Los habitantes del barrio Villa Miriam, al suroccidente de Valledupar, denunciaron los frecuentes ataques de los delincuentes y solicitaron mayor compromiso de las autoridades para esta zona de la ciudad.

Los moradores de este sector aseguraron que los principales problemas de la comunidad son: inseguridad, los jóvenes que consumen droga y la falta de iluminación en algunas calles, por lo que solicitaron a la Concesión de Alumbrado Público para que revise las luminarias.

De igual manera, los moradores del sector indicaron que es necesario el aumento del patrullaje de la Policía. “Aquí no hay pie de fuerza. No hay quién le haga seguimiento a la policía y ahora con la doble funcionalidad que tienen, porque ya no son solamente agentes para salvaguardar la seguridad sino que también son agentes de tránsito, pendiente a las motos”, expresó Gregorio Zuleta, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio.

Zuleta como líder de la comunidad pidió a las autoridades que tengan más contacto con los habitantes de este barrio, “a veces llamamos y ni siquiera contestan. Hace falta demasiado acercamiento, aunque ha bajado el consumo de sustancias psicoactivas en el parque”, acotó el presidente de la JAC.

Los moradores de ese sector se mantienen a la espera de una intervención profunda de las autoridades, dado que califican que hasta ahora “solo han puesto pañitos de agua tibia”.

Otros problemas
Villa Miriam se fundó en el año 1986 y gracias a la colaboración de la comunidad se ha notado el desarrollo del barrio, sin embargo hoy se ve afectado por algunas necesidades. Son varias las calles que sufren por el rebosamiento de manjoles.

Gregorio Zuleta aseguró que aunque la empresa de servicios públicos de Valledupar ha estado presta a ayudar, esta situación es un problema continuo por el taponamiento que se genera. “Por los años que tiene Villa Miriam, la tubería ya está obsoleta”, indicó el presidente de la Junta.

En Villa Miriam según los moradores, los principales problemas de la comunidad son la inseguridad, los jóvenes que consumen droga y la falta de iluminación en algunas calles.

Andreina Bandera / EL PILÓN
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