Juan Tomás Jiménez Bermúdez y Olga Leonor Molina Jiménez, tienen 92 y 91 años, respectivamente; juntos vieron crecer a sus nueve hijos, en medio de adversidades y alegrías, pese a cualquier situación su máxima aspiración es seguir unidos hasta la muerte.

La historia de amor de esta pareja se ha convertido en un símbolo de amor perdurable en el barrio. Olga afirma sin titubear que el secreto para mantenerse unidos, es el buen trato de Juan Tomás.

Jiménez Bermúdez nacido en 1925 y su compañera Molina Jiménez en 1924, un amor que ha trascendido en el tiempo. Se enamoraron en su juventud y aseguran que a pesar de las adversidades de la vida, separarse nunca fue una opción.

Tanto Olga como Juan se casaron antes de conocerse; Olga tuvo dos hijos con su primera pareja, quien falleció, mientras que Juan empezó a pretenderla en el año 1951 cuando trabajaba en la casa de la familia Escalona, pero él tenía familia y como recalcó Olga Leonor, para ella los hombres con hogar son hombres prohibidos.

La persistencia de Juan y la condición de Olga los llevaron a encontrarse un año después y desde ese momento hasta la fecha se mantienen unidos.

“Nos queremos mucho. Nunca hemos tenido problemas durante 70 años. Sólo tenemos un último deseo: tenemos que morir juntos. Porque si uno de nosotros muere, el otro sentirá que ha perdido la mitad de sí mismo”, explicó Juan Tomás.

Uno de los hijos, el más joven de la pareja, Rigoberto, de 46 años y que vive aún con ellos, asegura que sus padres son un ejemplo de amor y de unión perfecta, no sólo para la familia sino para todo aquel que los conoce.

Se sienten orgullosos de su familia, al caminar Juan toma a Olga de la mano como cualquier joven enamorado, pero allí queda demostrado que el amor si dura para toda la vida, bajo el amparo absoluto de Dios.
“A Juan y cada uno de mis hijos se los presento a Dios, para que nos vaya bien” dijo Olga.

La mujer dio a luz nueve hijos. La familia sigue aumentando aunque no recuerdan cuantos nietos y bisnietos tienen, lo que si recuerdan es que cada año, en ocasiones especiales como las fechas de sus cumpleaños, Olga el 24 y Juan el 31 de diciembre, todos se reúnen para celebrar en familia.

Los apacibles ancianos creen que el secreto de su larga vida está en su alimentación natural y saludable. “Comemos cocido. Yuca, ñame; yo pienso que las papás fritas están restándole años a la juventud, pero les encantan”, dijo Juan Tomás, mientras miraba a su eterna enamorada.

Por: Ariadne Osorio Ponce / EL PILÓN
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