La situación de los incendios forestales en el departamento del Cesar ha alcanzado un nivel crítico, con la reciente confirmación de la primera muerte relacionada con estas conflagraciones. El hecho ocurrió en la vereda Jengibre, en el corregimiento de Mariangola, Valledupar, donde un hombre que trabajaba en el campo intentó extinguir las llamas sin contar con las herramientas adecuadas. Este trágico evento ha resaltado la urgencia de una respuesta coordinada y efectiva ante la crisis ambiental que enfrenta la región.

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Medidas preventivas y activación de la Sala de Crisis

Ante la creciente amenaza de incendios, la Gobernación del Cesar ha intensificado sus esfuerzos para mitigar los riesgos. Se activó una Sala de Crisis y se estableció un Puesto de Mando Unificado, donde participan organismos de socorro como el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Valledupar y la Defensa Civil. El objetivo es implementar estrategias efectivas que contengan el fuego rápidamente, utilizando tanto apoyo aéreo como terrestre. La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) ha proporcionado un carrotanque con capacidad para 15.000 litros de agua, esencial para combatir los incendios en áreas afectadas por sequía.

El sargento Julio Ramírez del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Valledupar explicó: “Vamos a hacer primero la planificación y según la prioridad de los riesgos que hay en la zona estaremos mirando a ver cuál (incendio) es más fácil de atender”. Esta planificación es crucial, ya que algunos incendios se encuentran en terrenos difíciles de acceder.

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Colaboración con Bomberos Oficiales de Bogotá

Para fortalecer las acciones en terreno, se coordina el apoyo del Cuerpo de Bomberos Oficial de Bogotá, que enviará 25 unidades al Cesar. Estas estarán acompañadas por dos aeronaves de la Policía Nacional para realizar descargas desde el aire. Ramírez enfatizó que este equipo vendrá con una logística autosostenible inicial por cinco días, tras lo cual se espera que el municipio proporcione el apoyo logístico necesario.

Desafíos en el control de incendios

La magnitud y complejidad de los incendios han sido difíciles de controlar debido a las condiciones climáticas adversas, incluyendo fuertes vientos y altas temperaturas. Las autoridades han alertado sobre la abundante materia combustible en las áreas afectadas, lo que complica aún más los esfuerzos por extinguir las llamas. La Procuraduría General de la Nación ha solicitado informes sobre las acciones preventivas implementadas por las autoridades locales, subrayando la importancia de una respuesta coordinada ante esta crisis ambiental.

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Petrona Romero Navarro, jefa de la Oficina Departamental para la Gestión del Riesgo y Cambio Climático, ha enfatizado: “El mensaje es a las comunidades. Ayúdennos a que estas situaciones no se presenten”. La comunidad juega un papel crucial en la prevención y mitigación del impacto ambiental.

Incendios activos y falta de recursos

Actualmente, se reportan incendios activos en áreas como la vía a Valencia de Jesús y Las Casitas, jurisdicción de Valledupar. Sin embargo, una fuente que pidió reserva de identidad, indicó que no hay coordinación con la Oficina Municipal de Gestión del Riesgo. La falta de recursos técnicos y herramientas adecuadas ha limitado significativamente la capacidad de respuesta.

Con el apoyo aéreo y terrestre disponible, se busca contener esta crisis antes que cause más daños irreparables a los recursos naturales y a las vidas humanas en la región.

Por Redacción EL PILÓN