EL PILÓN 

Los habitantes del barrio Chiriquí, en el sur de Valledupar, hicieron un llamado a la Alcaldía a fin de que les pueda solucionar al menos la mitad de las problemáticas que tiene este sector, antes de que el actual periodo de Gobierno municipal termine.

Dieron a  saber que el lunes de esta semana realizaron una asamblea con la mayoría de los residentes y con la presidenta de la Junta de Acción Comunal, Mallerlys Canelo Oñate, para definir qué hacer si no son escuchados; entre las opciones está tomarse las vías de hecho sobre la calle 44. 

“Tenemos tres calles que no cuentan con alcantarillado y esto nos está trayendo problemas de salubridad, en época de lluvias la situación se complica porque el agua se devuelve para las casas”, dijo un habitante del barrio. 

Otro de los inconvenientes que tienen es que desde hace varios meses la buseta de transporte público dejó de ingresar al barrio, al parecer, desde que iniciaron las nuevas rutas del Sistema Integrado de Transporte de Valledupar. 

“Ahora nos toca caminar hasta la calle 27 para poder tomar una buseta y en este barrio la mayoría somos adultos mayores que no podemos hacer largas caminatas”, expresó un residente. 

En este sentido, la presidenta de la JAC, explicó: “La Alcaldía no nos presta atención ni siquiera a los derechos de petición que pasamos, yo misma me he sentado con el alcalde Mello Castro a exponerle todas las problemáticas que tenemos y junto a sus funcionarios solo dice que sí, pero los hechos no llegan. No es posible que en casi cuatro años al barrio no le hayan hecho ningún tipo de inversión realmente estamos cansados”. 

La líder comunal añadió que la administración municipal no ha llevado programas sociales. “Por más que hemos solicitado jornadas de salud no las hacen, ni programas sociales para rescatar a tanto jóvenes de la drogadicción, este sector está muy olvidado”, refirió Canelo Oñate. 

Igualmente manifestó que tienen 28 lámparas del alumbrado público dañadas, lo cual es aprovechado por los delincuentes que cometen atracos mayormente en las noches por la oscuridad.

Tampoco tienen agua potable constante ya que el servicio es deficiente. 

Además Mallerlys Canelo Oñate recordó que desde hace varios años el lote de cesión dejado para la construcción de una casa comunal para el adulto mayor fue invadido y hasta la fecha no han realizado desalojo.  “Este es un proceso que está demandado ante la Fiscalía y no avanza, los invasores son un grupo de personas que quisieron hacerlo”, subrayó. 

En relación a las rutas de transporte público, el SIVA señaló que a ningún barrio de la ciudad les han quitado el servicio solo que a medida que una buseta va ingresando, sale una de las anteriores, conocidas como las ‘naranjas’. 

“Para esa zona pasa la ruta 313 que recorre la calle 27, la urbanización Lorenzo Morales, Villa Jaidith y es cercana a Chiriquí, sin embargo, estamos a la espera que se implementen más rutas en los próximos días”, dijo un vocero del SIVA.