En cuatro buses retornaron a sus lugares de origen los 138 estudiantes cesarenses de la Universidad de Pamplona, Norte de Santander, regresaron a sus hogares luego de pedir el traslado debido a la difícil situación que afrontaban a raíz del confinamiento decretado por el Gobierno nacional.

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Presos de la desesperación, los jóvenes levantaron sus voces en señal de protesta a través de las redes sociales, y luego enviaron una carta solicitando un corredor humanitario, para volver con sus familiares, ante la secretaría de Gobierno del Cesar. Una de las peticiones fue el envío de buses para poder retornar a Valledupar debido a que la mayoría no contaba con recursos económicos para pagar un viaje de retorno.

“Cuando nosotros hicimos la solicitud desde la Gobernación del Cesar, a través del secretario de Gobierno, nos manifestaron que podíamos contar con el apoyo, pero era necesario una espera, teniendo en cuenta que, para esos días estaban realizando las entregas de las ayudas humanitarias, y fue así como 20 días después de nuestra primera querella, fuimos atendidos”, señaló la estudiante Kerrys González.

Luego de recibir el aval, los estudiantes se pusieron manos a la obra y organizaron todo lo concerniente a la logística en compañía de la Policía Nacional. Los estudiantes tuvieron como destino: Aguachica, Cuatro Vientos, Chiriguaná y Valledupar.

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Antes de continuar con el recorrido, el grupo de jóvenes hicieron una parada en el municipio de Aguachica, donde fueron valorados y se les practicó el control de temperatura, exámenes que fueron realizados con el apoyo del personal del Hospital Regional José Padilla Villafañe de dicho municipio.

Luego de los exámenes los estudiantes retornaron a sus lugares de origen en los municipios de Pailitas, Curumaní, El Paso, Bosconia, Codazzi, La Jagua de Ibirico y Valledupar.

La principal causa de la solicitud fue a raíz de la falta de recursos de los padres de familia, quienes no están devengando salarios, pero sus hijos debían continuar con los estudios, mismos que se están realizando vía virtual y no era necesario permanecer en la ciudad nortesantandereana, por lo que los educandos señalaron que “pueden seguir enviando los trabajos virtualmente desde sus casas”.

Esta situación se notó en el rendimiento de los estudiantes que manifestaron no estar cómodos con la situación que estaban pasando desde la distancia y además no contar con el entorno familiar para que les brindara atención en este momento de pandemia mundial, según lo docentes.

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Los estudiantes son de estratos 1 y 2, situación que hace más complicada la manutención para ellos en la Universidad de Pamplona, pero ahora pueden seguir cumpliendo con sus labores académicas desde sus hogares.

UN ALIVIO

Los estudiantes manifestaron que el retorno les ha significado un alivio familiar, mientras las cosas vuelven a la normalidad, y sus padres no tendrán que preocuparse por buscar el dinero necesario para pagar la manutención. “Ahora en casa será más fácil poder concentrarse en los estudios”, comentó un estudiante.

Por: Robert Cadavid / EL PILÓN