EL PILÓN conoció que algunos internos se escapaban en la noche y regresaban nuevamente a sus celdas en la madrugada, tras cometer fechorías.
Armas cortopunzantes, de fabricación carcelaria, tijeras, teléfonos celulares, limas y hasta sustancias alucinógenas decomisó una comisión de guardias del Inpec en la Cárcel Municipal de Chiriguaná, que se trasladó a esa localidad en atención a una serie de quejas por las irregularidades que se venían presentando en el interior del penal, hasta el punto de registrarse heridos en riñas entre los reclusos.
Los 28 reclusos, entre ellos una mujer, divididos en los tres patios que tiene el centro carcelario, fueron sorprendidos por los guardias en hora de la madrugada. Durante la revisión, decomisaron los elementos en referencia, que eran ingresados por los mismos presos durante las salidas que al parecer hacían en la noche al salir de la cárcel por el patio y regresar a sus celdas en la madrugada. Se conoció que los internos dormían en los patios sin ninguna vigilancia carcelaria.
En una de las últimas riñas registradas en la cárcel, resultaron heridos los reclusos identificados como Jaider Castro Payares, sindicado del delito de tráfico, fabricación de sustancias alucinógenas, y Alfonso Pérez, acusado del delito de abuso sexual con menor de 14 años. El primero de los lesionados fue trasladado en una Ambulancia hasta el Hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar, tras ser remitido del San Andrés de Chiriguaná.
Hace una semana, los reclusos protagonizaron una revuelta para protestar por la poda de dos gigantescos árboles de Almendra que existen en el interior del penal, debido a que era utilizado por algunos de ellos para observar el panorama en la parte externa, y muy posiblemente para planear fugas, pero el amotinamiento fue controlado posteriormente.
Según conoció EL PILÓN, en los últimos tres años, los reclusos del centro carcelario que está a cargo de la Alcaldía Local, no eran conducidos a sus celdas para dormir, sino que lo hacían en los patios que dan acceso a la calle, porque supuestamente faltaba uno de los candados para asegurarlos en las noches.
Parece que ahora sí se retomó el orden en la Cárcel, luego de que la queja de los vecinos y la comunidad en general diera aviso que varios de los presos se volaban por la pared en horas de la noche y volvían a sus celdas en la madrugada, tras cometer algunas acciones delictivas, mientras que otros visitaban a sus familiares; es decir salían y entraban como ‘Pedro por su casa’, como lo dice el adagio popular.
El gobierno local anunció que tiene toda la intención de hacer millonarias inversiones para mejorar las locaciones para que los internos vivan en otras condiciones.
EL PILÓN conoció que algunos internos se escapaban en la noche y regresaban nuevamente a sus celdas en la madrugada, tras cometer fechorías.
Armas cortopunzantes, de fabricación carcelaria, tijeras, teléfonos celulares, limas y hasta sustancias alucinógenas decomisó una comisión de guardias del Inpec en la Cárcel Municipal de Chiriguaná, que se trasladó a esa localidad en atención a una serie de quejas por las irregularidades que se venían presentando en el interior del penal, hasta el punto de registrarse heridos en riñas entre los reclusos.
Los 28 reclusos, entre ellos una mujer, divididos en los tres patios que tiene el centro carcelario, fueron sorprendidos por los guardias en hora de la madrugada. Durante la revisión, decomisaron los elementos en referencia, que eran ingresados por los mismos presos durante las salidas que al parecer hacían en la noche al salir de la cárcel por el patio y regresar a sus celdas en la madrugada. Se conoció que los internos dormían en los patios sin ninguna vigilancia carcelaria.
En una de las últimas riñas registradas en la cárcel, resultaron heridos los reclusos identificados como Jaider Castro Payares, sindicado del delito de tráfico, fabricación de sustancias alucinógenas, y Alfonso Pérez, acusado del delito de abuso sexual con menor de 14 años. El primero de los lesionados fue trasladado en una Ambulancia hasta el Hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar, tras ser remitido del San Andrés de Chiriguaná.
Hace una semana, los reclusos protagonizaron una revuelta para protestar por la poda de dos gigantescos árboles de Almendra que existen en el interior del penal, debido a que era utilizado por algunos de ellos para observar el panorama en la parte externa, y muy posiblemente para planear fugas, pero el amotinamiento fue controlado posteriormente.
Según conoció EL PILÓN, en los últimos tres años, los reclusos del centro carcelario que está a cargo de la Alcaldía Local, no eran conducidos a sus celdas para dormir, sino que lo hacían en los patios que dan acceso a la calle, porque supuestamente faltaba uno de los candados para asegurarlos en las noches.
Parece que ahora sí se retomó el orden en la Cárcel, luego de que la queja de los vecinos y la comunidad en general diera aviso que varios de los presos se volaban por la pared en horas de la noche y volvían a sus celdas en la madrugada, tras cometer algunas acciones delictivas, mientras que otros visitaban a sus familiares; es decir salían y entraban como ‘Pedro por su casa’, como lo dice el adagio popular.
El gobierno local anunció que tiene toda la intención de hacer millonarias inversiones para mejorar las locaciones para que los internos vivan en otras condiciones.