El caudal del río que nutre el acueducto de Valledupar llegó a 4.497 litros por segundo, es decir, un 60 % menos que el de su corriente habitual. Corpocesar hace llamado para ahorrar agua.
La corriente del río Guatapurí hoy es tan baja que las personas no tienen necesidad de sumergirse en sus frías aguas para atravesarlo, caminando sobre el caudal puede pasarse de una orilla a otra problema alguno. Aunque no se pueda vivir del pasado, este es un precedente de lo que podría suceder en el futuro con el afluente que surte el acueducto de Valledupar.
En la actualidad, el Guatapurí tiene un caudal remanente de 4.497 litros por segundo. A la fecha, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, tiene asignado a concesiones 2.600 litros por segundo, dejando una corriente de 1.897 litros. Existe una disminución del 60 % en la oferta hídrica teniendo en cuenta que el caudal base, cuando no hay verano, es de 11.260 litros por segundo, de estos el caudal asignado a concesiones llega a 7.863 litros por segundo, dejando solo un caudal remanente o corriente de 3.396 litros.
El tema de las concesiones es “el mayor problema ambiental que tiene el departamento”, así lo argumentó Kaleb Villalobos Brochel, director de Corpocesar, a quien le preocupa la falta de conciencia y además los desvíos que están haciendo privados para regar cultivos y sostener fincas, sin tener permiso de la corporación. Las concesiones son entregadas a particulares bajo la resolución 139 del 4 de agosto de 1987.
La falta de seguimiento y organización en la Oficina Jurídica de Corpocesar, en años anteriores, ha ocasionado un ‘cuello de botella’ para la entidad según lo explicó su director. En los últimos años la polémica del afluente que nace en la Sierra Nevada de Santa Marta, en la unión de las lagunas Kokigui, Curiba, Naboba, Dumariba, que además le dan vida a otros ríos, se centra en cómo disminuye el Guatapurí y por qué no se taponan las concesiones en una temporada como la actual, donde el fenómeno de El Niño amenaza con reducir más el agua en los ríos de Colombia.
A la fecha, Corpocesar tiene más de 1.600 concesiones otorgadas en el Cesar sobre ríos como el Guatapurí, Ariguaní, Cesar, quebrada Buturama. Alrededor de 155 están sobre el cauce del río Guatapurí, siendo la empresa de Servicios Públicos de Valledupar, Emdupar, el primer beneficiario con una asignación de 1.800 litros por segundo.
Corpocesar es la autoridad ambiental, encargada de vigilar, hacer seguimiento y sancionar a quienes no cumplan con lo estipulado en materia ambiental, pero el Municipio, según la Ley 99 de 1993, es la primera autoridad encargada de los temas ambientales.
Tres concesiones claves
El acueducto de Valledupar, el Batallón de Ingenieros y el acueducto regional para los corregimientos de Los Corazones, Guacoche y Guacochito, son las tres concesiones más grandes del río Guatapurí.
“Son las que presentan mayor problema. Por ejemplo en la que sale del río Guatapurí al Batallón de Ingenieros descubrimos que a la concesión se le están pegando unos agricultores, de manera ilegal, entonces no es la captación del Ejército sino que están abusando otras personas y tenemos que resolver el problema con la Alcaldía”, explicó el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos.
La Corporación Ambiental descubrió además que desde 1987, cuando iniciaron los permisos a particulares, hasta hoy, el caudal del río es aprovechado por personas distintas a quienes tiene la concesión. “La corporación ha venido actualizando la base de datos porque los usuarios que están usufructuando las concesiones no son los mismos que las solicitaron, estamos en ese trabajo por eso hicimos un convenio con el Ministerio de Ambiente, llevamos unos ochos meses de actualización”, indicó Villalobos Brochel.
Otra de las metas a cumplir por Corpocesar es darle caducidad a algunas de las concesiones de los ríos del Cesar. Actualmente hay más de 30 concesiones notificadas para caducidad, porque tienen el permiso y nunca han construido las obras de infraestructura que se necesita para que haya un buen manejo del agua.
“La concesión para el acueducto de Los Corazones, Guacoche y Guacochito, tiene el mismo problema del Batallón de Ingenieros, se están pegando a veces de manera fraudulenta, entonces eso genera que la concesión requiera de más agua de la necesaria. Cuando cerramos la concesión se quedan esos corregimientos sin agua, pero básicamente porque en el recorrido del agua la están captando”, declaró Kaleb Villalobos.
A la fecha Corpocesar no ha identificado los nombres exactos de quiénes se llevan las aguas del Guatapurí de manera ilegal, pero puso en conocimiento la situación ante la Alcaldía de Valledupar, al igual que a la Policía Nacional. La próxima semana se realizará una audiencia pública en la capital del Cesar, para tratar el tema de las concesiones hídricas en el departamento, anunció el director de la Corporación.
No pagan el agua
Más allá de las concesiones entregadas por Corpocesar, las cuentas en la corporación no cuentan. En la actualidad se facturan unos 1.600 millones de pesos al año por unas 1.800 concesiones en todo el Cesar, pero solamente se alcanzan a recaudar entre 200 y 250 millones de pesos en dinero, quedando en evidencia que los concesionarios no pagan el agua.
“La gente en su mayoría no paga y no es un problema netamente del Cesar, el tema lo estamos tocando con el Ministro de Ambiente porque gastamos más generando esas facturas que el dinero que pagan los usuarios”, manifestó Kaleb Villalobos.
Corpocesar estableció convenios con centrales de riesgos financieros para realizar cobros coactivos, para que los deudores tengan procesos de embargos y no puedan acceder al portafolio de servicios que ofrece el sistema financiero.
¿Cuándo se dará la caducidad?
Para que una concesión cumpla completamente con lo establecido por Corpocesar, en primer lugar debe tener una compuerta que regule el litraje de agua por segundo cedida por la entidad ambiental para sus beneficios, después el líquido que entra debe regresar al río, que en la mayoría de concesiones no se hace.
El seguimiento a este tema inició el año anterior, la Oficina Jurídica de la entidad ambiental dijo que los propietarios de concesiones en el Guatapurí tienen hasta tres meses para presentar ante la Corporación los diseños y la construcción de compuertas que regulen la entrada y salida del agua, de lo contrario perderán dicho permiso.
El mayor beneficiario
La empresa Emdupar encargada de suministrar el agua a la población de Valledupar es el mayor beneficiario del río Guatapurí. Bajo la resolución 022 del febrero 25 de 2003, es la octava derivación, parte sexta derecha número 8 (Canal Municipal), por donde pueden pasar 1.800 litros por segundos hacia su planta de tratamiento que despacha el líquido para más de 450 mil habitantes, porque está comprobado que el acueducto de la capital del Cesar surte a municipios del Cesar, La Guajira y hasta el Magdalena.
No al derroche
El gobernador del Cesar, Francisco Ovalle Angarita, tiene como estrategia ‘Todos contra el derroche’, campaña educativa con la que se pretende sensibilizar y cambiar la mentalidad de los cesarenses frente al uso razonable del consumo de agua, teniendo en cuenta que según un estudio realizado por el Ministerio de Ambiente, el departamento del Cesar es uno de los más vulnerables por la extrema sequía causada por el fenómeno de El Niño.
El próximo sábado, Francisco Ovalle se desplazará al municipio de Astrea con el director Nacional de la Oficina de Gestión del Riesgo, Carlos Iván Márquez, para revisar los pozos profundos que allí se construyen y además habrá un Consejo Departamental de Gestión del Riesgo.
Sigue El Niño
Colombia vive el enero más caluroso en cinco años por los efectos del fenómeno de El Niño, el segundo más fuerte de la historia y que ha reducido las lluvias y provocado que se declare la alerta roja en 20 de los 32 departamentos por riesgo de incendios, de acuerdo con el Ideam.
Existe un déficit en las lluvias del 65 %, eso generó un aumento en la temperatura normal de 2,3 grados centígrados e incrementos en los precios de los alimentos. La ausencia de precipitaciones ha hecho que el Gobierno Nacional haya invertido más de 1,4 billones de pesos en ayudas para las zonas más afectadas.
Según los pronósticos del Ideam, el fenómeno de variabilidad climática está en su etapa más fuerte y se extendería hasta el mes de marzo.
Puntos de vista
Francisco Cueta, Bañista:
Me da mucha tristeza como vallenato verlo así, en mis 37 años es primera ocasión que lo veo así. Tenemos que reflexionar y cuidar este río tan hermoso que tenemos.
Neíl Pertuz, Compositor:
Estoy sorprendido con el río Guatapurí, no tiene agua. Las autoridades tienen cierta responsabilidad, pero los habitantes tienen más porque este es nuestro río y el que nos surte de agua.
A la fecha, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, tiene asignado a concesiones 2.600 litros por segundo, dejando una corriente de 1.897 litros por segundo para el río.
“La gente en su mayoría no paga y no es un problema netamente del Cesar, el tema lo estamos tocando con el Ministro de Ambiente porque gastamos más generando esas facturas que el dinero que pagan los usuarios”: Kaleb Villalobos.
Por Carlos Mario Jiménez
[email protected]
El caudal del río que nutre el acueducto de Valledupar llegó a 4.497 litros por segundo, es decir, un 60 % menos que el de su corriente habitual. Corpocesar hace llamado para ahorrar agua.
La corriente del río Guatapurí hoy es tan baja que las personas no tienen necesidad de sumergirse en sus frías aguas para atravesarlo, caminando sobre el caudal puede pasarse de una orilla a otra problema alguno. Aunque no se pueda vivir del pasado, este es un precedente de lo que podría suceder en el futuro con el afluente que surte el acueducto de Valledupar.
En la actualidad, el Guatapurí tiene un caudal remanente de 4.497 litros por segundo. A la fecha, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, tiene asignado a concesiones 2.600 litros por segundo, dejando una corriente de 1.897 litros. Existe una disminución del 60 % en la oferta hídrica teniendo en cuenta que el caudal base, cuando no hay verano, es de 11.260 litros por segundo, de estos el caudal asignado a concesiones llega a 7.863 litros por segundo, dejando solo un caudal remanente o corriente de 3.396 litros.
El tema de las concesiones es “el mayor problema ambiental que tiene el departamento”, así lo argumentó Kaleb Villalobos Brochel, director de Corpocesar, a quien le preocupa la falta de conciencia y además los desvíos que están haciendo privados para regar cultivos y sostener fincas, sin tener permiso de la corporación. Las concesiones son entregadas a particulares bajo la resolución 139 del 4 de agosto de 1987.
La falta de seguimiento y organización en la Oficina Jurídica de Corpocesar, en años anteriores, ha ocasionado un ‘cuello de botella’ para la entidad según lo explicó su director. En los últimos años la polémica del afluente que nace en la Sierra Nevada de Santa Marta, en la unión de las lagunas Kokigui, Curiba, Naboba, Dumariba, que además le dan vida a otros ríos, se centra en cómo disminuye el Guatapurí y por qué no se taponan las concesiones en una temporada como la actual, donde el fenómeno de El Niño amenaza con reducir más el agua en los ríos de Colombia.
A la fecha, Corpocesar tiene más de 1.600 concesiones otorgadas en el Cesar sobre ríos como el Guatapurí, Ariguaní, Cesar, quebrada Buturama. Alrededor de 155 están sobre el cauce del río Guatapurí, siendo la empresa de Servicios Públicos de Valledupar, Emdupar, el primer beneficiario con una asignación de 1.800 litros por segundo.
Corpocesar es la autoridad ambiental, encargada de vigilar, hacer seguimiento y sancionar a quienes no cumplan con lo estipulado en materia ambiental, pero el Municipio, según la Ley 99 de 1993, es la primera autoridad encargada de los temas ambientales.
Tres concesiones claves
El acueducto de Valledupar, el Batallón de Ingenieros y el acueducto regional para los corregimientos de Los Corazones, Guacoche y Guacochito, son las tres concesiones más grandes del río Guatapurí.
“Son las que presentan mayor problema. Por ejemplo en la que sale del río Guatapurí al Batallón de Ingenieros descubrimos que a la concesión se le están pegando unos agricultores, de manera ilegal, entonces no es la captación del Ejército sino que están abusando otras personas y tenemos que resolver el problema con la Alcaldía”, explicó el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos.
La Corporación Ambiental descubrió además que desde 1987, cuando iniciaron los permisos a particulares, hasta hoy, el caudal del río es aprovechado por personas distintas a quienes tiene la concesión. “La corporación ha venido actualizando la base de datos porque los usuarios que están usufructuando las concesiones no son los mismos que las solicitaron, estamos en ese trabajo por eso hicimos un convenio con el Ministerio de Ambiente, llevamos unos ochos meses de actualización”, indicó Villalobos Brochel.
Otra de las metas a cumplir por Corpocesar es darle caducidad a algunas de las concesiones de los ríos del Cesar. Actualmente hay más de 30 concesiones notificadas para caducidad, porque tienen el permiso y nunca han construido las obras de infraestructura que se necesita para que haya un buen manejo del agua.
“La concesión para el acueducto de Los Corazones, Guacoche y Guacochito, tiene el mismo problema del Batallón de Ingenieros, se están pegando a veces de manera fraudulenta, entonces eso genera que la concesión requiera de más agua de la necesaria. Cuando cerramos la concesión se quedan esos corregimientos sin agua, pero básicamente porque en el recorrido del agua la están captando”, declaró Kaleb Villalobos.
A la fecha Corpocesar no ha identificado los nombres exactos de quiénes se llevan las aguas del Guatapurí de manera ilegal, pero puso en conocimiento la situación ante la Alcaldía de Valledupar, al igual que a la Policía Nacional. La próxima semana se realizará una audiencia pública en la capital del Cesar, para tratar el tema de las concesiones hídricas en el departamento, anunció el director de la Corporación.
No pagan el agua
Más allá de las concesiones entregadas por Corpocesar, las cuentas en la corporación no cuentan. En la actualidad se facturan unos 1.600 millones de pesos al año por unas 1.800 concesiones en todo el Cesar, pero solamente se alcanzan a recaudar entre 200 y 250 millones de pesos en dinero, quedando en evidencia que los concesionarios no pagan el agua.
“La gente en su mayoría no paga y no es un problema netamente del Cesar, el tema lo estamos tocando con el Ministro de Ambiente porque gastamos más generando esas facturas que el dinero que pagan los usuarios”, manifestó Kaleb Villalobos.
Corpocesar estableció convenios con centrales de riesgos financieros para realizar cobros coactivos, para que los deudores tengan procesos de embargos y no puedan acceder al portafolio de servicios que ofrece el sistema financiero.
¿Cuándo se dará la caducidad?
Para que una concesión cumpla completamente con lo establecido por Corpocesar, en primer lugar debe tener una compuerta que regule el litraje de agua por segundo cedida por la entidad ambiental para sus beneficios, después el líquido que entra debe regresar al río, que en la mayoría de concesiones no se hace.
El seguimiento a este tema inició el año anterior, la Oficina Jurídica de la entidad ambiental dijo que los propietarios de concesiones en el Guatapurí tienen hasta tres meses para presentar ante la Corporación los diseños y la construcción de compuertas que regulen la entrada y salida del agua, de lo contrario perderán dicho permiso.
El mayor beneficiario
La empresa Emdupar encargada de suministrar el agua a la población de Valledupar es el mayor beneficiario del río Guatapurí. Bajo la resolución 022 del febrero 25 de 2003, es la octava derivación, parte sexta derecha número 8 (Canal Municipal), por donde pueden pasar 1.800 litros por segundos hacia su planta de tratamiento que despacha el líquido para más de 450 mil habitantes, porque está comprobado que el acueducto de la capital del Cesar surte a municipios del Cesar, La Guajira y hasta el Magdalena.
No al derroche
El gobernador del Cesar, Francisco Ovalle Angarita, tiene como estrategia ‘Todos contra el derroche’, campaña educativa con la que se pretende sensibilizar y cambiar la mentalidad de los cesarenses frente al uso razonable del consumo de agua, teniendo en cuenta que según un estudio realizado por el Ministerio de Ambiente, el departamento del Cesar es uno de los más vulnerables por la extrema sequía causada por el fenómeno de El Niño.
El próximo sábado, Francisco Ovalle se desplazará al municipio de Astrea con el director Nacional de la Oficina de Gestión del Riesgo, Carlos Iván Márquez, para revisar los pozos profundos que allí se construyen y además habrá un Consejo Departamental de Gestión del Riesgo.
Sigue El Niño
Colombia vive el enero más caluroso en cinco años por los efectos del fenómeno de El Niño, el segundo más fuerte de la historia y que ha reducido las lluvias y provocado que se declare la alerta roja en 20 de los 32 departamentos por riesgo de incendios, de acuerdo con el Ideam.
Existe un déficit en las lluvias del 65 %, eso generó un aumento en la temperatura normal de 2,3 grados centígrados e incrementos en los precios de los alimentos. La ausencia de precipitaciones ha hecho que el Gobierno Nacional haya invertido más de 1,4 billones de pesos en ayudas para las zonas más afectadas.
Según los pronósticos del Ideam, el fenómeno de variabilidad climática está en su etapa más fuerte y se extendería hasta el mes de marzo.
Puntos de vista
Francisco Cueta, Bañista:
Me da mucha tristeza como vallenato verlo así, en mis 37 años es primera ocasión que lo veo así. Tenemos que reflexionar y cuidar este río tan hermoso que tenemos.
Neíl Pertuz, Compositor:
Estoy sorprendido con el río Guatapurí, no tiene agua. Las autoridades tienen cierta responsabilidad, pero los habitantes tienen más porque este es nuestro río y el que nos surte de agua.
A la fecha, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, tiene asignado a concesiones 2.600 litros por segundo, dejando una corriente de 1.897 litros por segundo para el río.
“La gente en su mayoría no paga y no es un problema netamente del Cesar, el tema lo estamos tocando con el Ministro de Ambiente porque gastamos más generando esas facturas que el dinero que pagan los usuarios”: Kaleb Villalobos.
Por Carlos Mario Jiménez
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