se pierde, se dejó de recibir”. Delgado Pérez anunció que se deben analizar cuáles son los intereses que hay entre los que administran Cerrejón y los empleados, “ahí hay un equilibrio entre las dos cosas”, y se refirió a la situación del mineral en Colombia, “el futuro del carbón es oscuro”, ya que como se está manejando la tendencia mundial de la explotación que es contaminante. El economista dijo que en estos momentos el precio debe de estar alto, por la escasez del carbón.
12 miembros de empresa y sindicato, trabajaron de la mano durante varios días para que la compañía cumpliera con lo expuesto en la convención colectiva.
La industria minera recibió un fuerte golpe en su producción con la pasada huelga de los trabajadores de la empresa Carbones de Cerrejón, el país dejó en el aire recursos por más de 160 mil millones de pesos y se dejaron de exportar alrededor de tres millones de toneladas de carbón.
El gran interrogante es que ¿cuántas personas se benefician directa o indirectamente en La Guajira por la compañía minera?, cuya respuesta es aún incierta la respuesta, trabajadores anunciaron que todo fue por un beneficio mutuo, mientras las directivas afirmaron “aquí perdimos todos”; al inicio de la huelga, habitantes denunciaron que los carnavales de Fonseca no quedaron buenos, “porque la mina estaba parada”.
De acuerdo a lo que inicialmente se pactó entre los trabajadores para llegar a la huelga, se cumplieron muchos propósitos, según comentó el presidente de Sintracarbón, Igor Díaz López, “los puntos más importantes están en el sistema de salud, también la participación del sindicato en el nuevo contrato de prestación de servicio, la puesta en marcha de un centro de rehabilitación para atender a los trabajadores y comunidad, un nuevo sistema de transporte para la mano obrera”, estos pactos al parecer no son compartidos por empresa la minera.
El presidente de la compañía, Roberto Junguito Pombo, dijo en estos 32 días de la protesta, para Cerrejón fue una gran noticia reiniciar labores. Pero esto ha sido un proceso largo, donde todos terminaron perdiendo.
Jungito Pombo declaró que había sido un proceso donde perdieron no solo los empleados de la empresa, también las familias de ellos, proveedores, y contratistas, sino todas las personas que están relacionadas con la compañía en La Guajira, “pensamos que este es el momento para pasar la página”.
Mientras tanto, el director de sindical indicó que la huelga es una herramienta legal que permite a los trabajadores cuando no se logra un arreglo en las condiciones de negociaciones, “pérdidas o ganancias, la verdad hay que ser más analíticos y futuristas, no hay tiempo para acusaciones sino para reflexiones profundas”, comentó Igor Díaz.
La empresa por medio de Jungito Pombo, manifestó que se debe retomar el plan minero, deben mirar cuáles son las metas de explotación para el fin de año. “El precio del carbón ha caído un 36 por ciento desde hace dos años, en este momento el valor que tenemos por tonelada de carbón es alrededor de 76 dólares, inclusive después de la huelga, el precio sigue cayendo”, argumentó el líder, pero sus palabras fueron más allá y claras, “la huelga realmente no trajo ningún beneficio para nadie, todos perdimos en este proceso. Eso nos deja el receso en los 32 días de huelga”.
Se conoció que la nueva convención colectiva contempla un aumento salarial del 5,1 por ciento para el primer año, anticipa los bonos correspondientes hasta el año 2015 como consecuencia de la extensión de su vigencia por tres años, establece condiciones más favorables para los préstamos de vivienda, auxilios educativos, becas y prima de antigüedad y define mejoras en la prestación de los servicios de salud y de transporte de los trabajadores, la contratación de más de 600 trabajadores a término fijo, entre otros. En total valoraron 144 puntos.
En cuanto sí le tocó ceder mucho la empresa para llegar a un acuerdo o no, el dirigente comentó “la negociación se dio de una forma diferente, la compañía dialogó todo el tiempo. Una vez entrados en huelga nos tocó evaluar formas distintas para llegar a un acuerdo”.
En los temas de salud y transporte so específicos en cuanto a la fecha, en dos meses se contratará la firma que hará las evaluaciones y valoración real de los trabajadores en ambos temas, en los tres meses siguientes se debe tener la firma que ejecutará los trabajos y en los cinco siguientes se definirá el contrato y la puesta en marcha del proyecto.
El economista Javier Delgado Pérez argumentó que hay que tener cuidado cuando se dice que se perdió dinero en La Guajira, “la plata no se pierde, se dejó de recibir”. Delgado Pérez anunció que se deben analizar cuáles son los intereses que hay entre los que administran Cerrejón y los empleados, “ahí hay un equilibrio entre las dos cosas”, y se refirió a la situación del mineral en Colombia, “el futuro del carbón es oscuro”, ya que como se está manejando la tendencia mundial de la explotación que es contaminante. El economista dijo que en estos momentos el precio debe de estar alto, por la escasez del carbón.