Queriendo demostrar que es inocente y que no tenía nada que ver con el crimen de un estudiante de la UPC, Jairo Alberto Palomino Ricaurte soltó el llanto ante los medios de comunicación, la mañana del 24 de julio cuando se encontraba en las instalaciones del Comando de la Policía en Valledupar.

Palomino Ricaurte fue capturado por la Policía y es acusado de haber disparado el arma que le causó la muerte a Eliel Aníbal Padilla Vega, quien fue baleado delante su mamá y su novia, el pasado 11 de junio en la transversal 29 con 18 del barrio Sabanas de Valle, cuando el joven detuvo la motocicleta cerca de la iglesia evangélica que está a cargo de su papá. (Click aquí para leer más sobre el asesinato del universitario)
Con las ‘esposas’ niqueladas en sus manos, en medio de escenas conmovedoras y en medio del llanto, Jairo Alberto gritaba “Yo no lo maté, yo no fui, busquen al responsable del crimen, porque yo ni siquiera conocía a ese muchacho, desconozco totalmente de quién me están hablando, es que no sé por qué estoy preso, me están acusando de algo que no cometí. Soy inocente, soy una persona trabajadora, me dedico a recolectar mangos, tengo a mi mamá enferma y mi esposa está embarazada, Dios mío, por qué me hacen esto, Señor apiádate de mi e ilumíname para salir de este trance en mi vida”.
Alias Jairito, dijo esas palabras luego de haber sido judicializado por los delitos de homicidio en concurso con porte ilegal de arma de fuego, en diligencia realizada en el Palacio de Justicia Valledupar.

Anotaciones judiciales
El supuesto homicida registra varias anotaciones, entre ellas por utilización ilegal de uniformes e insignias de la fuerza pública en hechos registrados el 3 de marzo de este año en la calle 24 sobre la avenida Fundación en Valledupar, de igual forma es investigado por el delito de hurto calificado en menor cuantía, hechos ocurridos el día 12 febrero del 2010 en el barrio Los Fundadores e indiciado por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefaciente.
Palomino Ricarte fue capturado cerca a su vivienda ubicada en el barrio Los Fundadores de esta capital y tras no allanarse a los cargos en la audiencia de legalización, formulación e imputación de cargos, el Juzgado Segundo Penal del Circuito con Funciones de Control de Garantías, le dictó medida de aseguramiento en centro carcelario, por considerarlo un peligro para la sociedad.