Fracasaron las negociaciones: Como ha ocurrido en los últimos cuatro años, para el 2011 el Gobierno Nacional deberá nuevamente establecer el incremento del salario mínimo por decreto; luego que ayer fracasara el último intento de un acuerdo entre los empresarios y los trabajadores. Los empresarios se mantuvieron en una propuesta de aumento del 3% y […]
Fracasaron las negociaciones:
Como ha ocurrido en los últimos cuatro años, para el 2011 el Gobierno Nacional deberá nuevamente establecer el incremento del salario mínimo por decreto; luego que ayer fracasara el último intento de un acuerdo entre los empresarios y los trabajadores.
Los empresarios se mantuvieron en una propuesta de aumento del 3% y aunque los trabajadores llegaron a la reunión extraordinaria con una propuesta del 6 por ciento de aumento en el salario mínimo mensual, estaban dispuestos a aceptar una propuesta del 5 por ciento por parte del Gobierno Nacional y los empresarios.
Julio Roberto Gómez, presidente de la Confederación General de Trabajadores (CGT), manifestó estar decepcionado por la actitud de los empresarios, que no se movieron de su propuesta del tres por ciento.
“El problema no es solamente de tipo numérico. Estamos hablando que no es cierta la tesis neoliberal que a un mayor incremento automáticamente se incrementan las tasas de desempleo, la inflación, los servicios públicos. Estaríamos entonces condenados a vivir en medio de la pobreza y la miseria. En la medida en que hay mayores salarios, hay mayor demanda de bienes y servicios, y en ese entorno debemos movernos”, insistió el dirigente sindical.
Sin embargo, los empresarios no cedieron e insistieron que un incremento por encima del 3 por ciento, podría generar más desempleo e informalidad en el país.
El vicepresidente del Consejo Gremial, Rafael Mejía, expresó que la propuesta del 5 por ciento de la CGT no tiene viabilidad económica, por sus efectos negativos entre los empresarios colombianos.
El líder gremial manifestó que un ajuste del mínimo por encima de este tope será una decisión de carácter político que tiene que tomar el presidente Juan Manuel Santos.
A su vez, el Vicepresidente Angelino Garzón recomendó ayer a las partes para fijar el alza salarial, tener en cuenta la inflación esperada para el próximo año, que sería superior al 3 por ciento.
“No es con salarios bajos como vamos a consolidar el desarrollo económico, es con empleos decentes y salarios justos como mejoramos la capacidad adquisitiva de la población colombiana y como hacemos de Colombia un país más productivo”, manifestó Garzón.
El incremento deberá ser establecido por el Gobierno Nacional antes de finalizar la semana en curso. Es de anotar, que los trabajadores insistieron en un alza mayor, dado al fuerte incremento que se viene presentando en los productos de la canasta familiar y los nuevos aumentos que se prevén para el 2011.
Fracasaron las negociaciones: Como ha ocurrido en los últimos cuatro años, para el 2011 el Gobierno Nacional deberá nuevamente establecer el incremento del salario mínimo por decreto; luego que ayer fracasara el último intento de un acuerdo entre los empresarios y los trabajadores. Los empresarios se mantuvieron en una propuesta de aumento del 3% y […]
Fracasaron las negociaciones:
Como ha ocurrido en los últimos cuatro años, para el 2011 el Gobierno Nacional deberá nuevamente establecer el incremento del salario mínimo por decreto; luego que ayer fracasara el último intento de un acuerdo entre los empresarios y los trabajadores.
Los empresarios se mantuvieron en una propuesta de aumento del 3% y aunque los trabajadores llegaron a la reunión extraordinaria con una propuesta del 6 por ciento de aumento en el salario mínimo mensual, estaban dispuestos a aceptar una propuesta del 5 por ciento por parte del Gobierno Nacional y los empresarios.
Julio Roberto Gómez, presidente de la Confederación General de Trabajadores (CGT), manifestó estar decepcionado por la actitud de los empresarios, que no se movieron de su propuesta del tres por ciento.
“El problema no es solamente de tipo numérico. Estamos hablando que no es cierta la tesis neoliberal que a un mayor incremento automáticamente se incrementan las tasas de desempleo, la inflación, los servicios públicos. Estaríamos entonces condenados a vivir en medio de la pobreza y la miseria. En la medida en que hay mayores salarios, hay mayor demanda de bienes y servicios, y en ese entorno debemos movernos”, insistió el dirigente sindical.
Sin embargo, los empresarios no cedieron e insistieron que un incremento por encima del 3 por ciento, podría generar más desempleo e informalidad en el país.
El vicepresidente del Consejo Gremial, Rafael Mejía, expresó que la propuesta del 5 por ciento de la CGT no tiene viabilidad económica, por sus efectos negativos entre los empresarios colombianos.
El líder gremial manifestó que un ajuste del mínimo por encima de este tope será una decisión de carácter político que tiene que tomar el presidente Juan Manuel Santos.
A su vez, el Vicepresidente Angelino Garzón recomendó ayer a las partes para fijar el alza salarial, tener en cuenta la inflación esperada para el próximo año, que sería superior al 3 por ciento.
“No es con salarios bajos como vamos a consolidar el desarrollo económico, es con empleos decentes y salarios justos como mejoramos la capacidad adquisitiva de la población colombiana y como hacemos de Colombia un país más productivo”, manifestó Garzón.
El incremento deberá ser establecido por el Gobierno Nacional antes de finalizar la semana en curso. Es de anotar, que los trabajadores insistieron en un alza mayor, dado al fuerte incremento que se viene presentando en los productos de la canasta familiar y los nuevos aumentos que se prevén para el 2011.